Hallownest; El Reino por Reconstruir (Libro 2)

Capítulo 34: Blitz

   La esposa de Hollow, es uno de los más grandes misterios de Hallownest, no se sabe si murió, si, está viva, se escondió o se fue del reino, pero por esos azares del destino (o, poder del guion, llámenlo como quieran), Bretta, quien ahora es una gran escritora, se topo con el diario de una antigua cantante de Pleasure House, el cuál, revela un poco más, de está insecto.

● ¡Millibelle, querida, no necesitamos tanta ceniza! — grita la señora Millabelle.
● ¡Mamá, pero la ceniza de Wyrm se vende a muy buen precio! — grita la pequeña Millibelle, quien tiene su canastilla llena.

Lo que provoca la risa de Marissa, quien también está en el lugar.

● ¿Qué voy hacer con está pequeña avara? — bufa la insecto, muy parecida a su hija de mayor — ¡apresúrate Millibelle o te quedarás sola! — termina gritando, para atraer, a la, en ese entonces, pequeña estafadora, pero, no da resultado.
● Yo, iré por ella, señora Millabelle — sonríe Marissa y va hacia donde se encuentra la pequeña — Millibelle, Millibelle, ¿estás bien? — termina preguntando, al ver, a la susodicha estática.
● Marissa, ¿eso es un cadáver? — habla la pequeña estafadora, indicando un bulto blanco a la distancia.
● ¿Un cadáver? — se pregunta la cantante, confundida, hasta que divisa dicho bulto, el cual, nota que se mueve — Millibelle, ve con tu madre, yo, revisaré que es eso — ordena y tomando un palo, va con dirección al bulto, de forma muy cautelosa.
● No me hagas daño, por favor — el susurro de una hembra, sale de entre unas telas desgastadas y rotas.
● ¿Quién eres? — pregunta Marissa, sin bajar la guardia y acercarse demasiado.
● No lo sé, no recuerdo nada — responde la insecto, comenzando a sollozar — ayúdame por favor, ya no tengo fuerzas.
● Espera, espera un poco — solicita Marissa y hace una seña a Millabelle, para que la asista, al llegar esta, solicita — ¿tienes agua y comida?
● Tengo, pero, ¿qué harás? — pregunta la susodicha, sacando lo solicitado.
● Gracias — interrumpe Marissa, tomando los artículos y volando, baja donde se encuentra la insecto herida, la acomoda — bebe primero — espera a que la joven trague — ahora come un poco.
● Gracias — casi en un suspiro, agradece la hembra.
● ¡Oh!, ¡por los dioses!, ¡jovencita, si pareces un cadáver! — grita Millabelle, cuando ve el estado de la insecto — pero, ¿quién te hizo esto?
● No, no lo sé, la verdad, no recuerdo nada — solloza angustiada nuevamente la hembra.
● Millabelle, debemos sacarla de los límites del reino, quizás viene de fuera de Hallownest y por eso no recuerda nada — habla Marissa.
● Es probable — asiente la insecto dueña del Hot Spring en City of Tears — apresurémonos — sugiere.
● Por supuesto, sube la a mi espalda — propone Marissa, plegando sus alas, formando una capa y como pueden la suben, ya que, la jovencita es bastante alta y está bastante débil — aguanta, pronto estaremos en casa — anima la mariposa.
● Gracias — vuelve a susurrar sin fuerzas la hembra y se sujeta como puede, mientras Millabelle, la toma por detrás, para que no caiga de los brazos de Marissa.

Así comienza la caminata y luego de un buen recorrido, toman a la insecto sin memoria y la meten al Hot Spring, para que sus pequeñas heridas sean sanadas, mientras Millabelle prepara algo liviano para que coma, Marissa, busca algo de ropa, para que la joven utilice, ya que, claramente sus harapos, fueron en algún momento, hermosos ropajes.

● ¿Te duele el ala que tienes rota? — pregunta una curiosa Millibelle, quien quedó a cargo de la invitada.
● No, no me duele, pero, mi cráneo sí — responde la insecto.
● ¿Tienes nombre? — vuelve hacer otra pregunta la mini estafadora.
● Supongo que sí, aunque no sé cuál es — responde la joven, casi sin voz.
● Eres linda, quizás te atraparon en las afueras del reino y te quería vender como esclava y escapaste — la pequeña, empieza a inventarse una historia en la cabeza.
● Quizás — educadamente responde la sin memoria.
● ¡Millibelle!, ¡Deja que la señorita descanse! — grita su madre desde la entrada del Hot Spring, ordenando — ve con Snail y tráela de forma discreta.

La pequeña estira la garra, la madre la mira advirtiendo.

● ¡Está bien!, ¡está bien!, lo haré gratis — gruñe Millibelle, y se va a toda prisa.
● ¿Cuándo aprenderá que no todo es geo? — suspira Millabelle (spoiler: nunca), haciendo que la invitada, suelte una débil risilla.

Más tarde, esa misma jornada, ya tienen a la joven acostada en una de las habitaciones de Pleasure House, siendo revisada por la Chaman, quien posteriormente, le da una posición para dormir.

● Millabelle, Marissa, acompáñenme — solicita la anciana caracol, más seria de lo habitual.
● ¿Qué sucede Snail? — pregunta Millabelle.
● ¿Dónde la encontraron? — responde la anciana, con una pregunta.
● En los límites del reino — contesta Marissa.

La Chaman, piensa un poco y luego de un suspiro suelta.

● Ella, no es un insecto común, tiene esencia de un ser superior.
● Quizás una sacerdotisa desterrada o una noble en desgracia — propone Millabelle.
● Probablemente la hayan expulsado de su tribu, por el defecto de su ala — susurra Marissa apenada, agregando — al ser una mariposa, sino eres perfecta, terminas siendo desterrada, más, si no puedes volar.
● Es probable, su pérdida de memoria y su ala rota, se deben a que vivió un evento traumático, pero, tiene un gran poder de alma, así que, cuando se recupere, le pediré que me deje ser su maestra — la sonrisa de la anciana caracol, vuelve — por ahora cuiden bien de ella, quizás con el tiempo, recuerde su nombre y de donde viene.
● Así lo haremos — reverencia Marissa.

Y la Chaman se retira.

● Esa vieja, nunca pierde la oportunidad de buscar un nuevo insecto a quien torturar con sus lecciones — suelta Millabelle, lo que hace reír a la mariposa.

Luego de este primer encuentro, las jornadas pasaron rápido y la joven sin memoria se recupera del todo, comienza a entrenar con la anciana Snail, a la vez que, trabaja haciendo vestuarios en Pleasure House,  inclusive, hay nobles que le solicitan algún accesorio o vestido elegante, también comienza a salir sola a la ciudad, sobre todo a la gran biblioteca de Hallownest, para leer de vez en cuando, incluso y gracias a esto, ella, encontró un nombre de su agrado, Blitz, así que, todos comenzaron a llamarla de esa forma, en si, su vida en Hallownest, es bastante tranquila, hasta que una jornada, volviendo de la biblioteca, ve a Marissa beber el té en una tienda, se acerca y se sienta junto a ella, charlan de forma amena, aunque, algo llama poderosamente su atención.

● Marissa — interrumpe Blitz.
● Dime — responde la mariposa, dejando su taza.
● ¿No crees que hay demasiados insectos en ese lugar? — Blitz, indica hacia el tumulto.
● ¡Por los dioses!, ¡son los cinco del rey y Lurien! — grita Marissa.
● ¿Y, qué hay con eso? — sin entender pregunta Blitz.
● Es probable que el rey Pálido se encuentre ahí, ¿entiendes? — animada, se levanta Marissa, solicitando la cuenta y al pagarla, toma a Blitz de las garras — ¡Vamos!, ¡nunca nadie ve al rey de buenas a primeras!, ¡quiero ver que tan imponente es!.
● ¡Está bien!, ¡está bien!, ¡tranquila! — grita Blitz, siendo arrastrada por su amiga.

Ambas corren al tumulto y al soltarse de su amiga, Blitz, se cubre por completo, mirando y escuchando de lejos.

● Ese rey no me agrada — susurra la joven, mirando al monarca con desconfianza.
● Bueno, no es tan imponente como pensaba, pero, los cinco son otra historia — sonríe la mariposa, indicando con su dedo a Ze’mer.
● Eres incorregible, Marissa — regaña Blitz, negando con la cabeza.
● Lo sé — sonríe la hermosa cantante.

Ambas ríen, pero, se ven interrumpidas por el grito del público, quien anima a Hegemol, el poderoso.

● ¿Qué le pasa al idiota del rey?, ¡ese jovencito, no tiene oportunidad contra la bestia de Hegemol! — piensa Blitz, conmocionada, al ver que inician una pelea — ¿nadie los va a detener?

De pronto, siente la garra de su amiga en su brazo, ya que, de forma inconsciente, iba a intervenir en el combate, Marissa, niega y Blitz, horrorizada mira la escena, le parece una tremenda locura y algo que se prolonga demasiado para su gusto.

● No puedo seguir viendo esto — agacha la cabeza, la joven extranjera, cuando siente un imponente grito.
● ¡Aprendiz! — se escucha gritar al rey Pálido enojado.

Esto hace que la joven vasija se distraiga y reciba de lleno, el golpe del mazo de Hegemol, enviándolo por los aires, aterrizando estrepitosamente, en ese instante, todos los curiosos se van raudos, al ver la furia de su rey, mientras que los cinco, junto a Lurien, colocan su rodilla al suelo, el monarca, pasa de ellos y se para frente a su desafortunada vasija.

● Si eres capaz de levantarte y llegar al castillo, volverás a entrenar en Royal Waterways, no quiero una vasija inútil, ¿entendido, Vessel? — gélidamente ordena el monarca y dando media vuelta, grita a los que aún quedan — ¡Nadie puede ayudarlo!, ¡Quien lo haga, será ejecutado por traición!

La conmoción es tal, que nadie se atreve acercarse al lugar, mientras que el monarca, se retira a palacio junto a los cinco, despidiéndose de Lurien, quien a su vez, deja un par de Vigías, cuidando que nadie se acerque al joven, quien está, casi inconsciente en el suelo, mientras la lluvia no deja de caer.

● Marissa, ¿podrías? — sugiere Blitz, indicando a los guardias.
● Estás loca, ¿sabías? — regaña su amiga.
● Lo sé — responde Blitz.

Lo que hace que Marissa bufé y después de respirar, sale al encuentro de los guardias, para distraerlos.

● Ven acá, no dejaré que mueras por un capricho de ese rey inútil — Blitz, susurra escondiendo, a una versión joven del futuro Hollow Knight.

Quien solo la mira, angustiado y casi en la inconciencia, ella, solo lo acomoda, bajo su capa y alas, dirigiéndose rápidamente a Pleasure House.

● Hola querida, ¿supiste lo que ocurrió allá abajo? — pregunta Millabelle, quien está junto a su hija, cerca de la entrada del Hot Spring.
● Sí, Millabelle, fue terrible — comienza a parlotear Blitz y continúa, tratando de no alargar la platica — pero, hoy a sido una jornada dura y estoy muy agotada, necesito pasar al Hot Spring, ahora mismo, pero te pido que solo dejes entrar a Marissa.
● ¡Hay!, querida siempre tan vergonzosa, está bien, pero, sabes el precio — le recuerda Millabelle.
● Lo sé,  aunque está vez, te pagaré un salario completo, para usarlo toda la jornada — propone la joven y dirigiéndose a la pequeña Millibelle, susurrando — ve con Marissa, está en la plaza mayor y dile secretamente, que traiga vendas y una capa por favor.

La pequeña estafadora, como era de esperar, estira su garrita hacia la joven Blitz, quien con una risilla, propone.

● Cuando vuelvas te daré, cuatro mil quinientos de geo, ¿Te parece?

Fueron palabras mágicas, puesto que la larvilla, desapareció en un segundo, mientras que Blitz, entra al Hot spring, adentrándose en el manantial, a la vez que descubre a Vessel, sumergiéndolo en las cálidas y curativas aguas.

● Si que pesas jovencito — resopla — pero, con esto te sentirás mejor — susurra Blitz, cerca del rostro de Vessel, animándolo.

Más tarde, la denominada vasija pura, entre abre los ojos pesadamente, sintiendo un paño frío en su cabeza.

● Ese Hegemol, es un bruto, afortunadamente no te dio más fuerte, o tendrías toda la coraza rota — murmura Blitz ensimismada y al notar que el jovencito abre los ojos por completo, mirándola fijamente, pregunta — ¿sucede algo? — y vuelve a quitar el paño de la cabeza de Vessel, para mojarlo otra vez.

Entonces, Vessel levanta la garra, para tocar el rostro de Blitz, pero, se retrae al escuchar unos pasos apresurados y unos gritos.

● ¡Blitz!, ¡Blitz!, ¡abre la puerta es urgente! — grita Marissa del otro lado.
● Trata de calmarte y dime, ¿Qué sucede? — la susodicha, abre e intenta tranquilizar a la hermosa mariposa.
● Amiga, escucha, Lurien está furioso, porque se enteró que alguien, ayudo al caballerito — comienza a relatar la cantante.
● Por mí, el vigilante se puede ir al abismo, si gusta — refunfuña la joven Blitz, sin darle importancia a las palabras de Marissa.
● Créeme, no le importara si eres extranjera, te matará, son órdenes del rey — suplica la mariposa y sugiere — por último, escondámoslo en tu bodega privada, hasta que todo pase, ¿te parece?
● Está bien, pero no lo dejaré, hasta que esté mejor — exige Blitz.
● ¡Hecho! — asiente Marissa y juntas, llevan a escondidas al joven Vessel a dicha bodega, la cual tiene una escotilla hacia Royal Waterways.
● Perdona que te deje solo, pero, te prometo que volveré a penas el fastidioso de Lurien, revise mi hogar — susurra Blitz, dejándolo en un nido improvisado.

Rato después, Blitz vuelve donde dejó.

● Supongo que usted es culpable de traición después de todo — Lurien habla tras ella.
● De que habla, solo vengo a mí bodega personal — se excusa Blitz.
● Entonces, no le importará que la revise — propone Lurien, de forma amenazante.
● Haga lo que quiera, total, es su ciudad — se mofa Blitz.

Lo que hace que Lurien se enoje y revise el lugar, junto a sus soldados, encuentra el nido improvisado, pero al ser telas, no le toma importancia, aunque, al ver la escotilla a Waterways, vuelve con Blitz.

● Está arrestada, bajo sospecha, hasta que averigüe donde escondiste a Vessel — sentencia Lurien, agregando — llévenla al calabozo de mi torre.

La joven Blitz, guarda silencio, porque sabe que cualquier cosa que diga, Lurien, puede usarla en su contra, aunque, realmente lo único que le preocupa, en ese momento, es saber, dónde fue Vessel.

● ¡Por los dioses!, ¡me alegro que te hayan liberado! — grita Marissa, abrazando a su amiga.
● Tranquila, no pudieron comprobar nada, así que, no les quedó de otra — sonríe Blitz.
● No vuelvas hacerme algo así, mi corazón no lo resistiría — llora Millabelle, desde la entrada.
● No, no lo haré otra vez, se los aseguro, porque me encargaré que Vessel, aprenda a defenderse a distancia — decidida les informa, la joven extranjera.

Millabelle y Marissa, la miran de reojo, con desaprobación y hasta se lleva un buen coscorrón de parte de está última, a lo que la joven Blitz, se queja como una larvilla, haciendo que las hembras rían, sin saber, que sus anteriores palabras, se harían realidad, un buen tiempo después.

● Bueno, quiero la tela roja, para mi vestido — solicita Marissa.
● Por supuesto — asiente Blitz, abriendo la puerta de su bodega, aunque alguien la toma por la garra y la hala hacia dentro, quedando frente a frente a otro insecto, quien le sonríe — ¿Vessel? — susurra la joven.
● ¿Vessel? — repite Marissa, entrando en ese instante — ¿tú, eres Vessel?

El ahora, no tan pequeño insecto, asiente, recibiendo un abrazo por parte de su antigua salvadora.

● ¡Me alegra que estés bien! — sonríe Blitz y de pronto, golpea el hombro del joven insecto — ¡Me tenías preocupada!, ¿por qué tardaste tanto en volver?
● Blitz, tranquilízate — aconseja Marissa y dándose cuenta que sobra, susurra al oído de su amiga — espero que te acuerdes que dije, tela roja.

Y se ríe, dejando al par solos, para que interactúen a gusto, siendo este el primer encuentro, que tuvo este par, después de tanto tiempo, luego serían más seguidos, ya que, Blitz, le enseñó a Vessel como usar su magia de alma, logrando por fin su técnica de las espadas de luz y con las jornadas, se fueron enamorando cada vez más, incluso Blitz, creo un lenguaje a base del movimiento de sus garras, para que a Vessel, no le costara comunicarse con ella, la Chaman y Marissa, todo, para esos dos iba muy bien.

● ¡Ese anillo debe valer una fortuna en geo! — grita Millabelle, al ver el hermoso anillo azul, en el dedo de Blitz.
● Me alegro por ti, querida — felicita Millabelle.
● Yo… tam…bién — solloza Marissa de felicidad.
● ¿Cuándo es la boda, querida? — pregunta Millabelle, quien es la más calmada.
● En tres jornadas — responde Blitz.
● ¡Tres jornadas! — grita Millabelle, dejando su lado sereno — ¡por los dioses!, ¡hay demasiado que preparar y no hay tiempo!
● Calma, Vessel y yo, no podemos tener una gran boda a causa del rey — comienza a explicar Blitz, continuando — así que, la boda será un secreto, nos cansaremos en Royal Waterway’s y ustedes, serán nuestras testigos, la Chaman, nos desposara.
● Entiendo — se calma Millabelle.
● Blitz, cuando se casen, salgan de Hallownest, o nunca estarán tranquilos — aconseja Marissa, algo más calmada.
● Lo sabemos — asiente Blitz.

Pero, eso nunca ocurrió, puesto que el mismo día de su boda, Vessel, es decir, Hollow Knight, había sido convocado al Black Egg Temple, de donde nunca salió y Blitz, recibió un misterioso mensaje del rey Pálido, el cuál, la hizo salir a toda prisa y jamás se supo de ella.

● Lo que te he contado, es solo un tercio de lo que vivió Blitz, no quise hablar más sobre la relación de esos dos, porque supongo que, a tu, “conocido”, no le gustaría que se supiera, más que mal, es un diario, no un libro — concluye Bretta.
● Es lógico — cabizbaja susurra Light, preguntando — ¿nunca se supo, dónde fue la esposa de…
● ¿El rey Hollow? — completa Bretta, y cuando Light asiente, está responde —  Marissa, no lo menciona en su diario — pero, ante la mirada de decepción de Light, agrega —… aunque, es probable, que el mensaje del rey, que dejó Blitz junto a su anillo, tengan la respuesta.
● ¿Junto a su anillo? — de pronto, la joven sanadora salta de su asiento y grita al recordar — ¡entonces, el pergamino que Lemm, me iba a dar era el mensaje del rey Pálido a Blitz!, ¡y no una garantía!, ¡por el trueno y la lluvia!, ¿qué he hecho?

Se amonesta así misma y cuando se disponía a correr, hacia la tienda del anticuario, Iselda, la interrumpe, ya que llega gritando, muy afligida.