Una Haitani más [Tokyo Revengers]

2

Un pequeño escalofrío recorrió su cuerpo ante la brisa, metió sus manos a los bolsillos de su abrigo en un intento de calentarse en lo que espera a que Manjiro aparezca.

Podría subir y buscarlo pero el cenizo le había informado que estaba hablando de algo importante con un amigo. Prefería no interrumpir con ello —para que no la descubran— y esperar con paciencia. De cualquier modo, había prometido que vendría por él después de la reunión.

— Ese enano no tendrá besos si no baja ahora...— murmura para si misma, sus dientes tiritaban ligeramente por el frío.

Y como si él hubiera logrado escucharla, se hicieron presentes sus pasos bajando por las escaleras del santuario.

Sin embargo... No estaba solo.

« Maldición... »

Sus nervios aparecieron y sus manos empezaron a sudar, como si el frío se hubiese ido.

Alzó la mirada y vió a Mikey bajando junto a otro chico a su lado. El cabello morado se le hizo conocido pero no recordaba exactamente de donde por sus nervios.

— Perdón si tardé demasiado.— habló el cenizo con una pequeña sonrisa.

A su lado, el pelimorado estaba algo desconcertado por la presencia de ________ ahí, reconociendola de inmediato.

— Ella...-

— ¡Oh, cierto!— le interrumpió Mikey, llendo junto con la fémina y tomándola de la mano.— Mitsuya, ella es _______ Haitani, mi novia.

Tanto la rubia como el pelimorado miraron a Mikey con sorpresa ante la naturalidad con la que hizo la presentación.

— ¿Eh?

— _______,— la volteo a ver, sonriendo ligeramente y señalando a Mitsuya.— él es Mitsuya Takashi, un amigo mío y capitán de la segunda división en Toman.

Un silencio algo incómodo se hizo presente tras esa extraña presentación, ninguno sabiendo que decir al respecto. _______ estaba nerviosa y avergonzada, sus mejillas se sentían calientes ante la seguridad de Mikey de decir abiertamente que son pareja; y Mitsuya por su parte, seguía tratando de procesar toda la información.

— Ya se conocen, así que nos vamos.— habló el cenizo nuevamente, tomando con más firmeza la mano de ______.— Nos vemos luego, Mitsuya.

Tras eso y sin decir más, comenzó a caminar llevando consigo a la fémina. Dejando atrás a un Mitsuya aún desconcertado.

« Mikey... ¡¿Tiene novia?! » 

[...]

— Lo siento... — repitió Mikey por quinta vez, con la cabeza gacha y una expresión de culpa.

______ mientras tanto, estaba frente a él con los brazos cruzados y una expresión molesta —por no mencionar que sus mejillas seguían rojas—, controlando las ganas que tenía de darle un buen golpe en la cabeza.

— ¿Podrias consultarme para la próxima?— cuestiona resoplando, su ceño fruncido marcándose más.

Sano ladeo la cabeza ligeramente, con un pequeño puchero y aún mantenimiento su expresión de culpa. Se veía adorable, pero _______ no iba a ceder.

— Lo sé... Lo siento.

Ella volvió a suspiras, pasando sus manos por su cabello en busca de calma. La situación había sido muy rápida para procesar y temía que algo pudiera pasar.

Si sus hermanos de enteran... Estaría muerta.

— Sé que fue estúpido pero, te puedo asegurar de que Mitsuya no dirá nada.— mencionó al notar la preocupación de la fémina, estirando una de sus manos para tomar la de ella.— Lo digo en serio.

Ella lo volvió a ver, sintiendo sus mejillas un poco más rojas ante su acción, sin embargo, no se opuso al toque.

— No vuelvas a hacerlo tan repentinamente, por favor...— dijo con un tono más tranquilo, suavizando su expresión.

Había perdido contra Mikey. Nuevamente.

El cenizo asiente, tirando de su brazo para poder abrazarla. La rodea por la cintura y oculta su rostro en el hueco de su cuello, aspirando su aroma.

— Lo prometo...

_______ sonrió ligeramente, también rodeandolo con sus brazos mientras acariciaba su cabello levemente. Mikey era como un niño al cual no le podía negar ser mimado.

— ¿Estoy perdonado?— cuestiona con tono bajo, aumentando un poco la presión de sus brazos alrededor de la cintura de la fémina.— ¿_______?

— Sigue en duda, enano.— respondió soltando una pequeña risa. Solo queriendolo molestar un poco.

Manjiro emitió un sonido de queja, alejando su rostro para verla nuevamente con un puchero en sus labios.

— Pero ya me disculpé.

— Tenias que hacerlo.

Su ceño se frunce demostrando el desacuerdo de la respuesta, actuando como un niño que espera algún premio tras hacer algo bueno.

— Vamos, no seas mala.

La fémina rió ligeramente, acunando el rostro de Manjiro con suavidad antes de dejar un beso en su frente.

— Estás perdonado, al menos por ahora.

Sano asintió en respuesta, sonriendo levemente.

— Es suficiente...

Dijo antes de volver a ocultar su rostro en su cuello, más calmado y relajado mientras ______ acariciaba su cabello.

Manjiro suspiró ligeramente, como si el contacto con la fémina le hiciera olvidar sus problemas.

— ¿Cómo te fue en la reunión?

Duró muy poco su paz.

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Volví :b
Capítulo algo corto pero
espero les guste.
¡Cuidense mucho!
Lxs quiero
Psdt: La historia ya llegó a
los 50k de leídas, ¡muchas gracias
por el apoyo! 😭👊🏻