Una Haitani más [Tokyo Revengers]

28

[Dias después]

— ¡¿Cuál es las emergencia?!

Su rostro reflejaba sorpresa al ver a Aki frente a su casa, incluso más de verlo agitado y aún en pijamas.

— ¿Por qué... Estás así?— cuestiona Yuki señalandolo de arriba abajo.

— Dijiste... Que era... Una emergencia...— habló de manera entrecortada, recostado en la puerta mientras trataba de recuperar el oxígeno.

— Oh...— dijo con voz baja, recordando que hace tan solo 20 minutos le mandó un mensaje pidiéndole que viniera a su casa.

Puso bien claro que era una emergencia para que él viniese más rápido, pero no creyó que tanto.

— Lo puse pero... No me refería a "ese" tipo de emergencia.— dijo ligeramente nerviosa, pues sabía que tendría un gran grito por parte de Aki.

— ¿Qué?

— Yo... Quería que me ayudaras en otra cosa.

— ¿A qué?

Ella rió con nerviosismo antes de responder, ni siquiera sabía que responder exactamente para que Aki no la quisiera matar.

— Bueno... Quería preparar un pastel.

Ante su respuesta, el rostro de Aki fue indescifrable y unos segundos de silencio se hicieron presentes.

— No.— contestó antes de darse media vuelta dispuesto a irse.

______ suspiró con pesadez antes de hablar.

— Te pagaré.

Aki detuvo su paso, quedándose así por unos segundos antes de darse la vuelta con una sonrisa angelical.

— ¿Por dónde empezamos?

______ rodó los ojos ante su cambio de actitud, haciéndose a un lado para dejarlo pasar. Aki entró aún con una sonrisa en labios.

— Que rápido cambias de idea.

— Es el poder de la amistad.

— Vete a la mierda.

[...]

— ¡¿Pero que carajos, Aki?!— gritó desesperada al ingresar a la cocina, desde las escaleras podía sentir el horrible olor del humo.— ¡Te dejé solo 10 minutos!

— ¡Yo no hice nada!— se defendió mientras agitaba sus manos en un inútil intento de alejar el humo.— ¡Solo me llegó un mensaje y lo quise ver!

— ¡Aish, idiota abre la ventana!— dijo mientras se acercaba al horno, tomando los guantes rápidamente para poder sacar lo que era el causante de todo ese humo.

Con mucho cuidado lo dejó sobre la encimera, viendo como lo que antes era un pastel, ahora estaba completamente quemado.

— Que asco...— murmuró Aki a su lado luego abrir la ventana de la cocina.

El humo poco a poco comenzaba a dispersarse.

— ¿En serio? Yo creo que aún es comestible.— mencionó ella con total sarcasmo.

— Ugh, no. Tan solo miralo, está súper quemado.

— Agh... ¡Ya lo sé, idiota!

Ambos miraron nuevamente el "pastel", tenía un aspecto desagradable y no solo por el hecho de que estaba quemado.

— Bueno... ¿Aún me pagarás?— ante la pregunta recibió una mirada amenazante por parte de la Haitani. Levantó sus manos en señal de paz.— De acuerdo, sin paga.

La pelirrubia suspiró con pesadez, sintiendose abatida totalmente. Miró nuevamente el pastel y tuvo que contener las ganas de botar a Aki de su casa antes de que quemara alguna otra cosa.

— ¿Ahora que haré...?

— Podrias comprar un simple pastel como te dije al inicio.

Suspiró.— Es que no quería comprarle uno... Quería prepararselo...

Aki sintió culpa al ver el estado de su amiga. Él solo se había distraído un par de minutos y para cuando se dió cuenta, el humo había inundado toda la casa.

— Oye... Al enano no le molestará que le compres uno, aunque si le hubieses preparado uno se hubiese sentido mejor.

— No ayudas, tonto.

— Lo que trató de decir es, que el enano no dirá nada con respecto a esto, no le molestará que le compres un pastel. Estoy seguro se que lo que venga de ti le gustará.— dijo con un tono comprensivo, acercándose a ella para poner una mano en su hombro a modo de confort.— Y para que no me mate, no le menciones que yo arruiné su pastel.

______ sonrió ligeramente ante su último comentario, mirándolo con una pequeña sonrisa en labios antes de suspirar con pesadez.

— Bien... Supongo que le compraré uno.

— ¿Puedo ayudarte a elegirlo?

— No, no quiero que lo quemes por error.— contestó dándole una mala mirada. Aki resopló ofendido.

— Fue un accidente.

Al final, terminó llendo con Aki a comprar el pastel. Compró el que más le pareció sería del agrado de Mikey y lo llevaron de regreso a casa. Lo metió a la nevera tan pronto como pudo y se pasó el resto de la tarde con él.

[...]

— ¡_______!

El gran grito de Aki por la mañana siguiente la hizo saltar de la cama, aún algo adormilada salió rápidamente de su habitación y bajó las escaleras.

— ¡¿Qué sucede, por qué gritas?!— cuestiona una vez lo ve parado en la puerta de la cocina.

Él, sin quitar la mirada del frente señala hacia la mesa. La rubia gira con confusión y casi se le sale un grito cuando vio a sus hermanos en sobre la mesa del comedor.

— ¿Qué?— dijeron ambos con duda y sin dejar de comer los pedazos de pastel que estaban en sus platos.

« Matenme... »

  ꒷︶꒷꒥꒷‧₊˚૮꒰˵•ᵜ•˵꒱ა‧₊˚꒷︶꒷꒥꒷
¿No les pasa qué... Salen
tranquilamente y ¡Pum! Les roban?
A mi sí  😭
Lamento esta demora de casi...
Un mes, ¿verdad?
Ya ni me acuerdo 😔.
Como dije, me robaron xd (rio
para no llorar), por suerte
ando teniendo más libertad
con la computadora y por eso terminé
este capítulo. Estaré haciendo otro
dentro de unas horas.
¡Cuidense!
(Ayer fue el cumpleaños de Izana
y hace una semana el de Manjiro 😭😭)