Perspectiva de Jisung
El primer rayo de luz que entró por la ventana despertó a Jisung, pero no fue hasta que escuchó el sonido de su teléfono vibrando que finalmente abrió los ojos. Todavía medio dormido, tomó el teléfono y vio un mensaje de Félix, su amigo y confidente, quien le había enviado un enlace. Confundido, abrió el mensaje, esperando alguna noticia divertida o quizás una foto del grupo. Sin embargo, cuando vio el encabezado y la imagen que lo acompañaba, sintió cómo su corazón se detenía por un instante.
La noticia de Dispatch llevaba como titular: "La pareja favorita se reconcilia: Minho y Nayeon disfrutan de una cena a solas y llenos de risas". La foto mostraba a Minho y Nayeon en la cena de la noche anterior, ambos sonriendo y riendo como si no existiera nadie más en el mundo. La imagen era tan cercana y personal que hacía parecer que entre ellos había algo mucho más profundo.
Jisung sintió cómo su pecho se comprimía, y sin poder evitarlo, una tristeza profunda comenzó a invadirlo. Sabía que era una noticia sensacionalista, pero ver a Minho con Nayeon de esa forma, después de todo lo que habían compartido, lo hacía sentir fuera de lugar y profundamente herido. La conexión que pensaba que tenía con Minho de repente se sentía frágil, como si fuera solo una ilusión que él mismo había creado en su mente.
Quería ser racional, decirse a sí mismo que probablemente la imagen no era lo que parecía, que había un contexto que no conocía. Pero cada vez que miraba la foto, sus inseguridades se hacían más fuertes. Todo ese cariño que había construido por Minho, esa sensación de pertenecer a su lado, se tambaleaba al ver cómo Minho y Nayeon parecían encajar perfectamente en esa imagen.
Sin pensarlo, Jisung se levantó y marcó su teléfono para reportarse enfermo. No podía ir al rodaje, no podía enfrentarse a Minho o a Nayeon, o incluso a sus compañeros, mientras se sentía así de vulnerable. Después de colgar, se dejó caer en el sofá, cubriéndose el rostro con las manos. La tristeza se mezclaba con una profunda frustración consigo mismo, porque sabía que una parte de él estaba reaccionando por el miedo y la inseguridad, pero no podía controlar sus emociones.
Mientras el día avanzaba, varios de sus amigos comenzaron a escribirle, preocupados por su ausencia. Primero fue Félix, quien le mandó un mensaje directo:
—Oye, ¿todo bien? No fuiste al rodaje. ¿Pasa algo?
Jisung dudó un momento antes de responder, queriendo evitar preocuparlo, pero al mismo tiempo, no podía fingir que todo estaba bien.
—Me siento un poco mal, Félix. Solo necesito descansar.
Félix, sin embargo, no se conformó con esa respuesta. Sabía que algo más debía estar ocurriendo, y no tardó en enviarle otro mensaje:
—Jisung, soy tu amigo. Sé que algo te está molestando. ¿Tiene que ver con lo que te mandé esta mañana?
Jisung suspiró, sintiéndose expuesto, pero también sabiendo que Félix siempre había estado ahí para él. Tomó aire y decidió ser honesto.
—Es solo que… siento que no debería estar en el mismo mundo que Minho. Anoche, lo vi salir con Nayeon, y… ya sabes lo que pasó en la cena.
La respuesta de Félix fue casi inmediata, llena de empatía y preocupación:
—Entiendo, Jisung. Pero sabes que las noticias a veces exageran. Lo mejor sería que hables con él directamente. Te lo digo en serio.
Mientras leía las palabras de su amigo, Jisung sintió una leve calma, pero la tristeza seguía ahí, como un peso en el pecho. No tenía la energía para enfrentar a Minho en ese momento. Su mente seguía recreando esa imagen de ellos riendo juntos, y cada vez que lo hacía, sentía que su conexión con Minho se desvanecía un poco más.
A lo largo del día, sus otros amigos también le enviaron mensajes, preocupados por su ausencia y por el silencio que había mantenido. Jeongin incluso intentó llamarlo, pero Jisung no tuvo fuerzas para responder. No quería que lo vieran así, roto y vulnerable, sintiéndose tan fuera de lugar y rechazado.
Mientras el sol se ponía y el día llegaba a su fin, Jisung seguía sentado en el sofá, con los ojos hinchados por las lágrimas. Sabía que probablemente estaba exagerando, que debía hablar con Minho y aclarar lo sucedido. Pero la idea de enfrentarse a él y posiblemente escuchar algo que lo hiriera aún más lo aterraba. ¿Y si Minho de verdad había vuelto con Nayeon? ¿Y si lo que habían compartido era solo temporal?
La tristeza se transformaba en un sentimiento de desesperanza, y aunque intentaba racionalizarlo, la sensación de haber sido relegado lo dejaba sin fuerzas.
Esa noche, cuando estaba a punto de ir a su habitación, escuchó un golpe suave en la puerta. Al abrir, encontró a Minho, de pie en el umbral, con una expresión preocupada y ansiosa. Su corazón dio un vuelco, y por un instante, la mezcla de emociones se intensificó.
—Jisung… —dijo Minho en voz baja, sin apartar la mirada de él—. Félix me escribió y… quería asegurarme de que estuvieras bien.
Jisung sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas de nuevo, pero hizo un esfuerzo por contenerlas. Dio un paso atrás, permitiéndole a Minho entrar, y se dirigió al sofá. Se sentía vulnerable y a la vez avergonzado, pero sabía que necesitaba respuestas.
—Vi las fotos… tú y Nayeon. Todos decían que estaban… juntos de nuevo —murmuró, sin poder ocultar la tristeza en su voz.
Minho pareció sorprendido, y su expresión cambió a una mezcla de empatía y comprensión. Se acercó a Jisung, colocándose a su lado en el sofá.
—Jisung, lo lamento. No sabía que eso te estaba afectando tanto —dijo suavemente, tomando su mano—. No hay nada entre Nayeon y yo. Ella y yo solo compartimos trabajo en el pasado, pero jamás ha habido nada serio. Anoche, me vi arrastrado a esa cena sin quererlo, y si hubiera sabido cómo te hacía sentir, nunca habría ido.
Jisung lo miró, sintiendo cómo sus palabras comenzaban a disipar la tristeza que lo había consumido todo el día.
—¿De verdad? —preguntó, queriendo asegurarse de que todo lo que había sentido había sido solo un malentendido.
Minho asintió, sus ojos llenos de sinceridad.
—De verdad, Jisung. No quiero que tengas dudas sobre mis sentimientos. Eres tú quien me importa, y estoy aquí porque quiero que lo sepas.
Las lágrimas comenzaron a correr por el rostro de Jisung, pero esta vez eran de alivio. Minho lo envolvió en un abrazo, sus manos acariciando suavemente su espalda mientras lo dejaba desahogarse.
—Lo siento… no debí haber reaccionado así. Me sentí… inseguro —admitió Jisung, su voz temblorosa.
Minho se apartó un poco, mirándolo a los ojos.
—No tienes que disculparte. Lo entiendo. Solo quiero que sepas que, pase lo que pase, no tienes que sentirte así. Eres importante para mí, Jisung. Y no dejaré que nada ni nadie te haga dudar de eso.
Esa noche, Jisung se sintió más cerca de Minho que nunca. El malentendido y las dudas parecían haberse disuelto, y en su lugar, quedaba una conexión más fuerte, más sincera. Sabía que el camino no siempre sería fácil, pero con Minho a su lado, sentía que juntos podían superar cualquier obstáculo.
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Un príncipe de revista (Minsung)
FanfictionHan Jisung es auxiliar de fotografía de lujo. Lee Minho es un modelo de alto nivel que en una sesión de fotos quiere que alguien le ayude al chico torpe que se incorporó al equipo.