Capítulo 24: Vivero.

309 29 1
                                    

JUANJO POV

Mientras Martin pinta en la terraza, yo estoy en la cocina preparando la comida, me sorprendo cuando me suena el móvil y descuelgo cuando veo que es Bea.

--Dime, corazón de melón-- escucho su risa del otro lado de la línea.

--¿Cómo fue la cita de ayer?-- pregunta con diversión, sonrío apoyándome levemente en la mesa de la cocina mientras espero a que acabe de hervir el agua.

--Genial, casi de película romántica-- una sonrisa boba se dibuja en mi cara recordando todo lo que pasó anoche.

--Muy de cuento eso de llevarlo a cenar a la cafetería de Salma-- bromea y no puedo contener la risa.

--A él le gustó la idea de volver al primer sitio en el que quedamos-- murmuro acercándome a los fogones una vez el agua empieza a hervir para poder preparar el caldo para la sopa.

--Sois cuquísimos-- comenta soltando una risita--. Ya podrías presentárnoslo a Salma y a mí.

--Pero si ya lo conocéis-- suelto una risita echando el pollo en el agua hirviendo.

--Bueno, pero hablamos muy poco en esa fiesta, ya podrías organizar una cena o algo.

Suelto una risotada, antes de que pueda contestar Martin aparece en la cocina con una gran sonrisa y los brazos llenos de pintura. Planto un beso rápido mientras Bea pregunta si sigo en la llamada.

--Lo pensaremos-- bromeo besando la punta de la nariz de Martin.

--Mentiroso-- suelta una carcajada y veo que Martin me mira con curiosidad.

--Venga, que tengo que hacer la comida-- cuelgo la llamada después de que Bea se despida y dejo el móvil en la mesa para volver a centrarme en la sopa.

--¿Qué pasa?-- pregunta Martin con curiosidad y sonrío antes de darle un besito en la punta de la nariz.

Lo miro unos segundos embobado, tiene un poco de pintura adornando en las mejillas y también en los brazos y parte de la ropa, acerco mi mano a su mejilla y limpio con mi pulgar la piel de su mejilla acariciando con cuidado.

--Bea quieres que vayamos a cenar con ella y con Salma-- comento acercándome a la olla para echar los fideos y remover un poco el caldo.

Cuando me giro para volver a mirar a Martin lo veo sacando la botella de agua de la nevera y sirviéndose un vaso, se apoya en la mesa de la cocina antes de contestar.

--No es mala idea-- comenta dándole un sorbo a su vaso de agua.

--¿Les digo que sí?-- pregunto antes de probar el caldo, él asiente acercándose a mí para darme un beso rápido antes de irse, supongo que a cambiarse.

Mientras espero a que la sopa esté lista, saco el móvil y miro el correo para ver si alguno de los sitios a los que envié mi currículum me ha contestado y me emociono al ver que tengo un correo de una de las empresas, entro para leerlo y toda la ilusión que tenía se va a pique nada más lo leo, otro rechazo. Apago el móvil y lo dejo en la mesa de la cocina antes de acercarme a la sopa de nuevo para empezar a emplatar, no es el primer rechazo que recibo de los sitios a los que envié mi currículum, pero cada vez me desespero más, suspiro dejando los platos encima de la mesa y me asomo a las escaleras para llamar a Martin.

--¡Voy!-- exclama desde arriba y no tarda en bajar, cambiado y con el pelo mojado.

--¿Te has duchado?-- pregunto pasando una de mis manos por su pelo.

--Sí, creo que el cuadro de hoy se me ha ido de las manos-- suelta una risita.

Vamos juntos a la cocina y después de comer subimos a nuestra habitación para acostarnos en la cama, Martin se duerme en seguida y yo aprovecho para volver a revisar el correo con la esperanza de tener alguna entrevista pendiente, pero nada, ninguna propuesta, nada. Suspiro cansado, desde que dejé la floristería he estado buscando trabajo desesperadamente, pero no he conseguido nada. Suspiro metiéndome en las notas del móvil para buscar el número que me dio Martin, no me queda otra opción.

Narciso (Fanfic majo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora