Un año después, después de tanto tiempo estudiando en casa, la madre de Felix, Sohee, una reconocida empresaria y actriz, le permitió regresar a la universidad para terminar sus estudios. Felix, con Hyunjin a su lado y tras haber superado varios desafíos, volvió con determinación y una sonrisa renovada.
El regreso de Felix a la universidad atrajo la atención, y aunque algunas de sus antiguas amigas intentaron acercarse, la pecosa fue recibida por su nuevo grupo de amigas, quienes la apoyaban en todo momento. Con el tiempo, Felix destacó por sus notas impecables, y su esfuerzo y dedicación comenzaron a ser reconocidos por todos.
Felix encontró un salón de baile olvidado en el campus y decidió renovarlo, convirtiéndolo en su refugio y espacio creativo, donde compartía momentos especiales con sus nuevas amigas.
Por otro lado, Hyunjin, tras graduarse, inició su propia empresa, que en pocos meses fue reconocida como una de las más exitosas de Seúl. Su nombre resonaba como uno de los empresarios más jóvenes y prometedores, y su cercanía con Felix, la hija de la famosa actriz Sohee, despertó rumores sobre su relación. Finalmente, después de dos meses de especulaciones, Felix y Hyunjin hicieron pública su relación, sorprendiendo a todos.
Felix, apodada por algunos como "la señorita Hwang", estaba a punto de culminar la universidad a sus 19 años. Hyunjin la esperaba en casa cada día, ansioso por verla, y cada tarde la recibía, ya fuera con un puchero, lágrimas en los ojos o una sonrisa radiante.
Una tarde soleada, Hyunjin planeaba llevar a Felix a una cita especial. Pero cuando la vio entrar, notó su expresión angustiada. El corazón de Hyunjin se encogió al verla. Felix lo evitó y subió corriendo a su habitación, dejando su mochila y teléfono en la sala. El teléfono vibró en manos de Hyunjin, quien lo miró por reflejo. La pantalla mostraba un mensaje inquietante:
Desconocido: Princesa, lo de hoy me gustó. Quiero volver a hacerlo.
Con el corazón acelerado, Hyunjin subió las escaleras y entró a la habitación. La ropa de Felix yacía en el suelo, y el sonido del agua lo llevó al baño, donde la encontró abrazando sus piernas en la bañera, lágrimas recorriendo sus mejillas. Al verlo, Felix se envolvió rápidamente en una toalla y retrocedió, temblando.
—Amor, ¿qué está pasando? ¿Y qué es esto? —preguntó Hyunjin con voz entrecortada, mostrando el mensaje.
—P-por favor, aléjate, Hyunjin —dijo Felix con voz quebrada—. Necesito tiempo para explicarte lo que sucedió.
—Por favor, bebé, confía en mí. Dime qué está pasando —insistió Hyunjin, acercándose y envolviéndola en un abrazo protector.
Felix dejó escapar un sollozo mientras sus manos temblaban.
—Taeil... él sigue yendo a la universidad y esta vez... se pasó. Me hizo cosas que nunca imaginé que alguien haría —confesó, su voz rota y llena de dolor.
Hyunjin la estrechó con fuerza, su expresión endurecida por la ira contenida y el deseo de protegerla.
—No digas más, bebé. Me encargaré de él —aseguró Hyunjin, dejando un beso en su frente, decidido a tomar acción.
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DIA SIGUIENTE.
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Hyunjin se quedó con Felix hasta que se durmió, acariciando suavemente su cabello y asegurándose de que se sintiera segura. Antes de irse, le dejó una nota en la mesita de noche: "Descansa, mi amor. Hoy no vayas a la universidad. Me encargaré de todo".
A la mañana siguiente, Hyunjin llegó a la universidad con el corazón lleno de determinación y la mente enfocada en un solo objetivo: encontrar a Taeil y poner fin a su tormento. Aunque Taeil ya no era estudiante, se había hecho presente en la universidad con un único propósito, y Hyunjin sabía que debía detenerlo antes de que se acercara de nuevo a Felix.
Los pasillos estaban llenos de murmullos cuando los estudiantes vieron a Hyunjin caminar con una mezcla de rabia contenida y seguridad. No pasó mucho tiempo antes de que lo viera: Taeil, rondando cerca de la entrada como si buscara algo o a alguien. Hyunjin se acercó sin vacilar, captando la atención de Taeil, quien esbozó una sonrisa burlona al verlo.
—Vaya, mira quién viene —dijo Taeil con un tono sarcástico—. ¿Buscas a alguien?
Hyunjin lo miró fijamente, su expresión seria y su voz baja y peligrosa.
—Sí, vine a buscarte. Y esto termina hoy.
Antes de que Taeil pudiera responder, dos patrullas de policía se detuvieron frente a la universidad. Los oficiales bajaron rápidamente, y uno de ellos se acercó a Hyunjin.
—Gracias por la información. Nos encargaremos de esto —dijo el oficial.
Taeil miró a los policías con sorpresa y un destello de miedo en sus ojos. Intentó retroceder, pero los agentes lo interceptaron antes de que pudiera dar un paso más. Los estudiantes que observaban la escena comenzaron a murmurar, conmocionados por lo que veían.
—Esto no ha terminado, Hwang —gritó Taeil mientras lo esposaban, su voz temblando de frustración.
—Sí, lo está —respondió Hyunjin, con los ojos llenos de ira y la promesa silenciosa de proteger a Felix a cualquier costo.
Los policías se llevaron a Taeil, y el campus volvió a su bullicio habitual, aunque los ecos del drama aún resonaban en el aire. Hyunjin respiró hondo y supo que, aunque el camino hacia la recuperación no sería fácil, había dado el primer paso para que Felix volviera a sentirse segura y libre de miedo.
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Después de que la policía se llevó a Taeil, Hyunjin se dirigió al edificio administrativo de la universidad. La secretaria, al verlo, le dirigió una mirada comprensiva y le indicó que podía pasar a la oficina del director sin anunciarse.
El director Namjoon, un hombre de aspecto serio pero justo, levantó la vista de sus papeles y asintió cuando Hyunjin entró.
—Señor Hwang, me imaginaba que vendrías —dijo Namjoon, entrelazando los dedos sobre su escritorio—. Me han informado de lo sucedido.
Hyunjin se sentó frente a él, respirando hondo antes de hablar.
—Gracias por recibirme tan rápido. Vine a informarle que Felix no asistirá a la universidad por unas semanas. Ha pasado por mucho y necesita tiempo para recuperarse y sentirse segura de nuevo.
Namjoon asintió, entendiendo la gravedad de la situación.
—Lo comprendo. La salud y bienestar de nuestros estudiantes es lo más importante. Me aseguraré de que los profesores estén al tanto de su ausencia y de que tenga todas las facilidades para retomar sus estudios cuando esté lista.
Hyunjin sintió un alivio momentáneo al escuchar esas palabras. Saber que Felix tendría el apoyo de la universidad era un pequeño consuelo en medio de la tormenta.
—Gracias, director. Ella lo apreciará —dijo Hyunjin, poniéndose de pie.
—Hwang, cuídala. Se necesita tiempo para sanar de algo así, pero estoy seguro de que con tu apoyo, lo logrará.
Hyunjin asintió antes de salir de la oficina. Sabía que el verdadero trabajo apenas comenzaba, pero haría todo lo posible por estar allí para Felix y ayudarla a recuperar la paz que tanto merecía.
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LA MEJOR AMIGA O LA MUJER DE HYUNJIN?
FanfictionTítulo: La mejor amiga o la mujer de Hyunjin En la vibrante atmósfera de la universidad, Hyunjin, un carismático estudiante de negocios de 21 años y 1.83 m de altura, ha encontrado el amor en Karina, una brillante y talentosa chica de 20 años que su...