Pov Paulina
Desperté junto a Caro, el sol apenas filtrándose a través de las cortinas. La noche anterior había sido intensa, una mezcla de emociones y sensaciones que todavía zumbaban en mi piel. Volteé a mirarla, su respiración tranquila, el cabello revuelto sobre la almohada. Por un momento, todo se sintió en paz, como si el mundo entero se hubiera reducido a este pequeño espacio solo para nosotras.
Pero la realidad no tardó en colarse entre nosotras. Sabía que no podíamos quedarnos ahí, que sería mejor que nadie nos viera. Ale... su hermana todavía lidiaba con el dolor, y no estaba segura de cómo reaccionaría si nos viera así. No quería complicar más las cosas, así que, con cuidado, me deslicé fuera de la cama y comencé a despertar a Caro suavemente.
-Caro, debemos irnos -le susurré, tocando su hombro mientras sus ojos se entreabrían.
-¿Qué pasa? -dijo somnolienta, su voz aún adormilada.
-Es mejor que salgamos antes de que alguien nos vea. Quiero evitar problemas.
Ella asintió, y rápidamente se puso de pie, vistiéndose en silencio. No había mucho que decir, ambas sabíamos lo complicado de la situación. Me sentía dividida entre la lealtad hacia mi hermana y este lazo que estaba creciendo entre Caro y yo, algo que iba más allá de lo que podía controlar.
Salimos de la habitación en silencio, tratando de no hacer ruido. Todo iba bien hasta que, al bajar las escaleras, escuché voces en la sala. Al girar hacia la puerta principal, lo vi: Ale y Dany estaban justo ahí, mirándonos, y sus ojos se llenaron de sorpresa y algo más... una mezcla de dolor y desilusión.
-¿Qué están haciendo? -preguntó Dany, su tono cargado de incredulidad y algo de rabia.
-Nada, solo... -intenté responder, pero me cortó de inmediato.
-¿De verdad, Caro? ¿Así de rápido? Ale apenas está pasando por esto, y tú... -dijo, dirigiéndose hacia mí con una mirada de reproche.
Quise defenderme, pero las palabras se atoraron en mi garganta. Caro y Ale se miraban en silencio, ambas con la herida abierta y fresca. Era como si todas las emociones no resueltas flotaran en el aire entre ellas.
-Dany, por favor... -intenté decir, pero ella negó con la cabeza, furiosa.
-¿Por favor qué? ¿Que acepte que en vez de apoyar a nuestra hermana estás aquí, con...? -su voz se apagó, y vi el dolor reflejado en los ojos de Ale, que evitaban los míos y los de Caro.
Caro miró a Ale con una tristeza que era casi tangible. Parecía querer decir algo, pero se contuvo, como si no quisiera añadir más al dolor que ya estaba presente.
-Esto no es tan simple, Dany -dije finalmente, alzando la voz, sintiendo la necesidad de defenderme- Caro está sola en todo esto, ¿sabes? No tiene a nadie aquí... y yo...
-¿Y Ale sí? -me respondió, cortante. Su tono dolido, la mirada de Ale... todo hacía que esta situación fuera aún más desgarradora.
Ale miró a Caro, una mezcla de tristeza y resignación en su rostro.
-¿Vas a seguir lastimándote de esta manera, Carolina? -preguntó suavemente, aunque en su voz había un eco de todo el dolor que ambas compartían.
Caro bajó la mirada, sin responder. En ese instante, sentí la impotencia arremolinarse en mí. Parecía que no había nada que pudiera hacer para reconciliar lo que estaba sintiendo con el daño que estaba causando.
-Tal vez... tal vez debería irme -dije, mirando a Caro con un susurro de disculpa en mis ojos.
Pov Caro
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Promise - Alejandra Villarreal
RomansaDespués de 2 años, Alejandra y Carolina se reencuentran y reviven su conexión romántica no formalizada. A pesar de complicaciones, su amor persiste. Una promesa hecha años atrás las une de nuevo.