Capítulo 55: Confianza Perdida

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Geto escuchó que Gojo estaba en camino. Chasqueó la lengua con fastidio. ¿Qué rayos hace Tsukumo Yuki aquí? Pensó, mientras miraba de reojo a Makima, quien observaba a Yuki con ojos analíticos. Esto no está bien. Enfrentar a Makima sin conocer a fondo su técnica ya era complicado, pero con Yuki presente sería un desafío casi insuperable. Y con Gojo en camino, la situación se tornaba imposible.

Suspirando, decidió cortar la interacción. "Bueno, parece que se terminó la reunión", dijo, mientras comenzaba a retirarse. Sin embargo, Yuki, con una velocidad abrumadora, avanzó hacia él.

"Vaya, viejo amigo, ¿qué haces molestando a mis queridos estudiantes?", escucho esa voz que conocía bien.

Y entonces, lo sintió: esa presencia inconfundible. ¿Tan rápido llegó? Levantó la vista al cielo, donde una figura flotaba con naturalidad. Los ojos claros de Satoru Gojo lo miraban con una intensidad la misma de cuando se separaron. Makima también desvió la mirada hacia él, esta vez con una ligera molestia. Siempre aparece justo cuando estoy por hacer algo importante, pensó, comenzando a sospechar que Gojo podía estar siguiéndola.

Gojo descendió junto a Yuki, posándose con elegancia. Miró hacia atrás, dedicándole una breve sonrisa a Makima. "Makima-chan, ve con Inumaki y Okkotsu fuera de la barrera. Nosotros nos encargaremos".

Makima suspiró antes de dar un paso atrás. Geto aprovechó el momento para lanzar su última jugada. "Considera mi oferta", dijo, mirando directamente a la chica.

Esa frase hizo que Gojo frunciera el ceño. Makima, por su parte, lo observó por un segundo antes de girarse y, sin decir palabra, saltó de la azotea, aterrizando suavemente para reunirse con los otros estudiantes.

Gojo, mientras tanto, suspiró internamente. Todo salió mal. Conociendo la mente aguda de esa niña, seguro ya desconfía de mí. Irritado, dirigió su atención hacia Geto. "¿Qué estás planeando, Suguru?", le preguntó con dureza.

Geto cerró los ojos, esbozando una sonrisa tranquila. Después de reflexionar un momento, decidió soltar la bomba. "Sabes, Satoru... tengo algo que decirte, más bien a todos los hechiceros: el 24 de diciembre habrá una guerra. Soltaré cientos y cientos de maldiciones por toda Japón, y mis aliados se unirán a ellos".

Gojo apretó los puños ante esas palabras, pero antes de que pudiera responder, Yuki se adelantó, atacando a Geto con furia.

"Vamos, aún falta para que te desquites conmigo", se burló Geto, retrocediendo con gracia. "Además, si no regreso a mi cuartel, los míos ya saben qué hacer".

Gojo permaneció inmóvil, con la mirada fija en su viejo amigo. Yuki, frustrada, lo miró esperando alguna reacción, pero él no se movió.

"Ya nos veremos", dijo Geto finalmente, alejándose con calma.

Cuando desapareció, Yuki no pudo contener su enojo. "¿Qué sucede? ¡Podíamos haberlo capturado!".

Gojo la miró con seriedad. "Su objetivo es Makima", dijo con voz grave.

"¿Eh? ¿Por qué?", preguntó Yuki, confundida.

Gojo suspiró mientras se colocaba su venda en los ojos. "Lo sabes casi tan bien como yo. Ella tiene una técnica única, diría que la más poderosa. Y por lo que acabo de intuir, es mucho más de lo que todos creen".

"Pero es tu estudiante, ¿no? ¿Y está por ingresar a la escuela de hechicería?", insistió Yuki.

Gojo hizo una pausa antes de responder. "¿Por qué crees que vive en las instalaciones de la escuela?".

Yuki parpadeó. "¿Para obtener mejores conocimientos?".

Gojo asintió. "En parte, sí. Pasa gran parte de su tiempo leyendo libros de la biblioteca, pero no es solo por eso. No debería decirte esto, pero creo que es necesario. Tengen hizo un voto vinculante con ella para asegurarse de que esté de nuestro lado. No me ha dicho qué le dio a cambio, pero sabemos que probablemente los votos no funcionen con ella de la misma forma que con los demás".

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⏰ Última actualización: 2 days ago ⏰

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