UN NUEVO DESTINO (Completada)

CAP.21

ALEX

Corrí hasta que mis piernas no aguantaron más, las lágrimas me corrian por las mejillas sin parar, toda mi vida había sido una farsa, nadie era quién decia ser.

Me senté en el suelo de uno de los pasillos del castillo. Para colmo, de tanto correr sin mirar por donde iba, había echo que me perdiera y no supiera volver. Bufé resignada.

Miré para todos los lados pero no había ningún alma que pasara por ahí. Me levanté del suelo sin ganas, lo que menos me apetecía era pasar la noche como una indigente, me puse a caminar y me crucé con una puerta morada que llamó mucho mi atención, era la única puerta de ese color que me había encontrado desde mi estáncia en el castillo, todas las demás eran blancas o azuladas.

Agarré el pomo de la puerta y cómo el que no quiere la cosa lo giré y se abrió. Que qué fue lo que hice? pues entrar, dicen que la curiosidad mató al gato pero como yo no era ningún gato, no había problema.

Era una sala pequeña habían tres espejos uno de ellos cubierto con una lona, eran lo suficiente grandes para reflejar a dos personas si se ponian delante.

Me coloqué frente a ellos mi reflejo no era de lo más bonito, tenía los ojos inchados de tanto llorar y el pelo un poco alborotado, la imágen se volvió un poco borrosa pero mi reflejo seguía estando ahí, lo que me sorprendió fue que en el primer espejo comenzaron a verse imágenes.

Eran mis abuelos! Comencé a llorar otra vez, tenian a un bebé en sus brazos y hablaban con una pareja.

Oh Dios mío! La pareja del bebé eran ellos, Lili y Lucius, entonces el bebé... era yo! La história era cierta!

Ésta debe ser la sala de los espejos, el primero muestra el pasado, el del medio el presente y el que está tapado con la lona el futuro.

El futuro... me acerqué a él...

- Alejandra?

Pegué un bote del susto que me dió

- Agustin! Qué haces aquí?

- Que qué hago yo aquí? No crees que eso debería preguntartelo yo a ti?

- Me he perdido, buscaba mi habitación y acabé aqui.

- Ya... - creo que no me creyó - te acompañaré a tu habitación, has visto algo interesante? - me miró picaramente, yo sonreí -

- Sí mucho - nos reímos -

Nos encaminemos a mi habitación, suerte que me había acompañado sino creo que yo no la hubiera encontrado en toda la noche.

- Ya hemos llegado, que descanses Alejandra, la próxima vez que te pierdas concentrate en el lugar al que quieres llegar, puede que te sorprendas - me guiñó un ojo y se fue -

Entré en la habitación, me puse el pijama y me tumbé en la cama, no pude pensar en nada, a los pocos minutos me dormí.

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AGUSTIN

Tras dejar a Alejandra en su habitación me dirigí directamente al salón donde me esperaban el rey y la reina.

Entré, ellos estaban hablando de la batalla que se aproximaba y de lo importante que era entrenar a su hija para ello.

Pararon la conversación cuando me acerqué lo suficiente.

- Estaba ahí? - me preguntó la reina, yo asentí con la cabeza -

- Tal como ví en el espejo ella se encontraba mirando el pasado, vió el momento en el que la entregásteis a la pareja humana - los dos asintieron sonrientes - llegué justo antes de que intentará destapar el espejo del futuro - reí a carcajadas - es una muchacha muy curiosa!

- Sí, lo es - dijo la reina sonriente - Crees que lo comprenderá?

- Claro que sí, solamente necesita algo de tiempo.

- Es una chica fuerte como su padre - sonrió orgulloso, Lili y yo nos reimos -

"Nunca cambiarás", pensé. Él me sonrió.

- Será mejor que vaya a descansar, mañana nos espera un día movidito - reí - ella aún no sabe lo de la fiesta en su honor verdad?

- No, aún no lo sabe, mañana se lo comentaré - asentí -

Estaba agotado, decidí despedirme de ellos y marcharme a descansar.

- Que descansen altezas - hice una ridícula reveréncia y todos reímos.

Despues me fuy a mi provisional habitación y me tiré en la cama, acabando así mi día y dando comienzo a otro.