CAP.39

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ALEX

Mi padre se tensó, podia escuchar el rechineo de sus dientes.

- "Hija no cometas ninguna locura"

- "Papá no te preocupes, no me he estado entrenando durante todo éste tiempo para quedarme de brazos cruzados a un lado"

- "Ten cuidado pequeña, si te ocurriera algo yo..."

- "Tranquilo, ésto esta chupado!"

- "Chupado? Ay hija, no te entiendo cuando dices esas cosas"

- "Dejalo" - negué con la cabeza - "Te dejo papá me toca mover ficha en esta partida. Te quiero! "

- " Y yo pequeña "

Corté la conexión con mi padre y me abrí camino para llegar hasta Irene matando a sombras pero algo le ocurrió a mi cabeza.

Aparecieron imágenes de mis abuelos estaban rodeados de demonios y iban a matarlos. No! - grité - Pero nadie pareció escucharme la furia se apoderó de mí, las imágenes se volvieron borrosas hasta que desaparecieron.

Nizan se encontraba a mi lado con la cabeza de un Agramon en su boca.

- "Te encuentras bien?" - me preguntó, yo asentí con la cabeza - "No te preocupes las imágenes que has visto no son reales ya sabes que los Agramons utilizan nuestros miedos para acabar con nosotros y eso era lo que intentaban contigo."

- "Voy a matarlos!" - Nizan me sonrió negando con la cabeza -

Me los iba a cargar a todos, pero que se habían creido?

Mis llamas crecieron el doble, muchos de ellos no se lo esperaron y salieron chamuscados a otros los enterré bajo tierra.

Oí a Amane utilizar su don del agua y decirle a uno de los zombis putrefactos: "Es hora del baño!" reí para mis adentros, Amane era genial. Gabriel y Nizan también parecian divertirse, hasta Tatiana ayudaba a los elfos cuando estaban tocando su música para contrarrestar la de los Murmurs.

Me aproximé lentamente a Irene utilizando mi don del aire para apartar a los demonios que se me acercaban. Ella me miró extrañada y algo asustada pero no quiso que se le notara, me reí.

- Quién eres perro? Nunca había visto algo así.

- Es la hija de Lucius y Lili - le respondió uno de los demonios -

A ella se le pusieron los ojos como platos y sonrió burlonamente.

- Así que...

No la dejé acabar y me abalancé a ella, estaba subida en un Abigor y lo ataqué, le mordí el cuello y lo quemé. El Abigor gritó y salió huyendo con Irene sobre él.

Se pensaría que volando estaría a salvo, volví a reir.

Utilicé mi don del aire que me envolvió completamente y salí tras ellos que se sorprendieron como mucho de ellos y de los Tengu al verme volar o mejor dicho, flotar en el aire.

Me enganché al cuello del sucio Abigor y se lo arranqué, Irene cayó en picado hacia el suelo pero otro de ellos la recogió al vuelo.

Me miró enojada y ordenó a todos los demonios que fueran a por mí pero los demas no lo tenian tan fácil para escabullirse de mis compañeros. Irene al darse cuenta se enojó aún mas.

- Tú no tendrias que existir! - me dijo

En mi cabeza volvieron a aparecer imágenes. Vi la muerte de todos mis amigos, sabía que eso no era real no iba a volver a caer sobre la misma piedra dos veces. Poco a poco fueron cesando, miré a quién me habia ayudado desaciendose del Agramon y me encontré con el joven muchacho que me preguntó sobre mis dones por el camino, éste me sonrió y me levantó el pulgar, yo le devolví la sonrisa.

La paciencia estaba acabando conmigo, me estaba cansando de los malditos demonios así que provoqué un gran temblor en la tierra y de ésta comenzaron a salir raices de los árboles que atrapaban a los demonios y los asfixiaba.

- Qué cosquillas! - oí decir a Peter, el árbol rebelde -

Claro, no había caido de que ellos estaban ahí y utilizaba también sus raices. Les sonreí, Sam me guiñó el ojo.

Ésta vez no te me escapas Irene!

UN NUEVO DESTINO (Completada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora