En la tarde Jisung subió a un taxi, le dio la dirección del taller, que le había dado Seungmin, al taxista y colocándose los audífonos para escuchar algo de música se recostó en el asiento mirando por la ventanilla para pasar el tiempo.
Unos minutos después reconoció el lugar al que estaban llegando y arrugó las cejas curioso. El taxista se detuvo y Jisung abrió la boca sorprendido.
《Este taller es el de Binnie, ¿cómo…?》Jisung pagó el taxi y se bajó, mirando el lugar sin poder creérselo todavía.
— ¿Jisung? —escuchó una voz familiar a sus espaldas y al girarse se encontró a Changbin mirándolo curioso.
—¡Oye, Binnie! Nos encontramos de nuevo —comentó con una risita saludando a Changbin que le devolvió la sonrisa, feliz de verlo.
—Sí, nos encontramos mucho ¡Amigo, esto es el destino! —ambos rieron por lo “poético” que había sido Changbin y luego continuaron la conversación—Bueno, escucha, voy contra el tiempo ¿Qué te trae por aquí? —miró su celular para comprobar la hora y después le prestó atención a Jisung.
—Ah, Seungmin me encargó recoger una llave para entregársela a Chan. Me dijo que el dueño me estaba esperando y resulta que eras tú —rió bajo y Changbin asintió entendiendo.
—Ah, bien, no me lo esperaba. Bueno, toma, no tengo mucho tiempo. Solo tienes que esperar a llegue Chan y abrirle la puerta. Él sabe qué tiene que hacer, ¿entendido? —explicó rápido, le entregó las llaves del taller a Jisung y se subió a su moto mientras se despedía con la mano y una sonrisa en el rostro diciéndole adiós.
—Vaya, sí que tenía prisa —miró las llaves en su mano y luego el taller. Lo abrió y se sentó en una silla mirando su celular para pasar el tiempo mientras escuchaba algo de música y esperaba a que llegara Chan.
《Espera, ¿todavía seguirá aquí?》Jisung se levantó de la silla después de unos minutos y recorrió el taller mirándolo todo detenidamente. Había un auto con el capó abierto y lo que parecían ser dos motos cubiertas por una lona. Jisung se acercó a una de ellas mordiendo su labio curioso. La última vez que estuvo ahí le pareció reconocer una de las motos y no tenía nada de malo salir de dudas… bueno, al menos eso creía él. Descubrió una, pero no era la que él buscaba ya que el diseño era totalmente diferente, la cubrió otra vez y fue en dirección hacia la otra. Al verla confirmó lo que suponía, la moto le era muy familiar, pero aún así no había certeza de que fuera la misma que él temía. Negó riendo, sería demasía coincidencia. Sin más, la dejó de lado y la cubrió mientras volvía a sentarse en la silla con sus audífonos.
No sabía cuánto tiempo había pasado, pero se puso de pie y sintió sus músculos entumecidos de estar sentado tanto tiempo en la misma posición. Salió del taller para tomar un poco de aire y se quedó congelado al ver el cielo, el sol se había ocultado por completo dejando a la luna en su lugar.
— ¿Cuánto tiempo ha pasado? —miró la hora en su celular, eran las 9 de la noche. Abrió los ojos como platos, era tarde y no había rastro de Chan.
Jisung se giró para adentrarse al taller y llamar a Seungmin para preguntarle qué sucedía con Chan, pero alguien colocó una mano en su hombro sobresaltando.
—¡Dios mío, que susto! —tocó su pecho sintiendo sus latidos acelerados y rápidamente se giró para encarar a la persona que lo había asustado.
《Ay, no ¿Qué mal le hice a este mundo?》
— ¿Y tú qué haces aquí? —dijo Jisung sonrojado y algo nervioso. Minho tenía el ceño fruncido mirando a Jisung, con la curiosidad brillando en sus ojos.
—Eso debería preguntarlo yo, ¿qué haces tú aquí y a esta hora? —Minho lo miró con una ceja alzada y luego miró el taller tras él.
Jisung rodó los ojos y decidió hablar, quizás Minho sabía algo de Chan.
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「✦𝙳𝚛𝚒𝚟𝚎✦」⋆ ★ ᴹⁱⁿˢᵘⁿᵍ
RandomJisung tenía una vida color de rosa. Exacto. Énfasis en la palabra tenía. Pero, pensándolo bien... ¿dónde fue que todo comenzó a desmoronarse? ¿Fue acaso cuando su mejor amigo lo dejó a merced de un desconocido? ¿O cuando ese extraño empezó a...
