「✦𝙳𝚛𝚒𝚟𝚎✦」⋆ ★ ᴹⁱⁿˢᵘⁿᵍ

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Minho se encontraba en el sofá, jugando con sus bebés, hasta que alguien llamó a su puerta.

— ¿Se le habrá quedado algo a Lix? —pensó en voz alta poniéndose de pie y abriendo la puerta con su mano sana, le daba gracias al cielo por ser ambidiestro— ¿Se te olvidó al…? —preguntó esperando toparse con Felix, pero, en cambio, ahí estaban dos problemáticos llamando a su puerta.

—¡Holi! —Seungmin se adentró al departamento sin siquiera pedir permiso y sin invitación. Solo se sentó en el sofá mirándo a los mininos de Minho mientas colocaba una cesta de frutas sobre la mesita delante del sofá, esperando a que los otros siguieran sus pasos.

Minho soltó un suspiro cansado mientras se recostaba al marco de la puerta mirando a Chan—Pasa —lo invitó después de unos segundos y este asintió sentándose al lado de su novio—. Bien, ¿ustedes qué hacen aquí? Son molestos —murmuró lo último, pero aún así Seungmin lo escuchó y como es Kim Seungmin, él no podía quedarse callado.

—Ay, uno que se esfuerza tanto por ti y tú así nos agradeces ¡Eres un malagradecido! —Seungmin cruzó sus brazos mientras se recostaba al respaldo del sofá indignado.

—Bueno, ¿qué quieren? No vendrían sin un motivo real —Dori se subió a su regazo y él, con la mano sana, la acarició mientras miraba a los chicos frente a él esperando respuestas.

—Queríamos saber cómo estabas —empezó Chan mirando a Seungmin y este le regresó la mirada aún haciendo puchero. Minho arrugó el ceño solo con verlos, ya se imaginó que algo paneaban.

—Sí, ¿acaso no podemos visitarte para saber de ti? —Minho rodó los ojos viendo que tardarían en llegar al punto y se cansó.

—Vayan al grano, ¿qué quieren? —Minho los miró con una ceja alzada esperando una explicación de su visita sorpresa, pero solo hubo silencio. Seungmin se inclinó, tomó una manzana en la cesta y empezó a comerla antes de hablar.

—Bueno, ¿resumiendo? Te vamos a hacer una fiesta de cumpleaños sorpresa —dijo dándole una mordida a su manzana. Minho abrió la boca sorprendido y miró a Chan que afirmó lo dicho por el castaño.

— ¿Qué?, ¿por qué? No tenían por qué hace eso. No me gustan las sorpresas y mucho menos si es para celebrar mi cumpleaños. Gracias, pero no gracias  —Minho apartó la mirada de ellos para acariciar a Dori mientras pensaba en lo dicho por Seungmin.

No le gustaba celebrar su cumpleaños, cada vez que lo hacía era por capricho de Felix dado que nunca podría decirle que no. Siempre estaba tan concentrado en trabajar para ganar dinero, pagar la deuda y en hacer feliz a Felix, nunca pensaba en él mismo.

—Amigo, escucha, sé que no te gustan este tipo de cosas, pero es algo que todos quisimos hacer por ti. Queremos que disfrutes por una vez en tu vida y dejes tus preocupaciones de lado. Acepta este regalo y aparta tu orgullo por una vez —Chan habló, tratando de convencerlo, pero Minho seguía jugando con Dori y Soonie que se le había unido, ignorando a sus amigos.

—¡Que necio es! Dios, ayúdame a no perder la paciencia —escuchó a Seungmin murmurar y Minho lo miró mal. El castaño solo le sacó la lengua y el pelinegro rodó los ojos.

— ¿Cuándo has tenido de eso? —murmuró por lo bajo y Seungmin le sacó el dedo del medio haciéndolo reír.

Minho suspiró y negó, sabía que esta vez no iba a poder negarse ni aunque quisiera, menos con Seungmin frente a él molestándolo. Sabía que no lo dejaría en paz hasta que aceptara, así que Minho decidió ahorrarse esa discusión y rendirse por una vez, pero antes de dar su respuesta quería averiguar varias cosas.

— ¿Felix puede ir? —por fin levantó la mirada alzando una ceja curioso.

—Por supuesto que puede, es tu cumpleaños. Además, también invitamos amigos tuyos y gente conocida así que no te preocupes —Seungmin le guiñó un ojo mientras terminaba de comer su manzana.