Reencarnado en un lobo en otro mundo con esquizofrenia

Cap LV

Axel: Geld, el entrenamiento de los orcos comenzará mañana, les dejaré el día de hoybpara procesar el cambio, retirate.

Geld: Si.

Axel: Fiona, quédate un momento.

El orco se fue junto con los demás y los gemelos se fueron con los kobolds a nuestro piso junto con los demás cachorros, Lana y Fiona se quedaron conmigo.

Axel: ¿Como se encuentran los kobolds?

Fiona: Estamos bien, con un poco de comida y agua tenemos suficiente para servirle de inmediato.

Ella habló con voz seria y la cabeza gacha, casi como una sirviente, no se que imagen tendrá de mi pero si es la misma que Geld, entonces seguramente piense que me deshare de ellos si los considero inútiles o débiles, mmm, bueno, no hará mal ser bueno ¿verdad?

Axel: *suspire*

Fiona: ¿Sucede algo?

Axel: Una cosa, no trates de ocultarme información, incluso si son necesidades.

Fiona: ¿Eh?

Se veía confundida y un poco ¿asombrada? ¿asustada? por mis palabras, no lo se, pero lo que se es que necesito confianza, no obediencia ciega ni mentiras que me satisfagan.

Axel: No importa si solo fue un par de días, es obvio que los kobolds no están en condiciones, ya sea física o mentalmente.

Fiona: Señor eso n-

Axel: Fiona, habló en serio ¿o me vas a decir que os trataban y alimentaban bien?

Fiona: ... no...

Axel: No se muy bien como se ve un kobold mal alimentado ni las cosas que necesitan o padecen, pero si algo estoy seguro es que incluso con pocos días de esclavitud el cuerpo no queda bien y eso no desaparece solo por una buena comida, necesitan descanso además del alimento y tu como líder de los kobolds tienes que comunicarme lo que necesitan, sin tener miedo, solo lo dices y trataré de solucionarlo. No necesito que me digas lo que quiero escuchar, quiero que me digas lo que debo escuchar.

Ella se mantuvo en silencio y bajo la cabeza lentamente, procesando lo que dije con una expresión, bueno, en pocas palabras se quedó pasmada y después de unos segundos hablo con la voz un poco apagada.

Fiona: Muchos están maltratados y mal alimentados, a veces no los dejaban dormir y sus cuerpos a penas están bien.

Axel: Mmm, ¿crees que una semana sea suficiente?

Fiona: Creo que si, con una semana de descanso debería ser suficiente para que al menos la mayoría esté en condiciones de hacer entrenamientos los que quieran unirse a su fuerza, ¿puedo preguntar algo?

Axel: Adelante.

Fiona: ¿Los que no vayan a ser soldados también tendrán descanso?

Axel: Por supuesto, tampoco es que todos estén obligados a ser ingenieros que ayuden a los gemelos, solo los que quieran, ya podrán tener otros trabajos después cuando termine de organizar todo en la ciudad.

Fiona: Entendido.

Axel: Y una última cosa.

Fiona: ¿Que?

Axel: Toma el tiempo que necesites, puede que no me haya sucedido a mi pero se que es difícil.

Fiona: No se preocupe p-

Axel: ¿Que dije?

Fiona: Que dijera lo que debe oír, no lo que quiere oír...

Su voz se quebraba poco a poco, como si aguantará las ganas de llorar, no soy muy bueno para dar ánimos.