CAPITULO 52

41 6 36
                                    

EN LA CASA DE CHEN

Sábado 8 de la mañana

Sami: ¡Papito, papitooo!

Not: (agachándose para mirarlo) ¿Qué pasa, mi niño?

Sami: Afuera hay un joven con varios hombres armados.

Chen: (tomando rápidamente su arma) Quédate aquí, no salgan. Ahora vuelvo.

Rafael: Espera...

Afuera de la casa

Marcos: (con voz firme) Nadie baja del auto sin mi permiso.

Chen: (mirándolo con el ceño fruncido) Muchacho, ¿cómo te presentas así en mi casa? Asustaste a mi hijo.

Marcos: (respirando hondo) Lo siento, no era mi intención. Solo vengo a ver a Dante. (Dirige una leve sonrisa a Sami) Hola, pequeño.

Sami: (mirándolo con fascinación) ¡Tienes muchos tatuajes! ¿Puedo tener uno?

Rafael: No, cariño. Aún eres muy pequeño para eso.

Marcos: (riendo) ¿Puedo ver a Dante?

Not: (suspira) Está en su habitación... ha estado llorando. No creo que quiera recibir visitas.

Marcos: (con seriedad) No se preocupe, lo veré de todas formas.

Marcos comenzó a subir las escaleras con paso seguro. Sami lo siguió de cerca, mirándolo con curiosidad.

Sami: Oye... ¿qué significan tus tatuajes?

Marcos: (sonriendo de lado) Cada uno representa una parte de mi historia.

Al llegar a la puerta de la habitación, Marcos se detuvo. Dante dormía profundamente, pero su instinto Omega reaccionó al percibir un aroma desconocido. Se incorporó bruscamente, con el pulso acelerado, y sin pensarlo, tomó el arma que tenía cerca, apuntando directo a la figura en la entrada.

Marcos: (alzando las manos en señal de calma) Tranquilo, soy yo.

Dante parpadeó varias veces, tratando de enfocar su vista. Al reconocer a Marcos, bajó el arma con pesadez y se pasó una mano por el rostro, intentando despejarse.

Dante: (suspirando) ¿Qué demonios haces aquí, Marcos?

Marcos (apoyándose en el marco de la puerta, con los brazos cruzados): Anoche hablé con tu novio... estaba muy triste.

Sami (trepando a la cama de Dante, observándolo con curiosidad): ¡Toma, mira! Es mi osito de peluche, te lo presto.

Marcos (sonriendo y tomando el peluche): Gracias, pequeño.

Marcos: Anoche estuve conversando con César y me dijo que te haces exámenes médicos cada cuatro meses y que siempre usas preservativos.

Dante (frunciendo el ceño, llevándose una mano al rostro): ¡Por Dios! ¿César anda ventilando nuestra intimidad ahora?

Sami (parpadeando): ¿Mi hermano se hace exámenes para tener un bebé?

Dante (incómodo, mirando de reojo a Marcos): Sami, cállate... Ve a ver qué está haciendo mamá, seguro está horneando un pastel. Anda, hermanito.

Sami (negando con la cabeza, decidido): ¡No! ¿Quieres ver los análisis de mi hermano?

Marcos (mirando a Sami con interés): Claro, pequeño, muéstramelos.

Dante (alerta): ¡No, Sami! Déjalos donde están, no toques nada. ¡MAMÁ, SAMI ANDA DE METICHE!

Marcos (rápidamente, cubriéndole la boca a Dante con una mano firme): Tranquilo. Sami, sigue buscando.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: 19 hours ago ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

FUEGO Y DESEO: EL DRAGÓN DOMINANTE  (V+18P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora