My Moon Alice Cullen y tu

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La noche había caído por completo sobre Forks, bañando el bosque en sombras y una calma engañosa, dentro de la casa que ambas compartian, ___ estaba en la habitación con Alice, aún tratando de calmar el torrente de emociones que la discusión con Jacob había desatado, caminaba de un lado a otro, con los brazos cruzados, la mandíbula tensa y las emociones revolviéndose dentro de ella como una tormenta sin fin

Alice estaba sentada en el borde de la cama, observándola en silencio, con sus manos descansando sobre sus rodillas, la paciencia en su rostro era evidente, pero también la preocupación en la forma en que inclinaba ligeramente la cabeza, siguiendo cada uno de los movimientos de ___

—Te estás desgastando —comentó Alice suavemente, rompiendo el silencio con su tono calmado pero firme

___ dejó escapar un bufido mientras se giraba para mirarla, su expresión aún marcada por el enojo. —¿Cómo no voy a estarlo? Lo que hizo Jacob... —Sus palabras quedaron suspendidas, ahogadas por un suspiro frustrado

Alice se levantó con movimientos delicados, acercándose a ella como si cada paso estuviera calculado para no avivar más el enojo, se colocó frente a ___ y extendió las manos, tomándola con delicadeza por las muñecas

—Lo que hizo Jacob fue impulsivo, sí— la voz de Alice era un susurro tranquilizador, una suave melodía que contrastaba con la dureza del día - pero no puedes quedarte atrapada en eso, lo has enfrentado, lo has dicho, y ahora... ahora tienes que dejarlo ir

—¿Cómo puedes estar tan tranquila? —___ la miró, sus ojos brillando con la mezcla de furia y frustración, su cuerpo aún temblaba ligeramente, como si estuviera al borde de transformarse nuevamente.

- Porque no voy a dejar que esto te consuma, amor - Alice sonrió, una sonrisa que parecía capaz de iluminar incluso el rincón más oscuro  — Y porque, para ser honesta, no me gusta verte así —Con un movimiento delicado, subió una mano para acariciar suavemente la mejilla de ___, el contacto logró detener el flujo de palabras de ___, cerró los ojos por un instante, dejándose llevar por la calidez de Alice, por la sensación de seguridad que siempre le brindaba

—No puedo evitarlo —murmuró ___, su voz más suave ahora, aunque aún cargada de una ligera tensión— La manada... es mi responsabilidad, Alice, loo que Jacob hizo afecta todo lo que hemos tratado de proteger

Alice asintió, comprendiendo, pero no dijo nada, solo la atrajo más cerca, envolviéndola en un abrazo firme, sus manos recorrieron lentamente la espalda de ___, dibujando círculos pequeños y constantes que parecían calmar el peso en sus hombros

—Tienes razón, la manada es importante pero tú también lo eres, ___, y no voy a dejar que esto te haga estar así   —Se inclinó un poco hacia atrás, buscando los ojos de ___, luego añadió con un toque de picardía—  Por eso, voy a distraerte 

—¿Distraerme? —___ alzó una ceja, aunque había una pequeña chispa de curiosidad en su mirada ahora - ¿Como podrias?

Alice no respondió con palabras, sino con acción, se puso de puntillas y depositó un beso ligero en los labios de ___, apenas un roce, suficiente para robarle el aliento y desviar sus pensamientos del enojo, luego otro, y otro, hasta que ___ finalmente cedió, envolviendo los brazos alrededor de Alice y hundiéndose en el consuelo que solo ella podía darle

—¿Así funciona tu estrategia? —preguntó ___ entre risas suaves, su frente apoyada contra la de Alice

—Siempre funciona —replicó Alice, con un destello de triunfo en sus ojos dorados

Los minutos siguientes se llenaron de pequeños gestos de cariño, Alice la llevó hacia la cama, haciéndola sentarse y luego acomodándose a su lado, no dejó de acariciarla, sus dedos paseándose por el cabello de ___, jugando con mechones sueltos mientras los besos seguían  volviéndose  cada vez mas intensos

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La noche era tranquila en los bosques de Forks, pero el ambiente dentro de la manada estaba lejos de serlo, tras la reciente discusión entre Jacob y ___, los lazos del grupo estaban tensos, a pesar de la distancia física que los separaba, cada miembro había visto y sentido lo ocurrido a través del enlace mental, había molestia, decepción, e incluso un poco de reproche silencioso hacia Jacob por las decisiones que había tomado y por cómo había tratado a ___

—Siempre tiene que complicar las cosas —gruñó Embry mientras patrullaba, sus pensamientos resonando en el enlace 

 —Claro, porque todo gira alrededor de su impronta, ¿verdad?  - Leah, siendo directa, no tardó en añadir con un tono sarcástico - Nada más importa

___, que corría cerca de Seth, suspiró profundamente, su voz, calmada pero firme, cortó la conversación antes de que escalara más —Eso no es asunto suyo, ¿si?, la pelea fue entre Jacob y yo, y nadie más

—Pero... —intentó replicar Embry, pero ___ no le dio oportunidad

—No hay peros  —Hizo una pausa, su tono dejando claro que no aceptaría objeciones—.Trátenlo bien, es parte de la manada, y todos sabemos lo difícil que es cargar con este tipo de decisiones, no lo hagamos más difícil para él

Hubo un momento de silencio en el enlace, una señal de que las palabras de ___ habían calado, aunque no todos estaban de acuerdo, nadie quería llevar la contraria

La vigilancia transcurrió en calma después de eso, cada uno enfocado en sus rondas, pero cuando la guardia de ___ terminó, se encontró caminando hacia el lugar donde Sam solía esperar al resto de la manada, el estaba allí  de pie, con los brazos cruzados y la mirada perdida en el horizonte

—¿Todo bien? —preguntó Sam al percibir su presencia, su tono más cordial de lo que ella esperaba -

—Por ahora, sí  —___ se apoyó contra un árbol cercano, estirando los brazos después de la larga vigilancia - El silencio entre ellos fue breve, pero no incómodo

Finalmente, Sam lo rompió, su voz cargada de curiosidad. —¿Es verdad lo que dijiste? Que tú y Alice se quedarían si los Cullen se iban, ___ giró el rostro hacia él, sorprendida de que lo mencionara, pero en sus ojos no había juicio, solo interés genuino

—Sí —respondió después de un momento, con un tono honesto y firme— Mi manada, la reserva es muy importante para mí, no puedo simplemente dejarlos, Sam

Él asintió lentamente, como si sus palabras confirmaran algo que ya sospechaba. —Sabes que eso no es fácil, ¿verdad?, mantenerte entre dos mundos.

___ soltó una pequeña risa, sin humor —¿Cuándo ha sido fácil para mí, Sam? —Se encogió de hombros, aunque su mirada estaba llena de determinación— Pero esto es lo que somos, no puedo cambiarlo, y tampoco quiero hacerlo, Alice lo entiende, ella sabe lo que la manada significa para mí

Sam guardó silencio por un momento, asimilando lo que ___ acababa de decir - Tienes razón. -luego con un leve gesto de aprobación, añadió  —Haces lo que cualquier alfa haría

El comentario hizo que ___ lo mirara fijamente, había algo en su tono, algo que sonaba a respeto, a aceptación, que no esperaba escuchar de él

—Gracias, Sam. —Sus palabras fueron sinceras, aunque se sintieron un poco extrañas saliendo de su boca.

—No lo agradezcas, solo asegúrate de mantener a la manada como hasta ahora, realmente eres una gran alfa —Con eso, Sam se alejó, dejándola sola bajo la luz de la luna, con las palabras resonando en su mente

El bosque parecía más tranquilo ahora, pero en el corazón de ___, la promesa que acababa de reafirmar tenía un peso propio, no importaba lo difícil que se volviera la situación, ella protegería a su manada, a su familia, sin importar las consecuencias, le gustaba el que Alice lo entendiera, y con eso, sabía que no estaba sola en su decisión