MENOR QUE ELLA

Parte 12: Sobre la renuncia.

---- L A U R A -----

Ir a trabajar al club, cada vez me costaba mas, si no fuera por nancy no se que hubiera hecho, la yo de antes, no hubiera tenido problemas, de hecho le gustaba el ambiente que se vivía, mucho alcohol gratis, coqueteo con hombres, dinero a cambio de coqueteo, pero la yo de ahora todo eso ya no le gustaba, de hecho ya no soportaba que se me acercaran hombres, menos que me tocaran, inclusive ya tomaba poco, solo tomaba uno que otro trago y no como antes que toda la noche bebía. Una vez que entre, rusty se mantenía alejada de mi, salude a todos y me dirigí hacia el camerino. Cuando entre en el me encuentro a nancy, una vez que la salude quise mencionarle que sam la apoyaba.

Laura: nancy, se que me vas a odiar pero le conté a sam sobre tu secreto y el se alegro dice que por el no pasa nada y que todo sigue igual o mejor. -  no quería defraudar a mi amiga, pero se que su amistad con sam le vendría bien.

Nancy: enserio, sam no se molesto, ni dijo nada malo, de verdad. -  no podía creer todavía como era ese hombre, como bien decía laura era joven por su edad, porque su mentalidad estaba unos años mas adelante, en verdad quería a ese joven.

Laura: si, dijo que por el tu podías ser como eras en realidad, que ante el no tenias que mentir y que siempre te apoyaría. - al ver a mi amiga reaccionar así, me hacia sentirme mas orgullosa de sam.

Nancy: amiga, no sabes la suerte que tenemos de conocer a sam, gracias a ti, puedo tener un amigo, de hecho lo siento como mi hermano menor. -  era verdad, con el sentía un cariño fraternal, ahora si no tenia que ocultarme podría ser yo mismo, mi amiga se había sacado la lotería definitivamente.

Laura: amiga ya no aguanto mas en este lugar, voy a renunciar al final del mes, tengo pensado abrir un estudio de zumba y de yoga. -  estar con sam, me hacia quererme superar.

Nancy: cuenta conmigo amiga, yo seré tu socia, no te pienso dejar sola.  - laura era como una hermana para mi, desde que la conocí ella es fundamental en mi vida.

---  S A M ----

Cuando me desperté a la mañana siguiente, sonreí al sentir peso sobre mi pecho, como siempre que dormía con ella, me tenia abrazado con tal fuerza, como teniendo miedo de que me fuera. Sin despertarla, me levante de la cama hacia el baño, una vez que me duche y vestí, baje a preparar el desayuno, mis días al despertarme cuando dormía con ella siempre teníamos que desayunar juntos. Baje a la cocina a preparar un rápido desayuno, consistía en un omelet suizo, pan, café y zumo de naranja. En la habitación, me di la tarea a despertarla, con tiernos besos en sus mejillas, labios, ojos, frente, todo lugar donde pudiera dejar un tierno beso. 

Yo: amor, buenos días, despierta, tenemos que desayunar para yo poder irme a trabajar.  -  verla recién levantada era siempre una de mis mejores vistas, se veía siempre muy bella y muy sexy.

Laura: buenos días mi vida, amanecí bien, gracias por el desayuno, se que lo has hecho varias veces amor, pero aun no me acostumbro, detalles como estos son por lo que me enamore de ti, te amo. - era verdad sam, cuando dormía conmigo, al día siguiente siempre tenia mi desayuno en la cama, era tan tierno, siempre viendo por mi, como lo amo.

Yo: deja de decir eso amor, sabes bien que siempre buscare la forma de hacerte feliz, mi felicidad es que tu seas feliz, te amo, ahora pasemos a desayunar que muero de hambre.  -  mis desayunos nunca eran iguales si no desayunaba con ella.

Cuando terminamos de desayunar, me despedí con un beso tierno pero extenso, una vez que le desee buen día y ella volvió a dormir, me dirigí hacia el trabajo. El camino se me hizo rápido, cuando entre en mi lugar de trabajo, me disculpe con less, por dejarle todo el trabajo a ella sola, a pesar de decirme que no fue gran cosa, le prometí que la comida del lunes corría por mi cuenta en agradecimiento, ella acepto encantada, entre platica y platica, le conté todo lo que había hecho el día anterior en la universidad, ella se puso feliz porque sabia que pronto yo empezaría a estudiar. Una vez que se llego la hora de salir, como era sábado y eran las 2 pm, pase por una florería a comprarle un ramo de tulipanes a laura, ella me había comentado que era sus flores favoritas. Teniendo las flores en mi camioneta me dirigí hacia su departamento, cuando llegue, moría de la emoción por entregarle sus flores, nunca le había regalado flores y esta vez me nació hacerlo, siempre tenia detalles con ella, como chocolates, dulces, frappes, donas, pero nunca flores. Cuando entre al departamento y la vi en la sala con su computadora en sus piernas me sorprendí de la reacción, de la emoción paso al llanto. Deje las flores en la mesa y corrí a abrazarla, para que me contara porque se había puesto así.