La Novia de Mi Mejor Amigo #Wattys2016

Capítulo XXVI

Desperté de una horrible pesadilla, miré todo mi alrededor y si, esta no era mi habitación -de nuevo- pero esta habitación la reconozco perfectamente como para saber que estoy en en departamento de Javier, precisamente en su cama. Me levanto con un horrible dolor de cabeza, me duele los brazos, las piernas, todo. Tengo puesto una camisa de él verde manzana que me queda como una bata y solo con bragas, no tengo sujetador. Me dirijo al baño para darme un baño, me quito la camiseta y me observo en el espejo, me da asco verme, pero solo me observo y se que nada de lo que crei soñar era un sueño o una pesadilla, no, todo es real, tengo morados en cada uno de mis pezones y alrededor, tengo también morados en las muñecas y en los pies cuando me amarraron, tengo un cachete morado, si me miro muy de cerca puedo asegurar que se puede ver algunos dedos del morsa que me hizo esto, tengo morados en el estomago,debajo de mis pechos y en los brazos, me siento asquerosa. Alejo mi vista del espejo, me doy asco. Me quito mis bragas y comienzo a llorar, ¿Por qué me pasa esto a mi? ¡¿Por qué?! ¡Joder!. Me metí en la ducha y me comencé a bañar, cuando empece a pasar el jabón por todo mi cuerpo tuve que hacerlo con cuidado por que me dolía horrible, tenía que bañarme para quitarme todo lo que hizo el morsa. Sali en bata de baño, abrí la puerta y le grite a Javier que subiera y a los cinco minutos llegó.

-Princesa, estás bien?

Me estremeci cuando me dijo princesa y mis mejillas ardieron.

-Si, solo quería preguntarte si puedo buscar ropa en mi casa y... -me interrumpio-

-Puedes utilizar mi ropa si quieres -sonrio divertido- Pero si quieres puedo buscarte ropa -cerro la puerta de la habitación sonriendo- El otro día dejaste tu ropa interior en la cama

Qué?

Eso suena demasiado comprometedor

Dios! Seguro olvidé mi ropa interior, ¡Que vergüenza!.

-Lo la-lamento, lo ha-habia olvidado tal vez... -vuelvo a hacer interrumpida-

-Tranquila preciosa, no te preocupes, ten -me dio mis bragas negras con encajes y mi sujetador a juego-

-Gra-gracias -sonrei-

-Estare abajo princesa -se dirigió a la puerta-

-Javier

-Si?

-Te quiero mi amor

Sonrió, empezó acercarse a mi, me tomo de la cintura y me acercó a él, luego quitó sus manos de mi cintura y tomo mi rostro con ellas, se acercó lentamente a mi, acortando la distancia entre nosotros hasta que nuestras narices chocaban y antes de que pudiera detenerlo o decirle algo, puso sus labios sobre los mios, instintivamente giré mi cabeza hacia la derecha y él hizo lo mismo pero hacia la izquierda, después de unos segundos pasó su lengua por mi labio inferior pidiendome permiso para abrir mi boca y pues así hice, nuestras lenguas hacían su baile sensual mientras yo disfrutaba de este momento y de sus besos. Después de unos minutos o segundos, nos separamos por falta de aire y senti como mis mejillas ardían por lo que dijo.

-Yo te quiero mucho más princesa -me sonrió y salió de la habitación-

Me quedé como una tonta sonriendole a la puerta por donde había salido Javier, en serio lo quiero. Demasiado, pero tengo que hablar con Alex, he soñado este momento, con que Alex se me declarara, necesito verlo. Me puse mis bragas y mi sujetador, me volví a poner su camiseta verde manzana y salí de la habitación, baje las escaleras y cuando iba por los últimos 3 escalones, escuché a Javier hablando por teléfono.

-Hermano, la amo

-Lo sé pero la amo, le di el beso más rico del mundo y me lo devolvió, leí en sus ojos que me amaba, aunque me hubiera dicho solamente que me quiere, se que me ama, pero también ama a otro imbécil que es su mejor amigo y creo que ella esta enamorada de él desde hace tiempo, y pues siento que se irá con el cabrón y me dejará solo

-Cuando la secuestraron, al que llamó para que la salvara fue a mi

-Crees que sea eso?

-Pues esperaré entonces todo lo que sea necesario

-Vale, adiós

Creo que me desmayare de la emoción. Javier me ama! Dios que hermoso, ¡yo también te amo!

Pero amo a Alex, mis sentimientos hacia Javier son por despecho o eso quiero creer.

-¿Me llevas a mi casa?, por favor

-Claro bebé

¡Maldicion! Lo voy a besar hasta que nuestros labios pidan piedad si sigue así.