5. Morir o ser olvidado, que lindo.

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Antes que nada, quiero que mantengan la calma. Escúchenme y después podrán preguntar todo lo que quieran, ¿de acuerdo?−ellos asintieron lentamente, no estaban seguros de que les iba a decir, pero a juzgar por la cara que tenía Azzhiel no era nada bueno.

−Primero, he de decirles que mañana a primera hora iremos al centro de vida de Miranoi, ahí nos estarán esperando para que ustedes decidan su elección. Tienen que saber que no por el hecho de que ustedes hayan sido elegidos para dominar un elemento quiere decir que lo tengan hacer por obligación, ustedes tienen el poder de elección, pueden decidir si quedarse y cumplir con su misión o irse a casa y vivir como unos simples mortales.

Al ver que nadie hablaba, Azzhiel tomo la palabra de nuevo:

−Si es que ustedes toman la decisión de convertirse en guardianes y enfrentarse a su destino, una decisión aún más fuerte descansara sobre sus hombros. Al ustedes aceptar ser guardianes de los elementos, su vida como mortal estará acabada. Es entonces cuando no podrán volver más al mundo humano...

−Pero, ¿Y nuestras familias?−preguntó Nea con un hilo de voz.

−A eso voy. Sé que ustedes tienen una vida en el mundo humano, amigos y familiares. Así que esto será muy difícil para ustedes. Si es que aceptan, claro. Ustedes tendrán la decisión de: Morir en su mundo, o, nunca haber existido.−la expresión de Azzhiel no se podía describir, estaba serio, pero sin embargo, un sinfín de emociones se cruzaban levemente por su rostro.

−Ósea que, ¿O morimos o somos olvidados? Vaya, que lindo.−respondió Navah con sarcasmo.

−Chicos, esta decisión es suya. Lo que ustedes decidan estará bien. Solo tengan en cuenta que, en sus manos está el poder de derrotar al mal.

"Sí, ahora nos intenta sobornar." pensó Ander.

−Es una decisión difícil, tendrán todo el día y la noche de hoy. Mañana nos reuniremos con el consejo, ahí ustedes expresarán su decisión.−Azzhiel simplemente se puso de pie y salió de la sala, dejando a los chicos solos y con unas grandes dudas.

Los chicos permanecieron el silencio un buen rato, nadie quería hablar, nadie quería decidir.

A los pocos instantes, Luca se puso de pie y salió de la casa, el siguiente fue Ander, quien se dirigió a los dormitorios con demasiada prisa. Nea simplemente se puso de pie y camino al ventanal. Navah se había quedado sola.

Ella ya había decidido, más bien, había aceptado ser un "guardián" y dominar su elemento. Sin embargo, ahora le daban la opción de decidir, pero el ser o no ser ya no estaba en duda. Ella iba a serlo, iba a dominar su elemento e iba a tratar de derrotar el mal. Pero... ¿Morir para su familia? ¿Ser completamente olvidada?

Ninguna de las dos era buena. Ninguna de las dos las convencía por completo.

¿Morir? No quería morir, aunque fuera "hipotéticamente".

Ser olvidada no sonaba tan mal. Su madre ya no tendría que trabajar hasta altar horas para poder mantener una situación económica "estable", ni su pare tendría que estarse peleando cada mes con su madre por los gastos de Navah.

Tal vez si no existía todo podría mejorar. Tal vez su madre y su padre no estarían divorciados y estarían viajando por el mundo.

Pero aun así, a pocas personas en la vida les había llegado a importar verdaderamente.

Siempre quiso ser recordada y ahora estaba pensando en ser olvidada para siempre. Que ironía.



Ander se había ido directamente a su habitación. No quería hablar con nadie. Necesitaba pensar.

Los Elegidos (Legado Elemental #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora