Pasados unos días yo pude salir del hospital en el que me ingresaron después de que me desmayara en los brazos de Matt. Me dijeron que no tenía porque preocuparme, que era normal después del golpe que recibí que notara molestias, pero me recetaron un medicamento que realmente me iba estupendo.
En cuanto a Matt, estuvo a punto de morir por falta de minerales en su cuerpo, apenas comió ni bebió mientras estaba con Dylan. Le conectaron a un gotero por donde le entraba todo lo que necesitaba para recuperarse bien.
Y Dylan... No quiso soltar el arma y mis compañeros tuvieron que actuar. Le dispararon en el hombro y dejó caer el revolver al suelo. Según me dijeron. Nunca pensé que él fuera así, y me insistía a mí misma que debía saber bien con quien me relacionaba.
Aún pasado el mes, no pude reincorporarme. No por que no quisiera, sino por que mi cabeza aún estaba algo sensible. Cada dos por tres iba al hospital para ver a Matt, no solía tener compañía. Pero un día sí que la tuvo. Lástima que me diera cuenta justo después de cruzar la puerta.
Había sentada en una silla una mujer morena de edad algo avanzada, con unas gafas rojas, cogiendo la mano de Matt, que en ese momento estaba dormido. En otra silla vi a la rubia de Rebecca leyendo un libro. "Qué sopresa. No sabía que supiera leer" pensé. Pero al fijarme bien supe que solo se trataba de una revista del corazón. En cuanto me vió me dedicó una mirada asesina.
- Mira quién está aquí - dijo con desgana - pensaba que dejaste de ver a Matthew cuando te pegué aquella paliza en el parque.
- ¿Disculpa? - dije alzando una ceja - no fui yo la que salió corriendo.
- Tu sigue con él y terminarás mal - dijo levantándose con aire de superioridad.
- Tu sigue amenazando a una agente federal y terminaras entre rejas intercambiando tabaco por sexo - dije yo tan tranquila.
- Rebecca - llamó la mujer al ver que la rubia iba a seguir - basta - ella obedeció y salió de la habitación - ¿quién es usted?
- Soy Alice Reid - le sonreí - amiga de su hijo.
- ¿Sólo amiga? - me miró pícara a lo que yo sonreí - soy Marilyn Gubler, la madre de Matt. Ha hablado mucho de tí. Lo hace como si hablara del jugete favorito que tenía de niño... Te quiere, Alice.
- Y yo también a él - sonreí mientras le miraba y le apartaba un mechón que tenía delante de la cara.
Al entrar en contacto mi dedo con su frente, Matt frunció el ceño y abrió lentamente los ojos. Me miró a mi primero y me sonrió, para después cogerme la mano que aún tenía en su cabeza. Luego miró a su madre y se sorprendió al verla. Balbuceó un "mamá" y ella se acercó para darle un fuerte abrazo. Lo curioso fue que Matt no soltó mi mano, es más, la cogió con más fuerza.
- Alice - dijo cuando su madre se separó de él - esta es mi madre. Mamá, ella es Alice.
Nos miramos Marilyn y yo sonriendo y nos volvimos a presentar. Las dos sabíamos que a Matt le haría ilusión que él hiciera los honores.
- Bueno chicos - dijo levantándose - os dejo solos, tengo que hacer unas cosas - salió por la puerta y me guiñó un ojo.
Sonreí ante el gesto de su madre. Era una de las personas más simpáticas que había conocido nunca. Me cayó bien en seguida. Matt me miró y sonrió levemente, mientras seguía cogiendo mi mano.
- ¿Cómo estás? - le pregunté también sonriendo.
- Bien - dijo para después bostezar - gracias por venir.
- No tienes por que agradecer nada - dije acariciándole la mejilla derecha - sabes que siempre estaré contigo.
- Alice... - me llamó.
- Dime - le contesté con una sonrisa de oreja a oreja.
- ¿Puedo hacerte una propuesta? - sonrió mientras se sonrojaba.
- ¿Una propuesta? - arqueé una ceja - supongo que sí.
- Vale - dijo - acércate - fruncí el ceño - acércate, que es un secreto.
Me acerqué a su oreja y al principio me sopló levemente como para hacerme una broma, a lo que me aparté. Luego volvió a decirme que lo hiciera otra vez y, al insistir tanto, decidí hacerlo.
- Te quiero - dijo susurrando.
Una especie como de mariposas empezaron a revolotear por mi estómago. Estaba acostumbrada a que me lo dijera, pero había utilizado un tono de voz que nunca le había oído.
¿Y si esta vez lo decía de verdad? ¿Y si no lo decía en plan amigos? Sonreí y empecé a separarme de él, pero sus manos atraparon mis mejillas y me estiró hacia él. Sus labios entraron en contacto con los míos y los saboreé bien. Eran deliciosos. Luego se separó y me besó la nariz.
- ¿Te apetecería salir conmigo? - dijo nervioso - es decir... Ser mi... Mi novia.
Se miró las manos aún más nervioso y yo sonreí. Luego de esperar unos largos segundos me miró. Acerqué mi rostro al suyo y esta vez fui yo la que le besó. Saboreando también. Eran tan adictivos... Si por mi fuera, estaría así dos horas.
- Claro que sí - le dí otro corto beso en los labios.
Él sonrió abiertamente y yo igual. Luego le dije que siguiera descansando y que yo también lo haría. Al cabo de una media hora se durmió y después de otra lo hice yo sintiéndome la persona más feliz y afortunada del planeta. Siendo por fin la novia de Matthew Gray Gubler.
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Bieeen!! Al fin Alice y Matt juntoos!!
No tengo mucha cosa que deciros, así que... Nos leemos!!
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Sorpresas en Virgina (Matthew Gray Gubler fanfiction) [Wattys 2017]
Fanfic"Mi sueño siempre fue entrar en el FBI para trabajar en la Unidad de Análisis de Conducta. Para eso debía nacionalizarme en Estados Unidos después de vivir una serie de años allí. Conseguí hacer mi sueño realidad gracias a Mentes Criminales y a Spen...