Capítulo 4

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Es peor de lo que pude haber imaginado.

Dios si esto no fuese en honor de Tía So hubiera escapado en menos de la mitad, sentado aquí he podido imaginar mil formas de salir del lugar. Mi padre me esta cobrado cada segundo del permiso que me dará en la noche por esto pero por lo menos la perspectiva de la noche me mantiene vivo. Apenas regresamos a la Casa Blanca ya podía escuchar a los camarógrafos y a las personas que se encontraban en el jardín trasero de la Casa Blanca.

Espere con mi padre mientras anunciaban el típico "El Presidente de los Estados Unidos David Harrison y William Harrison", detesto que me llamen William. Salimos saludando con la mano a las personas que gritan saludos al vernos, la popularidad de mi padre es inaudita, aunque claro, yo contribuyo con mi presencia. Las banderas de Francia y Estados Unidos son sostenidas por Marins en las escaleras que dan al balcón con el Sello del Presidente de los Estados Unidos. A nuestros lados la bandera Presidencial,  las de los cincuenta Estados y demás banderas de departamentos y áreas de las fuerzas armadas son igualmente sujetas por Marins, ejercito, fuerza aérea y naval.

Tropas de las ramas de las fuerzas armadas están ubicadas frente a la tarima con el habitual podio para mi padre y la alfombra roja guindando a ella. Los camarógrafos ubicados estratégicamente a un lado mientras que los invitados civiles se encuentran a ambos lados con banderas de Francia y América. A un lado del podio habían colocado mi silla y la de Nico, me parecía ilógico que fuéramos los únicos sentados en ese lugar mientras que el gabinete de mi padre permanecía junto a la tarima en otro tipo de sillas a un lado de la tarima.

Recordar a todo el gabinete de mi padre siempre había sido un dolor de cabeza pero como buen hijo, para mi desgracia en cuanto a aprender mas nombres cargos y todo, los conozco a todos, la mayoría me agradan son buenas personas y un excelente equipo, pero solo dos sobresalían. Steph por obvias razones, y el Vicepresidente de mi padre Eric Jewell un antiguo político, de cincuenta y tantos años, uno de sus más fuertes colaboradores.

Están parados de acuerdo a su cargo, con Eric encabezando junto a los tres secretarios más importantes de la administración Steph su Secretaria de Estado, Adam Sidney el Secretario del Tesoro y Harry Johnson su Secretario de Defensa.

Su Consejero Militar el General Martin Arlington Presidente del Estado Mayor Conjunto; su Consejero de Inteligencia James Maslow Director de Inteligencia Nacional y el Asesor de Política de Drogas, Edward Miller, Director de la Política Nacional de Control de Drogas. Los asistentes regulares, Sally Donovan su Asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Denise Lew Jefe del Estado Mayor, Adriana McDonald Asesora Adjunta de Seguridad Nacional y Richard Allen Stuart el Fiscal General de la Nación.

Y los asistentes, Dominica Ortiz su Secretaria de Energía, Janet Benet Secretaria de Seguridad Nacional, John Rosenman Asesor de la Casa Blanca, Brad Newman representante del Consejo Nacional Económico, Warren Stevenson Embajador de Estados Unidos Ante las Naciones Unidas y Wanda Jones Directora de la Oficina del Manejo del Presupuesto. Los conozco a todos y me se sus cargos. Pero en fin una bomba aquí y bien podrían poner en problemas al país por algunos días.

Mi padre y yo desfilamos al son de Hail to the Chiff antes de que el auto francés estacionara frente a nosotros. Sophie y Nico salen inmediatamente saludando al público antes de a nosotros. Inmediatamente los cuatro avanzamos en escrito protocolo a saludar a todos los miembros del gabinete de mi padre antes de que me ubicara frente a mi asiento con Nico a mi lado, mientras ellos suben a la tarima a escuchar el himno francés seguido por el americano.

Inmediatamente ambos pasan revisión a la guardia por los batallones y saludaron a los civiles que se encuentran apostados a los lados tomándose fotografías, estrechando manos, conversar con algunos y demás. Los discursos de cada uno tardan alrededor de seis o siete minutos en los que ambos abordaron las relaciones bilaterales entre nuestros países antes de hablar sobre Corea. Ambos reafirmaron la necesidad de ayudar a la pacificación de la región, la lucha contra los disidentes, la resolución de Naciones Unidas brevemente y la importancia del apoyo ruso a la propuesta.

El Hijo Del Presidente Vol.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora