Capítulo 13

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Poco a poco voy recuperando la conciencia, y mientras lo hago, para mi sorpresa, me siento... somnoliento, mi cuerpo no protesta tanto, es mas siento... siento como si pudiese seguir durmiendo.

No he sentido algo así en mucho tiempo, siempre tengo el pulso acelerado al despertar, lleno de cansancio y adrenalina, pero en este momento me siento...descansado. Siempre que me levanto la fatiga aún está presente en mi cuerpo y no tardo nada en estar totalmente consiente y activo. En este momento hasta me cuesta abrir los ojos, pero al hacerlo, lentamente acoplándome, me encuentro con el rostro de Nadya quien me sonríe, tiene un rostro hermoso en las mañanas, sus ojos brillan y su sonrisa es toda una visiona... puedo acostumbrarme a que ella sea lo primero que viese al despertar. Pero un minuto... ¿se levantó antes que yo?, para mi sorpresa me mira como si estuviera sorprendida y feliz. No recuerdo haberle hecho algo que pusiera esos sentimientos en su sonrisa, lo ultimo que recuerdo es haberle contado cuanto me importa haber probado sus labios primero... y espero seguir siendo el único.

-Buenos días-susurro incorporándome lo suficiente para besarla suavemente en los labios sintiendo escalofríos por todo el cuerpo, nunca había besado a nadie al despertar, se siente bien hacerlo.

-Buenos días-dice ella tranquilamente y me mira ahora con un poco de preocupación mordiéndose el labio apenas un segundo-no entres en pánico por favor, esto es bueno, es maravillosos de echo.

-¿Qué cosa?-pregunto ahora preocupado, cientos de cosas pasan por mi cabeza ante sus palabras, Rick encontrándola aquí, los otros, su padre, el mio, mierda-yo....

Me callo al segundo al ver la luz que iluminaba nuestras siluetas bajo las cobijas.

Es luz del sol.

Es de mañana.

Esto es completamente imposible. Me incorporo rápidamente y en unas pocas zancadas me acerco a la ventana abriendo las cortinas de par en par. El sol está ya en lo alto, ni siquiera a medio camino ni semejante, esta alto en el cielo iluminando la ciudad sin muchas nubes en el cielo que hagan competencia a su presencia. Miro el reloj y me quedo mudo inmediatamente. Son las once de la mañana.

Once.

El reloj debe estar mal... es imposible que haya dormido tanto tiempo, no he dormido más de cuatro horas diarias desde hace años, no puede ser esto, es en verdad imposible. He dormido casi toda la mañana. Miro a Nadya quien rebosa felicidad por mí, lo noto en como me mira y en su sonrisa. Aun no lo puedo creer. Miro nuevamente al exterior para cerciorarme de que esto es verdad, efectivamente el sol sigue en lo alto y el cielo es completamente azul. Intento buscar una explicación lógica, no he cambiado mi dieta, ni hecho mas ejercicio, ni tomado medicamentos, ni bebido nada... lo único que se me viene a la mente que cambio de la noche pasada a esta es que la responsable de esto no es otra que Nadya.

De alguna manera el tenerla a mi lado durante la noche me había permitido dormir, es la única explicación con la que puedo dar, suena estúpido pero es lo único que ha cambiado. Me repito todo nuevamente no he tomado píldoras nunca me han ayudado a dormir, dado que cuando lo hacia extendían unas pocas horas mi sueño pero a costa de dejarme sintiendo mal, tampoco he comido algo en especial o me he sobre agotado en el gimnasio o estudiando, nada fuera de lo ordinario, lo único que ha cambiado es que ella estuvo conmigo, es el único gran cambio en mi vida.

Inmediatamente giro y camino despacio hacia ella, aunque mi cuerpo quiere correr y saltar sobre ella, ella me sonríe mientras me subo a la cama y la tomo de las muñecas para acostarla en la cama mientras coloco mis rodillas a cada lado de su cuerpo, lo suficiente para arrinconarla bajo de mí y tener sus labios a mi merced mientras ella ríe ante lo loco que debe verse mi accionar antes de besarla. Ella reacciona entre risas mientras me devuelve los besos. Esto es lo mejor que me ha pasado en años, claro está después de haberla encontrado. He dormido por Dios, dormido. La beso aún más mientras ambos nos reíamos esta vez. Dios si lo que siento es amor y había planeado nunca dejarla ir, ahora no conciliare mis noches sin ella... literalmente

El Hijo Del Presidente Vol.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora