Después de la fiesta (II)

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De repente el colgante dejó de brillar. Decidí guardarlo para después entregarlo a la comisaría ya que parecía un colgante muy caro. Me preguntaba de quién sería aquel colgante.

Entré en la habitación y lo guardé en mi joyero.

Sofía aún seguía dormida.

-Sofía levanta que es la hora de comer-le susurre al oído

-No grites que me duele la cabeza- dijo Sofía con los ojos cerrados

-No estoy gritando- me reí

-Maldita resaca- dijo

-Si no hubieses bebido tanto anoche no estarías de resaca

-Pareces mi madre- dijo riéndose

-Jaja, muy graciosa- dije sarcásticamente

-Menos mal que las clases empiezan mañana, porque si no me hubiese dormido en todas las clases- dijo

-Yo que tú me pondría unas gafas de sol

-¿Por qué? -dijo

-Porque tienes todo el rimel corrido y tienes unas ojeras que se ven a 2 kilómetros de distancia. Pareces un oso panda- le dije riéndome

-¡Dios mío! Vaya cara tengo- dijo mirandose al espejo

-Ya te lo he dicho yo- dije riéndome

Sofía se vistió, se peinó y se puso las gafas de Sol. Ya por lo menos no se le notaba la resaca.

-¿Donde quieres ir a comer?- le dije

- Vamos al restaurante Scott, dicen que está muy bien- dijo Sofía

-Vale

Cogimos el autobús y llegamos al restaurante Scott.

Aquel restaurante era un sitio bastante acogedor y iban muchos estudiantes allí.

Nos sentamos en una mesa y comenzamos a hablar.

-No recuerdo la mayor parte de anoche, pero si recuerdo que te fuiste con aquel chico ¿Qué pasó? - me dijo

-Estuvimos conociéndonos- dije sonriendo

-A ti te gusta ese chico- dijo con una sonrisa traviesa

-Pues no listilla- le dije

-Entonces ¿Dónde estabas esta mañana?- dijo

-Yo... - dije intentando pensar una excusa

-¡Te he pillado! -dijo riéndose

-Vale sí estaba con él pero eso no significa nada- le dije

-Claaaaro- dijo sarcásticamente

-Cree lo que quieras a mi me va a dar igual- le dije

-Y ¿cómo se llama?- me pregunto

-Marco

-Marco por Isabella- dijo riéndose

-Pareces una niña pequeña- le dije riéndome

-Es que por dentro sigo siéndolo- dijo

-Bueno ahora hablemos de ti ¿Qué hiciste anoche aparte de beber?- le dije

-Como dije antes la mayor parte de la noche no la recuerdo, pero recuerdo que antes de emborracharme conocí a una chica muy simpática- dijo

-¿Cómo se llama?- le pregunté

-Se llama Rachel y es de Irlanda.

-¿Y que carrera va a hacer? - le pregunté

-Creo que no se lo pregunté y si se lo pregunte no me acuerdo- me contestó

- La próxima vez no bebas tanto- le dije

-Eso haré - me dijo

Estuvimos hablando un buen rato.

Cuando terminamos de comer , salimos del restaurante Scott y volvimos a la universidad en otro autobús.

Eran las 5 de la tarde y me acordé del colgante que había encontrado. Lo guardé en mi bolso y empezé a andar para ir a la comisaría ya que estaba cerca.

Lo único que pensaba en aquel momento era en devolver el colgante a su legítimo dueño.

Cuando de repente el colgante empezó a brillar y ya no controlaba mi cuerpo. Era como si me estuviera controlando y hizo que me pusiera el colgante.

Cuando volví a manejar mi cuerpo , ya no podía quitarme el colgante asi que tuve que volver a la universidad.

No podía creer lo que estaba pasando, estaba nerviosa por si me acusaban de ladrona y me sentía mal por su dueño.
Lo intenté de todas las maneras pero no pude quitármelo.

Entré en mi habitación y estaba Sofía escuchando música a todo volumen.

-¡Bájale la voz!-le dije gritando

-Vaaale- dijo

Le bajó la voz hasta que la música se quedó de fondo.

-¿De dónde has sacado ese colgante tan bonito?-me preguntó

-Me lo he encontrado- le contesté

-¿Es de diamantes?

-Creo que sí

-¡Que suerte has tenido!- exclamó

-Yaaa

-Oye te dejaste el móvil , sonó y no he podido evitar leerlo- me dijo

-Eres una cotilla- le dije riéndome

Sofía me dió el móvil y leí un mensaje de Marco

Hermoso inocente: Me ha encantado pasar la mañana contigo y espero volver a verte 😉

Sí, le había puesto ese apodo, era el que mejor le describía.

Yo: A mi también me ha encantado y cuando quieras nos vemos 😊

Cuando se hizo de noche me puse el pijama y preparé mi mochila para las clases de mañana.

Estaba muy cansada y me dormí pronto.

De repente vi una luz que me cegaba.

Y lo único que pude ver fue a un hombre mayor.

-¿Donde estoy?- le pregunté

-Estas en un sueño producido por el colgante- me contestó

-¿Quién eres?- le dije

No entendía nada de lo que pasaba

-Eso no importa, lo que importa es que te encuentres a ti misma - me dijo

-¿Cómo que me encuentre a mi misma?- le dije

-Investiga- me dijo

-¿Sobre que?

-Sobre la leyenda del colgante- dijo el hombre mayor mientras desaparecía

-¡No, espera no te vayas!-dije

En ese mismo momento me desperté confusa.

-La leyenda del colgante ¿Qué leyenda es esa?- me dije a mi misma

Mé pregunté si eso fue real o sólo fue un sueño .

Cuando terminé de preguntarme que había pasado seguí durmiendo.

La leyenda del colganteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora