DOS BODAS Y UN EMBARAZO

3.8K 240 13
                                    

Hermione miraba a Luna.

Luna le sonreía dulcemente y con una suave caricia le cerró la boca.

-Te casaste y no avisaste- había logrado balbucear la castaña.

-¿No te parece una gran noticia?- había preguntado temerosa-sé que es repentino pero cuando volví a ver a Theo en casa de los Malfoy, mi vida cobró sentido de nuevo amiga.

-¡¡¡Theo, Theo Nott!!!- agregó casi en un grito- él es ojitos de miel, tu ojitos de miel- asombrada añadió Hermione- oh Luna, ahora entiendo todo, tu amor, aquel amor que te esperaba en Hogwarts cuando te secuestraron los mortífagos- Luna asintió y la castaña la estrechó en un gran abrazo- cuéntame todo por favor.

-Bueno... fui a visitar a Lucius, entramos a tomar el té y allí lo encontré, lo ví y sentí en ese momento cuando lo abracé que había regresado a casa- explicaba Luna con una simpleza que sorprendía, pero otra cosa no se podía esperar, Luna fue siempre así, tan pura, clara y transparente que no se concebía otra historia como la de ella- me invitó a cenar, allí me propuso matrimonio, acepté, nos casamos, y hasta hace unos días estuvimos en Venecia de luna de miel- sonreía y en ese simple gesto iluminó todo la oficina- como nosotros- Hermione la miró sin entender esto último- yo Luna y él miel.

- ¿y dónde está Theo en estos momentos, escondido por miedo a que lo mate por robar a mi amiga?-preguntó en broma.

-está con Draco en Francia, ya que él se ocupará de sus negocios allí. Theo tiene una cadena de librerías mágicas y después del bautismo abrirá una sucursal en Hogsmeade- los ojos de Hermione habían cobrado un brillo distinto en esos momentos.

-oh Luna, creo que a partir de ahora tendré un nuevo mejor amigo- completó.

- no dejes que te escuchen Harry y Ron- entonces se abrazaron las amigas y prometieron festejar como se merecía una notica tan sorprendente.

-¿con Luna Lovegood, la sanadora de mi padre, la lunática?.

-más respeto con mi esposa y si, es ella, Luna Lovegood desde hace un mes Luna Nott- le había entregado a Draco una vaso de whisky de fuego que bebió de una vez- ella es el amor imposible del que yo te había hablado cuando estábamos en el colegio- le golpeó la espalda al rubio para ayudarlo en su ahogo con la bebida fuerte- cuando la encontré en tu casa mi vida volvió a la luz amigo, no podía dejarla ir, así que cenamos, me aceptó la propuesta, fuimos por su padre, la directora McGonagall nos casó en los jardines de Hagrid con los thestral de testigos silenciosos y nos escapamos a Venecia, aquí me tienes, te dejo a cargo de mis negocios acá y me mudo a Hogsmeade donde inauguro una sucursal después del bautismo de Scorpius.

- Con esto me confirmas que son un par de locos- abrazó a su amigo- serás feliz hermano, te lo mereces.

Hermione aún no había terminado de digerir la noticia de la boda inesperada de Luna y Theo cuando le sucedió algo totalmente insospechado en su consultorio.

La última paciente ingresó y Hermione se sorprendió al encontrar a Daphne Greengrass frente a ella- acá vamos con los reclamos- pensó la sanadora. Alta, cabello negrísimo como una noche sin luna, ojos tan celestes que el mar palidecía ante la comparación, sangre pura, empleada modelo en el Ministerio, en rápido pero merecido ascenso, como se comentaba en la oficina de Control y Regulación de Criaturas Mágicas. La esbelta morena se sentó, Hermione notaba su nerviosismo.

-¿ en qué puedo ayudarla Srta. Greengrass?.

- puede llamarme Daphne y quisiera que Ud. sea mi sanadora a partir de este momento. Eres la mejor y luego de los hechos conocidos por nosotras no puedo elegir a otra sanadora que no seas tú Hermione.

Siempre fue ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora