Memorias (Tom Kaulitz Fanfiction)

El Jardín Es Muy Grande

¡Ta-ran!

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Tom y yo nos miramos el uno al otro cada uno de los dos con la boca llena, había terminado por convencerlo de quedarse conmigo en la cama esa mañana y holgazanear toda la mañana, no había sido cosa fácil... incluso tuve que fingir una pequeña tos y hacer puchero para que se volviera a meter a la cama; habíamos estado tumbados sobre el otro en la cama y comíamos palomitas mientras veíamos una tonta parodia de los juegos del hambre.

Me reí de cada estupidez que ocurría mientras Tom jugaba con mi cabello como quién no quiere la cosa; mi cabeza estaba en su mecho, él estaba acostado como un ser humano normal, común y corriente, pero yo estaba despatarrada de lado, la mitad de mi cuerpo iba hacia un lado y debía torcerme un poco para alcanzar el tazón de las palomitas que sabiamente Tom había colocado en su regazo.

- ¿De verdad te sientes mal? - Me preguntó y me toqué la garganta al responder, no fuera a ser que se pusiera de pie y se fuera a correr. 

- Ay, sí... - Hice voz enferma, - me duele como...como por aquí... - me senté y le mostré dónde en el cuello.

- Ah, ¿aquí? - Me preguntó tocándome el cuello con expresión preocupada. 

Asentí con expresión de fastidio. Tom se inclinó para besarme pero se detuvo a unos centímetros y me dejo con las ganas. 

- No me vaya a enfermar yo también... - Se apartó de mí. 

- Bueno... mira... - Me eché prácticamente encima de él cuando se dejó caer en las almohadas. - Es más como... de alergia...

- ¿Ah, ahora es alergia? - Entornó los ojos y encogí los hombros. 

- Sí, sí, ¿qué creías tú? - Le respondí, debía cambiar el tema antes de que algo más pasara. - ¿Ya viste que pasan modern family por netflix? ¡Me habías dicho que te encantaban las tonterías de Sofía Vergara! ... y yo espero que no le hayas apodado así a su busto, ¡eh!

- ¿Se te compuso la voz?

Me di vuelta hacia Tom, él cogió un par de palomitas en su mano y se las comió mientras me veía fijamente. 

Volví a sentarme y desvié la mirada. 

- Son mis alergias... - susurré. 

- Aja... - Me dijo mientras volvía a comerse otras cuantas palomitas. 

- Me irritan la garganta... - Le dije. 

Pasaron unos segundos de silencio, a excepción del ruido que provenía de la televisión; de pronto me cayó una almohada en la cara, la atrapé cuando cayó a mi regazo y miré a Tom sorprendido. 

- ¡Qué te pasa! - Me queje sin saber de qué me quejaba. 

- Nada. - Respondió y encogió los hombros. - Me mentiste y ahora tendré que correr por la tarde, pero al menos sé que me escuchas aún cuando estás metida en tu asunto de la novela. 

- ¿No estás molesto? - Le pregunté y él negó con la cabeza. - ¿No te vas a ir a correr? 

- Nah, pero si vas a quitar esa película... pues, bueno... no me molestaría. - Me senté y alcancé el control remoto. 

Vimos una película distinta y luego nos cambiamos para sacar a Olly a pasear, el pobre estaba dando vueltas persiguiendo su propia cola, desesperado después de que su usual paseo matutino con Tom fue postergado, Tom iba a tener que utilizar las maquinas en el gimnasio, por ahora era necesario que Olly saliera de la casa.