Helena: Pequeña Princesa

Pasado que vuelve

PDV Julián
27 de abril

Me siento realmente devastado. Hace una semana me entere de que mi hija está enferma. No puedo creer que la vaya a perder también. Quiero ser positivo pero algo me lo impide. No quiero que me quiten a mi hija. Ella y Pamela son lo último que me queda.

- Si quieres puedes irte a casa.- dice Adam. Me fui a trabajar para despejar un poco la mente.

- Gracias, pero prefiero quedarme aquí.- digo con la voz algo quebrantada.

Durante años, no deje salir ni una lágrima. Helena a sacado todas esas lágrimas que alguna vez decidí nunca sacar.

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PDV Pamela

Estaba sentada en el mueble de nuestro apartamento. Miraba una foto de Helena. No podía creer que mi hija tuviera cáncer.

Helena juega en el piso y pienso en como puede estar enferma y ser tan feliz. Ojalá siempre sea así, positiva.

Alguien toca a la puerta, me levanto y abro la puerta. Allí, del otro lado, había una mujer de pelo rubio, con una expresión de miedo en su cara. Tenía un hermoso bebé en sus manos, era bastante grandecito. Tenía pelo oscuro y ojos oscuros. Se que he visto esa mirada en algún otro lugar.

- ¿La puedo ayudar?- pregunto cordialmente. Ella mira confundida.

- ¿Aquí vive Julián Morelli?- pregunta

- Si, es mi esposo. ¿Necesita algo de él?- pregunto ahora yo confundida.

-¿Podría pasar? Es que es muy confuso y tengo que explicárselo.- dice ella aún con esa expresión de miedo.

- Si, adelante.- digo dejándola entrar con el bebé. Estoy intrigada y quiero saber que tiene que ver ella con Julián.

La invito a sentarse en nuestra sala. Ella mira a Helena con ternura, yo aún sigo confundida.

- Ahora si. ¿La puedo ayudar?- pregunto

- Si..... Julián no sabe muchas cosas. Se que no fue culpa de él. Pero ya no puedo más. No puedo, Santi.- dice abrazando al bebé. Ahora si que estoy muy confundida.

- No la entiendo. ¿Que es lo que quiere decir?- pregunté

- ¿Podría traerme un vaso de agua?- dice ella evitando mi pregunta. Veo que sus ojos están cristalizados.

-Claro.... Vuelvo enseguida.-digo mirándola raro.

Voy a la cocina y sirvo el agua. No se que hace esta mujer aquí, parece que es importante pero no logra decirme.

Entonces escucho la puerta cerrarse y sentí como mi sangre dejo de circular. Pensé lo peor, pensé en Helena.

Deje caer el vaso al suelo mientras corría a la sala. Allí, vi a Helena, aún jugando con sus juguetes. La señora ya no estaba, pero había olvidado a su bebé en mi sofá.

El niño lloraba, tenía un osito con ropa azul y lo apretaba fuerte. Mi reacción fue buscar a la mujer por todo el apartamento, fue en vano. Ya no estaba. ¿Qué le pasaba a esta extraña mujer?

Fui otra vez a la sala y vi que había una carta y unos sobres al lado del bebé. Esto parece de película. La mujer se había ido dejando su bebé en mi sofá.

" Querido Julián:

Qué muchas vueltas da la vida ¿no? Hoy estas conmigo y mañana no sabes si estaré. Seguramente, si lees esta carta, ya estoy muerta o aún agonizo. Este es nuestro hijo, Santiago. Las noches que pasamos juntos, fueron increíbles. Le pedí a Dios que nunca se acabaran aquellos momentos tan felices. Entonces, me dio un hijo. Tu hijo. Cuando me entere que estaba embarazada, quise ir corriendo a decírtelo. Pero no me atrevía, así que me arme de valor cuando tenía 5 meses de embarazo y fui hasta tu nuevo apartamento. Antes de tocar a la puerta lo pensé muy bien. Mis manos temblaban, no sabía como lo tomarias. Entonces, Ella abrió. Era otra mujer, no era yo. Tenía una bebé en sus brazos y no tuve el valor de quitarte eso a lo que llamas familia. Dije que me había equivocado de apartamento y me fui.
Ahora estoy enferma y me voy a morir. Nuestro hijo, no puede quedarse sólo. Mi amiga no puede cuidarlo pero te lo entregara tan pronto yo me vaya. Por favor, Julian, cuida a nuestro hijo. Por los buenos momentos que tuvimos, por la vida que no puedo darle. Por favor, te lo suplico. Es tu hijo, tu eres su padre.

Con amor,
La madre de tu hijo, Sofía."

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Gracias por leer, los quiero🎏