PDV Pamela
15 de agostoAún sigo afectada por lo de la custodia de nuestra hija. Todavía no creo esto.
-¡Mamá! Vamos..-dice Helena sacándome de mis pensamientos, hoy iríamos a ver a Valeria, la amiga de Helena. Llevaba varios días en el hospital, no llevaría a Helena, pero me insistió tanto que no me pude resistir.
- Voy, me falta Santiago.- digo buscando el bulto de Santiago. Mi niño corre hacia mi y me pide que lo cargue, ya tiene 4 años pero le encanta que lo cargue. Su pelo se aclaró, lo tiene de un tono rubio hermoso.
Salimos del apartamento y nos subimos al auto. Helena esta ansiosa por ver a su amiga.
Llegamos al hospital y pasamos al área de pediatria. Buscamos el cuarto de Valeria pero no estaba allí. Estaba vacío.
-¿y Valeria?- pregunta Helena confundida.
-No lo se amor.- digo pensando lo peor.
Salimos y le pedí a Helena que se sentará en una de las sillas que allí habían junto con Santiago. Quería preguntarle a la recepcionista en donde estaba Valeria.
-Disculpe, ¿Dónde está la paciente del 304?- pregunto con un nudo en mi garganta.
-¿Era familiar de la paciente?- pregunta la recepcionista. Mi corazón se quebró en 2 pedazos.
- Mi.... Mi hija es su amiga.- ella me mira y aprieta sus labios.
-Lo lamento, ella murió ayer.- dice con una expresión de dolor en su rostro. Yo solo asiento y doy media vuelta hacia donde estaban mis niños.
-¿Y Vale?- pregunta Helena con 2 de sus muñecas en las manos.
-Ven amor, te lo explicaré en casa. - digo tomándolos a cada uno en una mano.
Salí devastada del hospital. No le pedí el número a Amy, no puedo comunicarme con ella. El hospital tampoco da información confidencial sobre sus pacientes. Sólo pensaba en la pequeña Valeria, una niña que tenía todo por delante.
Conduzco llorando por todo el camino. Me impactó mucho que muriera. Por un instante pensé en que pasaría si esa hubiese sido mi Helena. Estaría muerta en vida.
Llegamos otra vez al apartamento. Le dije a los niños que jugaran en la sala y me fui a mi cuarto a llorar. No podía evitar sentir que esa podía ser mi hija.
Entonces Helena entra en mi cuarto y se sienta junto a mi pansa.
-¿Por qué lloras?- me pregunta acariciando mi vientre.
-Por nada, amor.- digo limpiando mis lágrimas y sonriendo.
-¿Dónde esta Valeria?- pregunta
- Esta en el cielo, Helena.- digo sonriendo para no llorar.
-¿Cómo es el cielo?- pregunta curiosa. Amo cuando es curiosa.
-Bueno, tiene todo lo que te gusta. Todo es bonito, nadie esta triste, todos sonríen por que Dios te da un flor cada vez que sonríes. Puedes comer todo lo que quieras. También puedes correr todo lo que se te antoje. - digo en forma de fantasía para no confundirla. Ella me mira con cara de asombro.
- ¿Valeria está allá ahora?- pregunta ansiosa
- Si mi amor, ella debe estar jugando ahora mismo. -
-¿Y allí hay animales?- Pregunta ella
- Si, muchos. Dinosaurios, unicornios, vaquipollos. De todo.- digo
- ¿Vaquique?- pregunta ella. Yo río.
- Vaquipollo, es una vaca con patas y pico de pollo.- digo haciendo una voz graciosa.
- Wow, ya quiero ir al cielo.- dice ella riendo.
-No amor, no me dejarás sola. ¿O si?- pregunto con el corazón en la mano.
- No mami, puedo visitarlo y volver.- dice ella, su inocencia me encanta.
- Ven, abrazame.- digo extendiendo mis brazos. Ella se acurruca y pone su cabeza en mi pecho, con algo de dificultad por mi abultado vientre.
- Oye, yo quiero.- dice Santiago trepándose en la cama. Entonces extiendo mi brazo y también lo abrazo.
Nos quedamos ahí, acostados los 4. Todos juntos, hasta que nos dormimos. No importaba nada, ni Julia ni el cáncer ni la muerte. Nada, sólo estábamos allí disfrutando de la compañía de cada uno.
- Pamela, Pamela.- dice Julián frotando levemente mi frente para que me levantara. Yo me asusto un poco al notar que Julián había llegado.- Ven conmigo.- dice en voz baja, los niños aún duermen.
Me muevo lo menos que puedo mientras me levanto y salgo del cuarto.
- Hola amor, me quede dormida con los niños.- digo dándole un beso.
- No sabes cuanta falta me hiciste.- dice él abrazandome. Mi vientre se encuentra en medio de nosotros así que es más difícil para abrazarnos.
-¿Pudiste arreglar lo de la custodia?- pregunto.
- Si, ahora Adam y yo iremos a cortes para arreglar el documento. Aunque claramente establece que ella renuncia a todos los derechos maternales.- dice sonriendo - Ese Leonardo no va a poder con nosotros.-
- Me alegra amor, esa es una buena noticia. Aunque, la amiga de Helena murió ayer.- digo
-¿Qué? ¿La niñita de la que siempre hablaba?- pregunta Julián.
- Si, murió ayer, mientras nosotros celebrábamos la vida de Helena.- digo.
- Estoy... Sin palabras. Tenía todo por delante.- dice apenado.
- Oh, ven toca aquí.- digo al sentir la patada de mi bebé. Entonces Julián pone su mano en mi vientre y sonríe emocionado.
- ¿Ese.. Ese es nuestro bebé? - pregunta incrédulo.
- ¡Si! Se mueve mucho..- digo sonriendo también.
- Que bueno que llegaste a mi vida Pamela. Me has dado el mejor regalo, mis hijos. - dice con una sonrisa que denota lo emocionado que está por que será padre de otro bebé.
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Gracias por leer, ❤️P.D: No crean que no leo sus comentarios, sean positivos o negativos, me encanta leerlos. Gracias a todos por esos comentarios 🙌
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Helena: Pequeña Princesa
Teen FictionJulián y Pamela son mejores amigos. Ambos divorciados, deciden adoptar una niña. Pero para eso tendrían que casarse y convivir bajo el mismo techo. ¿Cómo podrán llevar su relación de amistad? ¿Acaso Pamela dará cuenta de que Julián es el amor de su...