Algo más que mi jefe

¿Le conoces?

Vi a Lucy esperando al lado del ascensor, iba con su bolso color azul celeste y un moño alto. Ella es una chica muy atractiva, lo único que le falla es su manera de ser.
Me acerqué a ella sonriendo, ella me devolvió la sonrisa.

-¡Ya estoy aquí! -Le di dos besos-

-Jajajaja puntual como siempre - dijo sonriente-

Entramos en el ascensor con más empleados de esa zona, cada uno hablando de cosas diferentes. Mientras, nosotras permanecemos calladas, hasta que me llamó la atención un comentario de uno de los empresarios.

-¿Has visto al nuevo jefe? -Dijo una chica rubia con los ojos marrones cafés-.

-Sí, yo lo veo un poco estúpido, se lo tiene muy creido -Dice el joven de al lado de la chica-.

-Venga celoso, ya te gustaría ser él -Dice la chica riendo-

-Sí ya, al menos respeto a las mujeres, no soy de esos que se la llevan a la cama y al día siguiente: "perdona no te conozco" -Dijo fríamente el chico-

-Venga ya -Dijo la chica-

El ascensor se abrió y no pude escuchar más, ¿es verdad lo que dice ese chico?, yo no creo que sea así Oscar, pero... ¿y si tiene razón?

-¡Maria! ¡Eh! - Chilla Lucy-

-¿Eh? Perdón... -Dije pensando todavía-

-¿Estás bien? Parece que hayas visto a un fantasma...-Dice preocupada-

-Sí estoy bien...¿A qué cafetería vamos? -Pregunté cambiando el tema-

-¿Qué te parece el de al lado de tu casa, el bar "Laguni"?

-¿Al "Laguni"? Perfecto - El bar Laguni es donde quedamos por primera vez, tiene un ambiente muy acogedor-

Fuimos hacia su coche ya que el mío está roto y fuimos al bar, había poca gente, normalmente había más, pero con el tema de que la gente trabaja, la crisis y eso pues la gente ya no va tanto.

Cogimos una mesa en la terraza, teníamos unas vistas preciosas, al lado de la terraza hay un jardín con una fuente en el medio.

Había unos niños jugando con una cometa, me recuerdan a mi cuando tenía su edad.

Vino el camarero, un hombre opuesto, con el cabello moreno rizado, y unos ojos marrones oscuros como los míos.

-¿Qué desean las damas? -Dije con una sonrisa preciosa-

-Yo tomaré un café con una magdalena -Dije devolviendo la sonrisa-

-Yo pediré otro igual -Dijo Lucy guiñando el ojo-

El camarero apuntó los pedidos en la libreta y se fue para dentro. Mientras Lucy y yo comenzamos a hablar sobre el trabajo, últimamente tenemos mucha faena.

-¿Conocías de antes al nuevo jefe? -Dijo Lucy levantando la ceja, cuando la levanta es porque está interesada o porque lanza ironías-

-Mmmm no ¿porqué? -Dije un poco nerviosa-

-Se os ve muy juntos, y pensé que erais amigos o algo...-Soltó-

-Pues no, lo conocí hoy, ¿te gusta? -Dije riendome-

-Que va, pero hay que admitir que está para mojar con pan y leche -Soltó riéndose-

-Alaaa -Dije riéndome a más no poder

Estuvimos hablando un par de horas, le comenté que tenía que volver antes a casa porque tenía planes y ella asintió con la cabeza.

Nos despedimos y cada una fuimos a nuestras casas. Estaba un poco nerviosa, no sabía que ponerme, si ir arreglada o informal. Decidí ir mitad y mitad con un conjunto super mono que me compré en París.

Las 8:35, tengo que coger el autobús si o si, cogí el bolso y fui a la estación.
Cuando llegué no estaba aún, así que me senté en un banco que había al lado de un árbol.