Christian y Anastasia Grey: Nuestra Pequeña Familia.

Capítulo 10

Sus ojos grises están bañados por una ligera capa de humedad. Oh Cincuenta sabía que amarías a Bip tanto como yo. Acaricio su mano y vuelve su mirada en mi dirección. Hay asombro, incredulidad y amor en ella. Sus labios se curvan hacia arriba con su sonrisa tímida. Se acerca hacia mi, limpia una lagrima que se me escapó y deja un suave beso en mis labios. ¡Está emocionado!

-Tiene ocho semanas de gestación Sra. Grey. -La doctora nos saca de nuestro momento íntimo. -Todo marcha bien. Afortunadamente lo ocurrido no afectó el embarazo. Sin embargo, estaremos atentos a cualquier cambio. Por los momentos es todo perfecto. ¿Quiere que imprima la foto?

-Si, por favor. -Es Christian quien responde con voz ronca. Saca el aparato de mi interior y se quita los guantes. Toma la foto y me la tiende. Él es más rápido y la toma primero.

-Puede ir a vestirse Sra. Grey. -Se levanta y se dirige a su escritorio.

Christian me ayuda a ponerme de pie y me abraza fuertemente mientras aspira mi cabello toma mi cara entre sus manos, acaricia su nariz con la mía.

-Los protegeré con mi vida Ana. Te amo.-Deja un beso en mis labios. Trago grueso y mis ojos vuelven a llenarse de lágrimas por la emoción.

-También te amo. -Es lo único que sale de mi boca con voz entrecortada. Me pone de pie y camino al baño para vestirme. No puedo creerlo. Estoy tan feliz, mi Cincuenta también lo está y no quiero otra cosa en el mundo.

Cuando llego al consultorio ya Christian está atacando a la pobre doctora con sus preguntas. Y, esperen TIENE UNA LISTA. Me acerco y si, definitivamente tiene una hoja con muchas letras.

-¿Entonces durará mes y medio más aproximadamente? - toma nota. ¡Está tomando notas!

-Estoy respondiendo algunas preguntas de su esposo Sra. Grey.- Comenta divertida la doctora. -Veo que tiene muchas cosas que aclarar.

-Solo quiero estar preparado. ¿Podemos continuar? -Se estaba tomando muy en serio lo del bebé, pasó de "no estoy listo para ser padre" a querer estar listo y saber todo lo que hay que saber sobre embarazos en una semana. Sus cambios de humor son tan confusos. Pero me emociona que se quiera comprometer así con nosotros. Sé que quiere cuidarnos.

-¿Qué podría suceder que afecte la salud de Ana?

-Señor Grey todos los cambios que supone un embarazo afectan la normalidad de la vida de la embarazada. Por supuesto que tendrá síntomas molestos pero no serán una amenaza para su vida a menos que se tornen crónicos -ensancha los ojos y apunta -Lo más preocupante sería la presión arterial. Pero la Sra. Grey es joven y su presión está en perfecto estado, además nos encargaremos de controlarla mes por mes y así sabremos si algo cambió.

-¿Qué debemos hacer para cuidar la presión arterial? -Pregunta.

-Una dieta balanceada y baja en sal bastará. -El sigue tomando apuntes. -Sr. Grey que le parece si le hablo un poco sobre los síntomas del embarazo en general y si queda alguna duda al respecto formula sus preguntas -Dice mientras señala con su mano la hoja que está en las manos de Christian.

Lo tomo de la mano y este se gira hacia mí. -Creo que eso estaría bien doctora Greene. -Respondo yo por él. Mientras que asiente y suspira pesadamente.

-Bien. Cuando las mujeres están embarazadas su cuerpo cambia físicamente, como es de esperarse. Debe adaptarse para ser el hogar temporal del bebé durante nueve meses. -Empieza a explicar y nosotros la miramos prestando mucha atención a sus palabras.

-Principalmente puede haber mareos, nauseas y vómitos. La sensibilidad olfativa aumenta, los olores se perciben con mayor intensidad. Puede haber cambio de gustos, algo que le encantaba o era habitual consumir puede resultarle desagradable, no solo con los alimentos, con todo. La acidez estomacal también es una probabilidad. Los antojos de cosas extrañas que posteriormente pueden acabar en el váter también son muy comunes. ¿Hasta ahora me siguen? ¿Hay alguna duda? -Ambos negamos. Ahora entiendo lo del café y el tocino. No quiero vomitar algo que me provoque comer, es tan injusto.