Capítulo 17

10.4K 549 36
                                    

En el golf aunque Christian dio la pelea fue derrotado por Bob, mi pobre esposo hacia mohines demasiado apetecibles cuando vino hacia mí después de su derrota. Ya se porque no le gusta el golf. Detesta perder. Pero la pasamos bien. Conocí a más socios de Christian, no son sus amigos, puesto que no tiene, excepto por Elliot quizás, pero conoce mucha gente. Todas esas personas se sorprendían al verme a su lado y al ver como suele ser conmigo. Es el ser mas dulce que hay debajo de esa capa de frialdad y a pesar de que no estamos dándonos demostraciones publicas de afecto se nota que estamos enamorados y todos lo notan.

Mientras estábamos en el club nos enviaron cuatro copas de Champagne unos señores que quieren hacer trataos con Christian, todos tomaron la suya menos yo. No tardaron en acercase esas personas a preguntar por qué no la había tomando. Rápidamente mi esposo supo cortar sus intensiones de saber más diciéndoles que estaba bajo tratamiento medico dados los recientes hechos. Todos en Seattle lo sabían, había salido en la prensa. Así que ese fue el principio y el fin de la intromisión de extraños.

Mi madre nos pregunto que cuando haríamos publico mi embarazo y nos limitamos a responder que cuando estuviéramos preparados. Estamos de acuerdo en eso, no queremos a los paparazzis rondándonos y husmeando en nuestra vida. Además debemos esperar un tiempo más, quizás cuando se note podemos decirlo o no lo sé, dejaré que Christian decida. Por ahora lo importante es que nuestra familia lo sabe.

_______________________________________

Es jueves, mi madre se tiene que ir. Surgió un imprevisto en el trabajo de Bob y debe volver antes de la fecha. No puedo estar tranquila con su partida, siempre me pongo algo triste y ahora con estas estúpidas hormonas más. Estamos en el aeropuerto despidiéndolos ya se han subido al avión y yo voy de regreso al auto con Christian abrazándome por los hombros. Se me escapan algunas lágrimas que limpio con el dorso de mi mano. Una vez en el auto y ya en calma Christian me da un apretón en la mano para que lo mire. Taylor va conduciendo.

-Mañana es la primera declaración en contra de Hyde, ¿Aun estas segura de querer hacerlo?

-Sí. Si con lo que pueda decir harán que no salga nunca dela cárcel lo haré.

-No es necesario. Además sabes que si te hace daño estar allí te sacaré de inmediato sin importarme tu opinión.

-Lo tengo claro señor Grey.

-Bien. Ahora, ¿quisiera acompañarme a comer señora Grey?

-Claro, estoy famélica. –siempre tengo hambre y como de a poco he ido superando las nauseas y los mareos me siento genial.

-No se diga más.

Llegamos a un restaurante italiano, es elegante. Se llama Il Idilio. Candelabros cuelgan y sus paredes son de un color crema con tonos verdosos. Nos ubicamos en un apartado y el olor a comida me abarca. Se me antoja una pizza. Si, eso quiero. Una pizza con extra queso, pimientos, cebollas, champiñones, jamón, peperoni. Dios. –alto, estas pensando en demasiada comida ¿esta segura que te acabaras todo? Además, este sitio es demasiado elegante para pedir pizza –me interroga mi odioso subconsciente. –no me importa, quiero eso y lo quiero ahora.

Se acerca el camarero y nos ofrece el menú. Lo tomo sin verlo pues ya se lo que quiero. Christian se nota muy concentrado en él. Y yo me limito a observarlo.

-¿Que quieres comer nena? ¿Pido para ambos?

-No, ya sé lo que quiero. –me armo de valor, ya que no es una comida nutritiva ni mucho menos, pero junior y yo queremos pizza. –quiero una pizza con extra queso, pimientos, cebollas, champiñones, jamón, peperoni.-balbuceo y bajo mi cabeza. Christian me mira fijamente.

Christian y Anastasia Grey: Nuestra Pequeña Familia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora