Ciento treinta y ocho. Seat

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Querido Diario:

Escuchar noticias me lava el cerebro. Por la radio dijeron que un asesino en serie anda suelto por las calles de esta ciudad, y comencé a asustarme. Cuando las imágenes vinieron a mi mente, todo me pareció demasiado real. Si a Nathan, por ejemplo, le pasara algo... yo no lo soportaría.

Nathan no escuchó las noticias conmigo, pero me notó asustada después. Me hizo contarle lo que me sucedía. Y le conté. Él solo sonrió, y me dijo que no importa lo que pase, él me protegerá. Oh Nathan, no es eso lo que me preocupa. Me preocupas tú.

Pero tal vez estoy poniéndole demasiada importancia a esto.

El deseo a una estrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora