Capítulo 10 - Ciclos que terminan

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- A X L -

14 DE FEBRERO DEL 2010

Respiro profundamente, observando a Bree, quien se encuentra tendida sobre mí. Su respiración es calmada, lo que me hace pensar que ella duerme, pero sé que no es así cuando su mano vaga por mi cuerpo con una caricia que llega hasta mi entrepierna.

Le sujeto la mano, deteniéndola, y ella apoya su barbilla en mi pecho, mirándome con reproche.

—Tengo que irme —le digo, apartándola para poder levantarme de la cama.

—¿Compromisos?

—Algo así —me encojo de hombros mientras busco mi bóxer, que se encuentran tirado a un lado, en el suelo. Comienzo a vestirme mientras ella me observa, envuelta en una sábana, y enciende un cigarrillo.

—No deberías fumar —le recuerdo y ella bufa.

No fumar, no beber. Eres tan aburrido, Jones.

—Bueno, quejarte de que soy un aburrido no es con exactitud lo que hacías hace unos momentos, ¿verdad?

Ella ríe.

—Idiota. —Golpea mi espalda cuando me siento en la orilla de la cama a ponerme mis tenis—. Um, oye...

—¿Sí? —La miro por encima del hombro.

—Tal vez es tiempo de que dejemos de hacer esto, ¿sabes? —Se muerde el labio y baja la mirada, como si le costara decir lo que dice—. Escucha, me gustas mucho, al igual que esto de divertirnos juntos, pero...

Termino de amarrar mis agujetas, me deslizo en mi camiseta y volteo a verla, poniendo una mano en su rodilla.

—Está bien —aseguro, sonriendo—. La pasé muy bien contigo las últimas semanas. Estoy bien con que esto acabe.

—¿No quieres saber la razón de mi decisión? —Me pregunta, frunciendo la nariz.

Me encojo de hombros.

—¿Quieres contarme? —digo, porque presiento que ella realmente es lo que desea, que la escuche.

—Conocí a un chico —comenta—. Él realmente me gusta. Es decir, tú también, pero creo que siempre hemos sabido que nuestra relación de follamigos no sería para siempre.

»Así que este chico... Él me gusta lo suficiente como para querer una relación seria, pero no puedo intentarlo hasta acabar con lo nuestro primero. Ni siquiera he aceptado sus invitaciones a salir.

—Bueno, es hora de que las aceptes, Bree.

—¿Entonces esto termina bien para nosotros?

—¿Bromeas? Acabamos de tener un buen sexo de San Valentín y de despedida, claro que esa es una buena forma de terminar. —Le sonrío ampliamente y ella rueda los ojos—. Ahora ve por tu chico, no lo dejes ir.

—Lo haré.

Le doy un beso en la mejilla.

—Te veré después, Bree.

—No me extrañes demasiado —bromea mientras tomo mi chaqueta y me dirijo a la salida.

—Eres una engreída —digo riendo.

10 DE MARZO DEL 2010

Oh, mierda. Algo malo pasa con Shay. Ella está rara, lleva toda la semana estando extraña y me tiene absolutamente preocupado. Muchísimo. Joder, es que ella ha dejado de sonreír. Y yo no entiendo cómo el mundo puede seguir girando si ella no está sonriendo.

Los planes de Axl JonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora