- A X L -
25 DE JUNIO DEL 2010
Finalmente está aquí nuestro último día como estudiantes séniores del instituto Thomas Jefferson.
No puedo creer que de verdad lo sea. Diablos, hemos pasado tantas cosas en este lugar. Es probable que el último día me haga ponerme todo sentimental porque muy probablemente no volveré a ver a muchos de mis amigos y profesores, es por eso que me tomo unos minutos extra con cada uno de los que pienso que extrañaré.
Bree, que está ayudando a Reese a colocarse el birrete, me descubre observándolas, así que viene hacia mí cuando termina de ayudarla.
—Ha sido un gran año, ¿no? —dice con una enorme sonrisa—. No te lo dije, pero oficialmente tengo un novio.
No puedo evitar sonreír igual de grande que ella.
—Eso me alegra mucho. Lo mereces, Bree.
Lo hace. Tal vez no nos hicimos realmente amigos hasta ese baile de navidad del año pasado, pero me alegra que hayamos compartido algunos buenos momentos. Y no, no hablo sobre el sexo, sino que los instantes antes o después de eso, cuando solo hablábamos. Allí fue donde realmente la conocí. Es una buena persona, pero ha sido algo maltratada por la vida, así que me alegro de que ahora tenga a alguien que, espero, la aprecie como se merece.
La abrazo y entonces veo a mis padres a una corta distancia. Ellos están con las Miller. Les sonrío y me despido de Bree antes de ir alcanzarlos.
—Deberían ponerse juntos para una foto —sugiere Diane, Shay y yo obedecemos—. Oh, Dios, lucen tan lindos. Quiero enmarcar esto, niños. No puedo creer lo rápido que ha pasado el tiempo, eran así —dice, indicando con su mano la altura de su cintura— cuando se conocieron. Y ahora...
—¡Mamá! —dice Shay—. No vayas a llorar, por favor.
—Lo siento, lo siento —Diane se limpia las lágrimas—. Es solo que estoy tan emocionada...
Ella abraza a Shay y yo sonrío mientras las veo hacerlo. Le doy una mirada a mis padres y me acerco a ellos para tener un abrazo en familia también. Papá susurra algo como que está muy orgulloso de mí y mamá solo repite lo mucho que me quiere.
Todo se siente tan correcto.
Pronto los padres deben irse a ocupar sus lugares, Shay y yo terminamos de acomodar nuestras togas y corremos a sentarnos en donde nos corresponde.
El principal Sullivan ya está en el estrado, haciendo la última llamada para el inicio de la ceremonia de promoción. Se me eriza la piel mientras doy una rápida mirada a mis compañeros. Shay está sentada en la fila de al lado, junto a Reese y el resto de nuestras compañeras.
Sonrío cuando nuestras miradas se encuentran.
—Estimados padres de familia, estudiantes, personal docente y administrativo del instituto Thomas Jefferson —inicia el principal Sullivan—, hace cuatro años iniciamos este viaje juntos. Y el día de hoy tengo el honor de estar aquí, nuevamente con ustedes, recordando esos pequeños rostros asustados del primer día y viendo cómo han madurado en este tiempo... —él continúa durante unos breves minutos más, hablando sobre las bromas que ha hecho nuestra generación, mencionando todo aquello que debe ser rememorado en un día como hoy y, finalmente, cuando parece que está a punto de llorar, él ríe—. Pero más importante que lo que siento en este momento, es lo que ustedes sienten al llegar este día.
»Es por eso que voy a pedirle al representante de su generación, el alumno con el mejor promedio y, quizá, el mismo del cual recibí la mayor cantidad de quejas por parte de los profesores —reímos—, tenga la amabilidad de subir a este estrado a dar unas palabras en nombre de sus compañeros —se aclara la garganta y todos guardamos silencio, esperando que diga el nombre—. Señor Matthew Elijah Adams, ¿nos hace los honores?
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Los planes de Axl Jones
Teen FictionTres años después de que la vida le arrebatara a su hermano mayor en un desafortunado accidente, Axl conoce a Shay. Con ocho años de edad, ella es pura chispa. Y es esa luz que ella irradia, más unas tiernas mejillas regordetas, lo que cautiv...