El Bien En Tu Interior [Descendientes/Carlos De Vil] LPDA #2

Prólogo

Auradon, la tierra de los finales felices.

O al menos, era lo que se creía hata aquel día. 

En un castillo conocido cono Auradon Prep, seis chicos miraban expectantes a un reloj en la pared. Calculaban que habían estado allí por lo menos unos veinte minutos esperando a una de sus amigos, una chica que esspecificamente portaba cabellos azules.  

Ella les había dicho que tenía algo importante que mostrarles y los mandó a reunirse en el aula de introducción a la bondad.

Entonces la vieron cruzar rápidamente por las puertas, emocionada y feliz, casi brincando en cada paso que daba hacia ellos.

—Evie, tenemos práctica de Tourney en 15 minutos si no llego y falto por tu culpa me la vas a deber. —dijo Jay, hijo  del villano Jafar, cruzándose de brazos.

—Lo siento, chicos —dijo Evie, con una sonrisa nerviosa en su rostro—. ¡Tenía que terminar algo y mostrarles esto!

Evie había traído consigo un gran block de dibujo y lo abrió en frente de los chicos mostrándoles unos varios diseños de ropa.

—¿Ropa? —Preguntó Carlos.

—No es sólo "ropa", Carlos. Esto es mi nueva y primera colección de ropa —dijo Evie sonriendo— Hablé con el hada madrina y me dio permiso a hacer un desfile aquí en Auradon prep.

—¿¡Una colección de ropa!? —preguntó Astrid junto a Carlos. Evie asintió.

—Pensé en lo que me dijiste hace unos meses, As. Y sí, me encantaría crear una industria de la moda. Algo así cómo Cruella, claro que no me volvería loca y secuestraría a 101 perritos —dijo Evie riendo cuándo dirigió su mirada a su amigo peliblanco/negro que subía una ceja y negaba—. Eso está mal..

Carlos sonrió divertido.

—Bueno... —dijo Mal— ¿Y cómo va todo esto?

—Lo llamo "La esencia de Evie", quiero que todos sean parte de esto ya que es muy importante para mi —dijo la peliazul—. Hice diseños para todos y quiero que estén en mi desfile.

—¿Hablas de modelar? —preguntó Ben y la chica asintió.

—Evie, linda —dijo Doug—. No me siento muy cómodo con eso de estar bajo un reflector...

—Tranquilo Doug —dijo Evie, tomando de la mano de su novio—. Tu me ayudarás a montar todo, confío en ti para eso.

El chico sonrió. Entonces la peliazul volvió a su amiga la castaña, y sonrió.

—Oh, Astrid —dijo Evie—. Tengo un diseño especial para ti, ya que en unos días es tu cumpleaños pensé en un vestido muy lindo, así podrías usar en la fiesta y...

—¡No! —gritaron Astrid, Carlos, Mal y Ben al unísono al escuchar eso lo que la hizo sobresaltar.

—Evie —dijo Astrid—. Lo agradezco y estaré muy feliz de usar cualquier cosa que me hagas, pero no, no habrá fiesta.

—Pero...—dijo la chica haciendo un puchero.

—Lo decidimos después de la última vez —dijo Ben—. Bueno, Astrid lo hizo.

─Ninguna fiesta para mi —dijo ella, con un asentimiento de cabeza—. A partir de ahora.

La hija de la reina malvada se miró dolida.

—Oh, vamos... ─se quejó Jay─ Arruinan la diversión.

—Es precaución...—dijo Astrid─ No queremos que alguien caiga dormido de nuevo.