La llegada

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Me siento tan feliz y emocionada por haber llegado a Gran Bretaña...tome mis maletas y me dirigí hacia fuera para tomar el bus, me di cuenta de que me había demorado mucho así que me puse a correr...pero voltee distraída y me tropecé con alguien.

-¡¡¡Ten más cuidado!!!-dijo Elena muy irritada-

-Perdóname por haber sido tan maleducado..-entonces vio a aquel chico y se quedó asombrada-

-Disculpe, ¿Está bien? quiere que le ayude en algo-Elena estaba a punto de decir algo cuando se dio cuenta que tenía que ir a tomar el bus, así que se fue corriendo antes de responder.

Elena iba sentada en el bus y no podía dejar de pensar en aquel chico que no se percataba en su alrededor. Hasta hizo que el viaje en bus fuera más rápido y en un parpadear ya se encontraba en el apartamento.

Al llegar todo era muy bonito, era pequeño y acogedor...tenía una cama que estaba separada con una pared a la cocina modular que se encontraba ahí. El baño era ni grande ni pequeño era perfecto tenía un lava manos y una ducha compacta, que era muy bonita por cierto.

Elena

Me quite los zapatos que ya me estaban matando y trate de organizar un poco mis cosas pero la verdad todavía seguía muy cansada por el viaje así que deje la maleta a un lado, me di una ducha y me tire en la cama. Me dormí en un instante.

Me desperté por culpa de la alarma infernal que había programado. Me duche rápido, no quería llegar tarde a mi primer día de clases. Después de me arregle y desayune algo...para ir a tomar el bus, y llegue justo a tiempo a la escuela sin problema alguno por suerte.

Entre a la escuela y saque el horario que me habían enviando por correo, fui por los pasillos en busca de mi clase cuando sentí algún tipo de incomodidad. Veía a todas las personas y me sentía en otro mundo, yo desencajaba en este lugar...era una escuela para ricos en la que había conseguido una beca, me sentí muy feliz pero a la vez triste por tener que dejar a mis amigas.

Pero no tenía tiempo de lamentos así que tome aire y fui en busca de mi clase, la encontré al instante no estaba era difícil llegar. Al entrar me senté atrás y espere a que la clase empezará.

La profesora entro y me presento...se sentía raro ser la nueva, todos te miraban como si vinieras de otro planeta o como si tuvieras monos en la cara. Pero no deje que eso me intimide, me presenté y me fui a sentar en mí sitio.

Deseos prohibidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora