¿Lista?

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Elena

Estaba sentada en la orilla de la cama del hospital con mi pequeña en frente mío, estaba esperando a que mis padres terminaran el papeleo del hospital, mis manos sudaban de lo nerviosa que estaba y me mordía las uñas...si una manía horrible pero que se le puede hacer. Sentía un malestar en mi estómago horrible por los nervios ni siquiera había probado un bocado en todo el día, sabia que todos estaban afuera esperando a que saliera y después llevarme a casa donde habría de seguro una fiesta sorpresa esperándome...que no era tan sorpresa porque es obvio que la habrá, pero mis nervios eran porque ya tendría que salir al mundo otra vez, tendría que volver a la escuela y ver la cara de culo de algunos profesores, tendría que volver otra vez a lo mismo y concentrarme más porque todavía no sé que mierda haré con mi vida...todavía no sé que coño voy a estudiar.

No sé qué haré, a que universidad entrare a donde me dirigiré si me quedaré aquí, no sabia que hacer. Sabia que al salir de esta habitación un montón de responsabilidades recaerían en mis hombros y tendría que preocuparme por todo otra vez, tenían miedo mucho miedo, tenía miedo de lo que pasará, tenía miedo de lo que me tendré que enfrentar, no sé si podré con todo eso nunca me había parado a pensar en nada de eso. En realidad siempre estaba con la mentalidad...ya lo decidiré después...pero no ahora no puedo decidirlo después ya llevo un año y siete meses aquí, me perdí la navidad, me lo perdí todo, hasta las estupida des vacaciones esas de una semana que nos dieron me perdí todo...

-¿Estás bien?-

Me sobresalté por la sorpresa y mire al frente donde se encontraba James con una sonrisa.

-Si...-fingí mi mejor sonrisa-

-No te preocupes...solo fueron tres meses-yo asentí y me pare para después tomar mi maleta-

-¿Quieres comer pastel de chocolate?-

-Tú si que sabes cómo alegrarme el día-dije con una sonrisa-

Al salir vi a mis padres esperando junto al coche, los dos estaban con una sonrisa tan grande que hasta me contagiaban a mi al llegar ellos me abrazaron fuertemente mientras me acariciaban el cabello y me decían cuanto les alegraba que estuviera aquí con ellos. Me subí en el asiento trasero con James y ellos en frente hablando de cosas que no me interesaban mucho que digamos, James tomo mi mano y comenzó a acariciarla levemente...yo le sonreí para después dirigir mi vista a la ventana y perderme en el fabuloso mundo de la imaginación.

-Elen...elen-me sobresalte en mi sitio y mire a James-

-¿Mm?-dije aún adormilada-

-Ya llegamos-susurro James-

Yo asentí y me bajé del auto, el me tomo de la mano y caminamos hacia el interior de la casa de los padres...en realidad me hubiera gustado irme al apartamento con James pero no quería que mis padres se pusiera dramáticos y pensaran mal, así también tengo tiempo para pensar un poco. Subí las escaleras con pesar ya que las odio con toda mi alma es un martirio subirlas...cuando sea rica y tenga mi propia casa le pondré escaleras eléctricas o un ascensor, llegue a mi habitación que estaba seleccionada con un papel rojo con letras negras que decía "BEBE AQUÍ" James solo hizo reírme y yo bufar molesta.

-Bebe...¿Quieres un vaso de leche? ¿O debería traerte un biberón?-pregunto James con notable sarcasmos-

-Pues a ti que te parece mejor, ¿que te deje sin hijos?, ¿o que te deje sin cuerdas vocales?-pregunte con mi típica sonrisa de maniática-

James río y se acercó para dejar un beso en mi frente.

-Me parece la opción de que me des un beso-

Deseos prohibidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora