Capítulo 2: Me llamo Daryl Dixon.

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La muchacha se despertó horas después. Estaba en una oscura habitación que, al mismo tiempo, tenía cierta... Luminosidad propia. A lo lejos, en la oscuridad, vio una sombra, su sombra, la de aquel muchacho que la había salvado. Tras un rato de silencio, repentinas mirada y sonrisas, él dijo:

Daryl: Ho....hola. Me llamo Daryl, Daryl Dixon.

Beth: Hola.... Yo... Me llamo Beth.

Pasaron varios minutos hasta que volvieron a mediar palabra. Y tras empezar a hablar, ya no pararon hasta un par de horas más tarde. Se contaron parte de sus vidas, sus miedos, sus secretos, sus deseos... todo. El joven le contó que, muy de vez en cuando, cuando ya no había animales por la zona a los que dar caza, secuestraban a una niña rica para pedir un rescate y así poder comer en lo que volvía haber comida en el bosque. Pedían cifras no muy grandes, tan solo lo suficiente para poder sobrevivir un determinado tiempo. También le contó que Merle era su hermano y que, aun que nunca fueron huérfanos, tan solo le había tenido a él. Pues, sus padres, nunca se habían preocupado por ellos. Le contó, incluso, que una vez se había perdido en el bosque, que llegó a casa y tan solo le dijeron que todos pensaron que se había ido de casa, con 10 años, que por eso no habían ido a buscarle. Esto enterneció a Beth. Aun que le extrañaba la confianza que se habían cogido en tan poco tiempo, esto le hizo pensar que, tal vez, nunca había podido contarle esto a nadie, seriamente. Ella, tras escucharle, le dijo que su vida no había sido tan difícil. Pero que tampoco había sido de color de rosa. Su hermana, mayor que ella, la cual se llamaba Maggie, se había intentado suicidar unas tres veces y que, tras la última, su madre convenció a Hershel, su padre, de que si no la hospitalizaban, esta, acabaría con su vida tarde o temprano. Le contó que su madre, un año después de los intentos de suicidio de su hermana, se había muerto. Bueno, la habían asesinado a sangre fría, torturándola antes de darle, por fin, el sueño eterno.

Justo cuando Beth terminó de contar esta última cosa, apareció Merle:

Merle:¡¡ Vamos, Daryl!! ¡¡Te necesito!! ¡¡La muy zorra se ha escapado!! Mmm... Lo bueno es que nadie conoce estos bosques mejor que nosotros. Venga. Encierra a tu zorrita y vayamos a buscarla sino se acabó el bussines .

Daryl: Te dejo sola un momento. Por favor, no te vayas...

Le miro con una cara que le derritió el alma a la joven e hizo que esta aceptara.

Beth: Está bien. Pero... No le vais a hacer daño, ¿no?

Daryl: Claro que no, tu estate tranquila.

Los dos hermanos salieron corriendo. Se separaron. Tras un rato buscándola, se encontraron y, de repente, allí estaba. Los dos gritaron:

Los Dixon: ¡Sophia! ¡Tranquila! Ven con nosotros, no te haremos daño. Además, tu sola, no sobrevivirás en el bosque.

Ella no les hizo caso y siguió corriendo. La siguieron un rato más y, cuando se cansaron, decidieron planear una distracción.

Daryl: ¡Sophia! ¡Soy Daryl! Merle se ha quedado atrás... Vente, yo te sacaré de aquí antes de que vuelva.

Sophia, tontamente, le creyó y fue hacia él. Pero, nada más llegar junto a al joven, este la aprisionó y, en menos de nada, apareció su hermano para ayudarle. Tras capturarla decidieron regresar, triunfales, a aquella casa.

Un Amor Complicado. (Bethyl) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora