21. Tobias

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Evelyn: vamos Tobías, es hora de despertar y levantarse.

Tobías: pero que más da? Si no podemos hacer nada.- haciendo gruñiditos- hace días que no duermo.

Evelyn: No seas vago, ya son más de las 9, has dormido suficiente.

Tobías: si, como 10 horas...

Evelyn: suficiente. Tenemos mucho de lo que hablar.

Tobías: pero...

Evelyn: arriba. Y date una ducha, seguro que también hace tiempo de eso, huele raro. Te lavaré la ropa.

Me rindo y me levantó, voy al baño, me desvisto y entro a la ducha. El agua es fría aunque mejor que que no hubiera. Además esta noche pasada ha hecho mucho calor y la fiebre de Zeke aún calentaba más la cama.

No se cuanto tiempo paso ahí pero es el suficiente como para por un momento poder olvidarme de todo lo que sucede a mi alrededor. El agua fría parece tener un efecto de morflina en mi cabeza, hasta que cierro el grifo, me pongo un albornoz, me seco un poco y salgo con la ropa en la mano.

Cojo la mochila de la ropa y saco la necesario y una vez me visto y voy a salir de la habitación algo me sorprende.

Zeke: creí que acordamos que esa ropa era para mí.- desde la cama, tumbado boca arriba con los ojos abiertos y el boxer todavia mal colocado.Tiene ambas manos bajo la almohada, una antigua costumbre suya. Habla casi en susurros.

Tobías: Zeke! ¿Como va esa pierna muchacho?¿que tal la noche?
Hay más ropa.

Zeke: No lo se, pero no me duele. Claro que eso también puede ser malo. Pero creo que mejor aunque no puedo moverla. No puedo moverme, estoy muy cansado, creo que voy a dormir un rato más.

Tobías: necesitas algo? Un poco de agua?

Zeke:nada, es raro pero no quiero nada. Por cierto, te odio Tobías Eaton ,pero gracias por hacerlo. Eso sí, como vuelvas a jurarmela te arranco la cabeza. -con una sonrisa- Aunque me ganaste suciamente eh. Aún siento ese último puñetazo.-con un gesto de dolor- Me vengaré.- cara indescriptible que sólo Zeke sabe poner-.

Tobías: yo también te quiero Pedrad, no fue tan fuerte, sólo...con toda la fuerza que pude. Si tú eres una nena no es mi culpa. Le hizo daño el puñetazo a la nena? Pobrecita.

Zeke: cabrón -con una sonrisa- aprende a jugar limpio.

Cuatro: pues sería antes de quedarte inconsciente y de no encontrártelos. Aunque claro...normal.

Zeke-. Empieza a reírse.- ¿Qué quieres decir? Fantasma.

Cuatro: te vas a arrepentir de decir eso.

Me lanzo sobre él y empezamos una peleita de broma encima de la cama.

A los pocos segundos. Zeke: ay para. Estoy malito. Déjame dormir.

Cuatro: nenaza.

Evelyn y yo desayunamos algo de los armarios mientras me pregunta como pasé la noche. Estamos en la cocina con las cortinas del patio interior abierta









Después me invita a intentar sintonizar algo en la radio junto a ella y encontramos algunas frecuencias. Pero según Evelyn menos que ayer. Todas hablan del ataque de los zombies a otras ciudades y el gobierno central tiene un plan de evacuación a gran escala. Baraja dos planes: evacuar a toda la población posible al sur o hacerlo a las islas.

Evelyn: Hay que prepararlo todo para cuando vengan. Tengo un par de maletas arriba, preparemoslas. Tu también llevabas unas mochilas ¿cierto?

Tobías: sí, es mejor prepararlo ya todo .

Unas horas después. Evelyn: llevale algo de comer a tu amigo.

Subo con una caja de galletas, una manzana y una botellita de agua de plástico. Está dormido y todavía en ropa interior.

Tobías: Tschss Zeke, despierta, te traje de comer.

Zeke: dejame dormir y dime que son estos agujeros- señala su cintura y su pierna.

Tobías: ayer te operamos, mi madre y yo , era necesario.

Zeke: Cuatro, ya sabes que no me gusta...

Tobías: lo se Zeke pero era necesario. Lo siento. Ahora come.

Zeke: no tengo hambre.

Tobías: evelyn me ha dicho que es normal por la operación , pero tienes que comer. Unas galletas por lo menos y un poco de agua.

Zeke come un puñado de galletas muy despacio y yo le obligó a comer unas cuantas más. En cambio si bebe suficiente agua.

Tobías: quieres bajar ya? Puedes ducharte y en la mochila hay ropa. Luego lavaremos la que ahora llevas.

Zeke: vale, sí. Voy a ducharme.

Tobías: necesitas ayuda para ir?

Zeke: no sabías que me amabas tanto Cuatro.

Tobías: te odio Pedrad. Por cierto, tapate un poco.

Cuando entiende lo que quiero decirle mira hacia abajo, hacia si mismo. Ve la mala colocación de su ropa y su primer instinto es taparse con ambas manos lo que me provoca risa y después que él se contagie de ella.

Zeke: ¿qué pasa?¿esto te pone...?

Cuatro: Estate quieto y duchate, estaré abajo.

Divergente zombieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora