Tenemos que llegar al laboratorio lo antes posible. Cada día que tardemos en llegar implica miles de muertes, de familias destruidas. Todavía recuerdo los primeros días. Esas imágenes jamás desaparecerán de mi mente. Y sin embargo, tengo que ser fuerte. El destino de parte de la humanidad puede estar en mis manos, debo protegerlo.
Pienso en todo ello mientras miro por la ventana de mi habitación en la buhardilla hasta que una mano toca mi hombro y me saca de mis pensamientos.
Richard: Señor Malden- digo poniéndome de pie - ¿qué desea?
Malden: Solo pasaba a preguntar cómo iba todo, aunque parece que no hay nadie más por aquí. Bueno, y traía café - dice entregándome un vaso- he dejado el resto en la cocina.
Richard: Han ido a dar una vuelta. Acaban de salir, tardarán un rato en volver.
Malden: ¿Puedo sentarme?- pregunta señalando a la otra silla que hay en mi habitación.
Richard: Por supuesto, como si estuviese en su casa.
Malden: ¿Cómo estás, Richard? El Inspector está demasiado concentrado en la misión como para caer en preguntar, pero yo estoy interesado en saber cómo están nuestros invitados.
Richard: Supongo que todo lo bien que se puede estar en el Apocalipsis.
En ese momento la radio de Malden comienza a sonar.
Malden: Disculpa un momento, por favor- dice saliendo de la habitación.
Richard: Sin problema.
Hace tiempo que no pruebo el café. Hubo una época, hace algunos años, en la que estuve muy enganchado. Cada día tomaba cuatro o cinco vasos. Después pude superarlo y casi lo abandoné. Sin embargo, ahora no es momento de quejarse y doy el primer sorbo. Está caliente, es del bueno.
Malden: Ya estoy aquí, parece que un soldado ha sido mordido mientras patrullaba por fuera del muro.
Richard: ¿Qué vais a hacer con él?
Malden: Seguir el protocolo.
Richard: Claro.
Malden: No te preocupes por él, será rápido y su muerte no será inútil. Aunque los dos sabemos que no estás preocupado por eso.
Comprendo a lo que se refiere inmediatamente, pero prefiero no contestar. En lugar de eso le doy otro sorbo al café y asiento.
Malden: Temes que al suero pueda pasarle algo y que se pierda para siempre.
Richard: Oh no, no, no. Ese no es el problema, me sé la fórmula de memoria. Lo que temo es que el virus sea demasiado fuerte y no funcione, al fin y al cabo es una esperanza vana.
Malden: Seguro que una mente tan maravillosa como la suya no habrá fallado en eso. Es increíble que sepa la fórmula.
Dando un último trago apuro el café.
Richard: Era del bueno. Sí, eso garantiza que aunque el suero se destruya puede volver a crearse, no debemos preocuparnos por ello.
Malden: No, por supuesto que no. Si me disculpa tengo que irme- anuncia poniéndose de pie.
Algo va mal, lo sé en cuanto Malden se pone de pie y entonces pienso en algo en lo que no había caído.
Le imito y me pongo de pie. Sin embargo mi movimiento es un poco torpe y tengo que sujetarme en la silla, supongo que por la falta de sueño.
Richard: Solo una duda señor Malden. ¿Por qué ha dejado el resto del café allí abajo antes de subir? Si no sabía si había nadie más...
Las ideas pasan velozmente por mi mente y apenas puedo encontrar las palabras adecuadas. Malden sin embargo comienza a reírse.
Malden: Lo dicho señor Diao, es usted muy inteligente, demasiado.
En ese instante lo comprendo todo. Comprendo el interés del Inspector por el suero, comprendo la visita de Malden, comprendo las preguntas que me ha hecho, comprendo a qué ha venido.
Richard: Sois del Triángulo. Has venido a matarme. Vas a matarme.
Malden: No Richard, ya lo he hecho. Y me llevaré esto si no te importa-dice cogiendo el vaso vacío.
Richard: Solo te ha faltado un detalle. No estoy solo. En la segunda planta hay un chico.
Malden:Lo sé, el hermano del enfermo. Y si no quieres que los dos mueran más te vale no armar jaleo. Pero intenta salir a pedir ayuda fuera si quieres.
Aceptó su invitación y me dirijo hacia la salida, sin embargo caigo. Mis piernas no obedecen a mis órdenes y no han podido mantenerme.
Richard: ¿Qué me has hecho?
Malden: Es una toxina. Provoca parálisis en las extremidades, sensación de ahogamiento, reducción de las constantes vitales y finalmente... bueno, ya sabes el final. Será rápido Richard, tuviste la oportunidad de colaborar con nosotros. Se te ofreció trabajar para el Triángulo y lo rechazaste, incluso nos llamaste locos.
Richard: Estáis locos. La vida vencerá a la muerte.
Voy a morir. Cada palabra me duele en la garganta y me empieza a faltar el aire. Pero me queda tanto por hacer... Lo único que puedo hacer es darle una pequeña oportunidad al mundo. Malden está acercándose a la salida.
Richard: Espera, la vacuna es falsa.
Malden se para y se gira hacia mí.
Malden: ¿Qué dices?
Richard: El suero es falso. Solo dije que funcionaría para que me protegieseis. Ayúdame...
Malden: Maldito cabrón. Te juro que si mientes mataré a todos tus amigos y si todavía está viva también a tu familia.
Richard: Es la verdad. No curará a nadie.
Malden: Entonces has muerto para nada. Buen camino, imbecil. Discúlpame si cierro la puerta, así no matarás a tus amigos. Simplemente te habrá dado un ataque al corazón, algo que por otra parte es verdad.
La puerta de la buhardilla se cierra y yo cuento los segundos. Después de unos veinte me atrevo a llamar a Uriah pero de mi voz solo sale un gemido ronco. Tampoco puedo llegar hasta la puerta, mi movilidad se reduce rápido.
Tengo que hacérselo saber. Tienen que saber que me han matado, que aquí corren peligro. Que tienen que sacar el suero y llevarlo a un sitio seguro. Le he mentido a Malden pero no sé qué hará ahora. Tal vez aún así destruya el suero. No se me ocurre la forma de hacérselo saber y mis ojos empiezan a querer cerrarse. Aunque hiciese algún gesto con mi cuerpo cuando me convierta en zombie desaparecerá.
El libro, la solución está en el libro. Tanteo con mi mano por el suelo hasta que lo encuentro. Cada movimiento me cuesta más que el anterior. Lo abro con una única mano que se mueve con espasmos y consigo arrancar algunas páginas.
Después mi corazón deja de latir y todo se oscurece.
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Divergente zombie
FanfictionLa sociedad ha vuelto a reconstruirse. Tris Prior y Tobías Eaton junto a sus conocidos habrán de enfrentarse a una nueva amenaza sin precedentes. Los dos primeros capítulos hablan desde el punto de vista de personajes que no aparecen en la saga. En...