"Alejandra se va."
Lauri:
Mi hermano se deshizo en el momento, sólo pudo ver a Alejandra marcharse por las escaleras, se metió al departamento y se encerró en su habitación apresuradamente, no le gustaba que nadie lo mirara sufrir, mucho menos personas que lo queríamos.
-¡Aki, por favor sal de ahí!.- Dije preocupado tocando a su puerta.
-¡Vete de aquí Lauri no quiero ver a nadie por ahora!.- Respondió desde el interior de la habitación.
-Aki, si la amas tanto ve a buscarla, no pudo ir lejos no tiene familia aquí seguro se fue al hotel del centro.- Dije tocando levemente la puerta.
-¡Te he dicho que te vayas de aquí!, me quería casara con ella.- Dijo con la voz quebrada.
-Vamos a hablar hermano, ¡abre la puerta, por favor!.- Insistí hasta que el picaporte giro y abrió la puerta Aki.
-Lauri.- Dijo inclinándose un poco a mí.
-¿Quieres hablar sobre esto?.- Pregunte algo preocupado.
-Si.- Dijo con los ojos llenos de lágrimas.
-¡Bien, vamos!.- Dije internándome en la habitación y cerrando la puerta.
El tomo asiento en la cama y yo a su lado, Aki era mi mejor amigo y nunca lo había visto tan desecho como aquel día, al borde del llanto de verdad amaba a Ale y se le notaba.
-No entiendo nada, estoy confundido, quiero morirme justo ahora, quiero comprenderla pero no logro hacerlo, sabes cuánto la quiero.- Dijo tomando su cabeza con ambas manos.
-Te comprendo, pero creo que si la quieres como dices, debiste seguirla y detenerla en lugar de encerrarte y culparte por algo que ni tú mismo entiendes.- Continúe.
-Lo sé, no sé qué me ocurrió nunca me había sentido de este modo, tú sabes que yo no me había enamorado desde que... bueno tú sabes desde que crei que Karin y yo...-
-Si comprendo, no te preocupes eso ya paso, pero quiero que entiendas una cosa, si la amas lucha por ella, si de verdad quieres que ella este contigo búscala y dile lo importante que es para ti, no te rindas así en la vida te encontraras con muchos baches quizá te sientes así porque nunca había discutido así o nunca se había mal entendido las cosas, quiero que entiendas que no tiene nada de malo sentirse mal y triste, no te guardes todo aquel sentimiento en tu corazón, sácalo nosotros te queremos y te apoyamos, no lo guardes sácalo que te hará daño.- Continúe mientras ponía mi mano sobre su espalda.
-¡No sabes cuanto amo a esa mujer!, desde que la vi aquella vez, aunque estaba con Oskari nunca vi lejos la posibilidad de tenerla a mi lado, sabía que era un error porque es primo de Karin, pero hubo algo que me llamo la atención de ella y que nos conectó al instante Lauri, ella era tan espontanea tan linda, era perfecta para mí y me arriesgue, con el tiempo yo fui conociéndola más y bueno paso lo que tenía que pasar, ella fue la que me dijo que quería intentarlo y olvidar su pasado, se decidió por mí y dejo a Oskari y ahora la perdí.- Dijo ya con lágrimas brotando de su mirada.
-¡No la has perdido Aki!, no seas necio, sabes que ella te ama, pero sólo tienen que hablar y aclarar la situación, no me gusta que estés así, sé que Ale te quiere y si no la buscas entonces si la perderás, no seas tontito amigo mío, la mujer es nuestra otra mitad y si tú la dejas ir como has decidido que ella te acompañara toda tu vida es como si te perdieras tú mismo, te lo digo por experiencia, de verdad no hagas de esto una tormenta cuando puede reducirse a una simple brisa.- Continúe tratando de reconfortarlo.
-Lauri, esta vez me vas a disculpar pero no entiendo, ya estoy mas que confundido y lo único que haces es confundirme más y si ella no quieres estar ya a mi lado lo aceptare, respetare su decisión y me olvidare completamente de todo y comenzare de nuevo.- Dijo poniéndose de pie mirándose al espejo.
-¡Dios que hombre tan necio eres!, la amás ve tras ella, ¡no entiendes que no podrás a amar a alguien igual!, te hará falta en cualquier momento y entonces te arrepentirás, si no me crees a mi pregúntale a quien quieras, te sentirás vacío, perdido y solo, nada te llenara ni siquiera un intento de amor, compréndelo.- Dije poniéndome de pie pretendiendo salir de la habitación.
-Lauri, yo entiendo que me quieras ayudar, pero creo que esto lo debo resolver por mi cuenta.- Dijo para que me detuviera.
-Como quieras hermano respeto tu decisión y cuando quieras hablar sabes que estaré para ti, no lo dudes, sólo piénsalo bien y no seas un tonto como lo fui yo en un tiempo.- Dije girando el picaporte para salir.
Todos esperaban afuera, Oskari se encontraba en la puerta del apartamento con Johanna y Karin.
-Lauri, nos vamos, gracias por todo y una disculpa rompimos la mesa de centro.- Dijo desde lejos.
-No te preocupes Oskari, cuando quieras puedes venir.- Dije algo serio acercándome al sofá para sentarme.
-Entiendo que estés molesto, pero no es para tanto dile a tu amigo que se calme.- continuo.
Entonces detuve mi camino a sentarme y me levante de nuevo. - Oskari no se en que momento te has vuelto tan prepotente, pero si tú crees que no es para tanto perder a una pareja con la que llevas más de un año por una tontería estas equivocado.- Dije molesto ya.
-En realidad se lo que siente, él me la quito primero, así que estamos a mano.- Dijo saliendo del apartamento muy serio y a la vez molesto.
-¡Que rayos le pasa a tu primo es un imbécil!.- Dijo señalando la puerta con mi mano furioso.
-Tranquilo Lauri.- Dijo Karin tomándome del pecho.
-Pues que le pasa, como se atreve es un... Bueno en fin, espero eso no lo haya escuchado Johanna creo que se arrepiente de haberla perdido, pero que rabia, hizo que discutieran.- Continúe.
-Lauri, Lauri no es tu asunto, ¡tranquilízate!.-Dijo Karin esquivándome mientras se dirigía a la cocina.
Ella no comprendía que quería a Aki como mi hermano, no sabía si seguía de malas por el embarazo pero me pareció que fue muy cortante conmigo y algo grosera o yo estaba de malas quizá, mi cabeza esta confundida y me sentí preocupado por mi amigo, solo quería ayudarlo.
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Un Solo Corazón
FanfictionLa bella historia de Karin una chica sencilla y tímida que es cautivada por un chico extraño de nombre Lauri Ylönen en el ultimo año de clases en la escuela secundaria, en el bello país de Finlandia. A partir de un pequeño tropiezo la vida de estos...