Capitulo 185

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"Cásate conmigo."

Karin:

Pasaban los meses veloces, y cuando menos lo creí yo ya tenía casi cinco meses de embarazo, comenzaba a dificultarme el caminar, Julietita tenía ya seis meses y era una niña maravillosa, ya se sostenía sentada y mi Lauri, lucia más hermoso que nunca, dejo por un momento las plumas y comenzó con un gorrito que se le veía divino, la felicidad se le notaba a simple vista, dio una entrevista y confirmo el embarazo de su esposa, según él en realidad no teníamos tiempo para pensar en eso o eso creía yo.

-¿Cómo te sientes hoy?.- Dijo Lauri entrando a la habitación mientras yo le daba de comer a Julietita.

-Bien, siempre me siento bien Lauri, no te preocupes.- Dije alegre.

-¡Oh amor!, cuando aprenderás que ella, ya sabe tomar su biberón, te lastimaras.- Dijo quitándome a Julietita de los brazos.

-Hay, lo sé pero adoro hacerlo.- Le respondí.

-La mal acostumbraras, verdad, hay niña traviesa.- Decia, mientras lanzaba a Julietita al techo.

-Un día la tiraras, ¡no hagas eso!.- Dije levantándome de la cama cuidadosamente y con mucho trabajo.

- ¡Claro que no, ella sabe que no!, verdad que noo.- Dijo muy seguro de sí. -¿A dónde vas?.-

-Al sanitario...- Dije aun tratando de levantarme.

-¿Te he dicho lo hermosa que luces así de redondita?.- Dijo mientras caminaba lentamente frente a él.

-¡Me estás diciendo gorda de nuevo!, sólo atente a las consecuencias Ylönen...- Dije riendo un poco.

-¡Huy, mucho miedo!.- Dijo mientras me veía caminar y se mordía el labio.

Cuando volví del sanitario Lauri se encontraba de pie en medio de la habitación, mirando al lado contrario del pasillo.

-¿Te ocurre algo?.- Dije tocándole el hombro.

Cuando el volteo tenía un cuervo en el brazo.

-¡Dios!, ¿qué es eso Lauri?.- Dije caminado hacia atrás muy espantada.

-Tranquila amor, relájate.- Dijon con una mirada preocupada.

Dime que no has dejado que la bebe toque esa cosa!.- Dije muy asustada.

Lauri comenzó a reír. -¡Tranquila, es un cuervo!.-

-Claro y por eso me altero, es extraño, dime que no es la nueva mascota.-

-No, él solo quiere darte algo.- Dijo acercándome a mí.

Cuando mire bien el pico del ave tenía en él un anillo, yo mire a Lauri y él sonreía muy tiernamente mientras me miraba, yo logre tranquilizarme y sonreí levemente, no es que le temiera a los cuervos pero ver uno de repente si es de asustarse.

-Pero, ¿qué es esto?.- Dije algo sorprendida.

-Bueno pues ya que no podremos ir a Rusia por el momento, creo que podría cumplirte otro de los sueños que tienes.- Dijo tomando el anillo en su mano.

Después Aki salió de la habitación con una video cámara al pasillo.
-Esto quedara para siempre grabado.-

Lauri me miro hizo un movimiento con la mano e hizo que el cuervo volara a la sala, se acercó a mí y sonrió ligeramente.

-Karin, ¿quieres ser mi esposa?.- Dijo después de un suspiro.

-Yo, yo, ¡claro que sí!, no se para que me lo preguntas si sabes que si.- Dije lanzándomele al cuello.

-Tranquila, te vas a lastimar...- Dijo preocupado, cuidando mi barriga.

La palabra casarte conmigo, ya la había escuchado de la boca de Lauri, pero el sentimiento no cambiaba y el volverlo escuchar era maravilloso, era lo único que nos faltaba para concluir con esta historia de pruebas y tragedias impidiendo que estuviésemos juntos, al fin podríamos decir que seriamos una pareja y lo mejor seriamos una familia muy feliz, nadie nos impedía el estar juntos o al menos por el momento.

¿Como seria la boda, con una ballena en lugar de novia?.

Un Solo CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora