P.D.V. NORMAL:
Mientras que Stiles y Derek caminaban por el bosque, cierta Nigromante se había encontrado con una visita indeseable, en realidad eran tres indeseables para ser muy exactos. Dos hombres y una mujer a los que deseaba no tener que volver a ver.
- ¿Cómo va el entrenamiento? - Le preguntó la mujer.
- Bien - Fue lo único que respondió la chica.
- Pues no estamos viendo muchos avances - Agregó uno de los hombres.
- ¿Has visto que el chico ataque a alguien? No, por lo tanto mi entrenamiento va bien y te sugiero que te metas en tus asuntos o yo te mandaré de una patada de nuevo a Irlanda.
- Niña insolente, si el consejo estuviera aquí...
- Pero no están aquí - Lo interrumpió la Nigromante - Por lo tanto yo soy el ser mas poderoso en este continente y ustedes deben respetar mi palabra como ley.
Ninguno de los dos hombres habló, en cambio ser quedaron viendo a la mujer, la cual soltó una carcajada. La Nigromante levantó una ceja sin entender aquella risa, era muy molesta y aguda para su gusto, por eso le caían mal las brujas.
- Ay cariño ¿Hablas en serio? Lo siento, es que es difícil tomarte en cuenta con esa apariencia de niñata.
- Para mi es un placer verte con esta apariencia de persona, tu nariz es mucho mas pequeña que cuando debo mirarte con tu feo rostro normal ¿Nunca has pensado en arreglarte la cara? Podrías operarte esa nariz de tucán.
- ¡SILENCIO! - Le ordenó la mujer molesta.
Micaela sonrió, la cosa mas placentera para ella era exasperar a esa estúpida bruja que se creía mucho y era muy poco, mucho ruido y pocas nueces, dirían las personas de ese siglo. Aquellos tres idiotas habían sido enviados para controlar el entrenamiento o asesinato y evitar que ella intentara cualquier cosa que pudiera provocarles problemas. Pero la Nigromante era inteligente, todos los entrenamientos eran a escondidas y nadie podía saber cuando o donde serían.
- Deberías acelerar el proceso de entrenamiento o matarlo de una vez - Dijo el otro hombre que hasta ahora no había hablado.
- Solo debo matarlo si algo sale mal, pero por ahora todo está bien y aún si algo no sale bien es mi decisión matarlo o no.
Los dos hombre bufaron para luego darse media vuelta e irse del lugar, la bruja en cambio se acercó a la Nigromante y con una sonrisa le susurró al oído.
- No podrás protegerlo, no lo lograste con la alfa Hale y no lo lograrás con este chico.
La de cabello castaño empujó a la bruja lejos de ella y esta soltó una carcajada, la chica frunció el seño y desapareció del lugar teletransportándose. El tema de su amiga Talia era algo tabú para ella y por lo tanto el consejo había prohibido que cualquiera mencionara el entrenamiento que había hecho pasar a la loba cuando aún era muy joven. A pesar de lo difícil que fue el entrenamiento la loba logró aprobarlo con creces, además de haberse ganado el aprecio de uno de los pocos Nigromantes que quedaban.
En pocas palabras Talia se ganó un lugar en el corazón de una criatura incapaz de amar, lo cual era un logro aún mas grande que nacer con la condición de alfa, cosa que Talia también había logrado. Pero siempre que muchas cosas buenas pasan en la vida de alguien algo muy malo pasará luego para emparejar la balanza, en este caso fue la muerte de la loba y de casi toda su familia en ese maldito incendio lo que emparejó las cosas.
La Nigromante decidió que no debía molestar a Stiles por el momento, podía sentir la esencia del Nogitsune y este estaba tranquilo. Además de que al chico de cabello castaño parecía atraerle el lobo Hale, no quería interrumpir su momento junto, hacían una bonita pareja (Fujoshi Mode: On 7w7).