[NARRADOR]
Para ambos, Stiles y Derek, el momento de la boda llegó demasiado rápido. Ambos estaban al borde de un ataque de pánico, aunque no estaban juntos, y eso era peor.
Como la religión no estaba a favor del matrimonio igualitario, la boda no iba a ser en una iglesia. Sino en el bosque, detrás de la recién recostruída mansión Hale, con todos sus amigos y seres queridos. Aunque fueran casi todos de parte de Stiles.
Deaton sería quien se encargase de unirles hasta que la muerte les separase. Aunque para Derek no era necesario, él no planeaba dejar ir a Stiles. Pero era una formalidad.
El lobo se encontraba en una de las habitaciones de su casa, vistiéndose mientras intentaba que su corazón latiera de manera normal. Peter estaba sentado en un sofá a pocos metros de él, observándole con una sonrisa burlona mientras observaba a su sobrino ir de un lado al otro mientras luchaba con la corbata.
- ¿Estás nervioso? -Le preguntó el mayor, aunque era una pregunta obviamente cabciosa.
- No, solo tiemblo porque estoy en modo vibrador.
- Se te está pegando el sarcasmo de Stiles -Le recriminó el mayor.- Y no estoy seguro hasta qué punto eso es bueno.
Al ver la frustración de su sobrino, el cual no conseguía ajustarse bien la corbata. El mayor sonrió y se puso de pie, caminando hacia su sobrino y cogiendo la corbata para ayudarle.
- Pasan los años y tú aún no puedes hacer este tipo de cosas sin mi ayuda -Se burló el mayor mientras hacía bien el nudo.
- Menos mal que aún tienes buen pulso para hacer el nudo -Le siguió la broma su sobrino.
- Yo te quiero mucho sobrino... -Casi le ahorca con el nudo de la corbata.- Pero vuelve a siquiera insinuar que estoy viejo y la pequeña Emma crecerá sin padre.
Derek rió mientras tosía, ya que su tío le había dejado sin aire.
- ¿Ya estás más tranquilo? -Preguntó, volviendo a sonreír.
- Si -Asintió Derek.- Gracias por ayudarme.
- Cuando quieras, a menos que necesites dinero -Peter negó.- En esas circunstancias fingiré que no te conozco.
La puerta fue golpeada varias veces y Peter fue quien abrió. Encontrándose con Liam, el cual también luchaba con el nudo de su corbata.
- Aish... Estos jovenes de hoy en día -Dijo bufando mientras le ayudaba a hacerse el nudo.- Ya está ¿Para qué viniste?
- Y-yo... -Liam estaba algo sonrojado por la anterior cercanía.- Vine a avisaros que ya es hora.
Derek se puso tenso al escuchar aquello ¿Ya era hora? Pero apenas y se había acabado de vestir.
Antes de que pudiera murmurar un no estoy listo, Peter le cogió del brazo y le arrastró fuera de la casa. Donde se encontraron a Stiles en las mismas circunstancias, pero siendo arrastrado por Scott.
Al verse, ambos se quedaron embobados.
- Luego se comen con la mirada -Dijo Peter, arruinando el momento.- Ahora tienen que caminar hacia Deaton y sonreír como la pareja feliz que estan por ser ¿Entendido?
- Si señor -Dijo Stiles poniéndose derecho.
Ambos se pusieron uno al lado del otro, clavando la vista en Deaton.
- ¿Estáis listos? -Les preguntó Lydia, ambos asintieron.
La pelirroja hizo una seña con la mano y la música comenzó nupcial comenzó a sonar, haciendo que quienes se encontraban sentados de espaldas a ellos voltearan a verles.
Ambos comenzaron a caminar hacia el altar, observando las sonrisas de los presentes. Cora, la cual cargaba a Emma, les guiñó un ojo mientras que a su lado Parrish y la Nigromante grababan todo. Jordan muy concentrado y Micaela intentando no reír mientras el hombre a su lado luchaba para no soltar la cámara por accidente.
- Te ves muy bien -Le murmuró Stiles mirándole de reojo.- Yo apenas pude atarme la corbata.
Derek vio la sonrisa burlona de Peter, quien les miraba desde el altar. Por un lado se encontraban Peter, Liam y Malia quienes eran algo así como los dos padrinos y la dama de honor de Derek. Mientras que por el otro lado estaban Scott, Lydia y Isaac, los cuales le sonreían risueños.
Llegaron frente a Deaton y se colocaron uno junto al otro. Con sus brazos tocándose ligeramente.
- Se ven bien -Les elogió el Druida en un murmullo.- ¿Están listos para empezar?
Ambos asintieron nuevamente, por lo que Alan carraspeó y se apresuró a comenzar a recitar los votos. Era lo mismo que les dirían en una iglesia, solo que sin las partes en las que se nombraba a Dios o al establecimiento, ya que según les había dicho el Druida no estaba autorizado para decir esas partes.
- Derek Hale, aceptas a Stiles Stilinski tu esposo para amarle y respetarle hasta que la muerte los separe.
- Acepto.
- Y tú, Stiles, aceptas a Derek como tu esposo para...
- Por supuesto que si, acepto -Le interrumpió el menor.
Boyd les alcanzó los anillos para luego volver a sentarse junto a Erika. Ambos intercambiaron anillos con algo de nerviosismo.
- Muy bien, sin más que decir los declaro oficialmente casados -Alan sonrió.- Ya pueden besarse.
Ambos sonrieron e hicieron lo dicho, se besaron como nunca lo habían hecho antes. Momento en el que los invitados comenzaron a aplaudir y a vitorearles.
- ¡Ese es mi sobrino! -Gritó Peter.
- ¡Ese es mi hijo! -Se escuchó gritar a John.
La recién nombrada pareja matrimonial se separó y se miraron sonrientes para luego desviar la vista hacia los invitados. Quienes gritaban y vitoreaban eufóricos a los recién casados.
— ¿Qué sigue ahora? –Preguntó Derek mientras sonreía hacia la cámara con la que les apuntaba el Sheriff.
— Lydia nos preparó una fiesta sorpresa –Le informó Stiles.— No le digas que te dije y finge sorpresa, a menos que quieras enviudar tan pronto.
— Será una larga noche.
— Y que lo digas –El ojimiel rió.— No van a dejarnos en paz.
Para la siguiente foto, ambos fueron con Emma y la cogieron en brazos. La niña viéndose más adorable que nunca en la primera foto familiar.
NOTA DE LA AUTORA:
¡Ya se casaron! ¿Se nota que soy malísima describiendo bodas? Porque lo soy, soy muy mala en esto.
En fin, sin más que decirles me despido deseándoles un buen resto del día y mandándoles muchos besos y abrazos para todos. Adiós mi linda manada.
