...... 6 de diciembre ......
Justamente, a mi hermano se le ocurrió la grandiosa idea de avisarme que íbamos a la boda de nuestra prima Emily, a las 3:00 de la madrugada. Y yo, de boba, estaba arreglándome y escogiendo lo que me iba a poner a las 4:00 am. Además, para colmo teníamos que pasar buscando a mis mamá y hermana, a las 5:00 a.m. Esto era un desastre.
-Aaaah -Grité de frustración desde mi baño .
Terminé de maquillarme, salí del baño para ver el gran desorden que tenía en mi cuarto. Estaba muy cansada para ir a una boda. QUE POR CIERTO, SE CELEBRABA EN OTRO ESTADO. Leslie se le había ocurrido la maravillosa idea de comprometernos a ambos para ir. Y yo, no quería. Yo no había dormido en toda la noche y tenía unas ojeras que me llegaban al piso.
Fuí a la cama para ponerme el vestido rosa pálido que había escogido, los tacones blancos y un suéter azul neutro.
Cuando llegue a la cocina, vi a mi bobo hermano tratar de ponerse un lazo rojo, pero, obviamente, no pudo hacer nada. Se giró para verme.
-¿Me ayudas? -Preguntó él de mala gana.
-¿Haces el desayuno?
-¿Müesli? -Puso ojos de cachorrito.
-Bueno, si -Me acerqué a él. Tomé su lazo rojo y se lo arreglé-. Listo, quiero mi muesli con durazno.
-Ya voy, tirana -Viré los ojos.
Ya eran las 5:19 am y todavía no salíamos del edificio. Leslie no encontraba las llaves. Yo estaba cerca de la entrada del apartamento, recostada de una pared, pensando donde mi BOBO hermano, podía haber dejado la llaves. De alguna extraña manera, las conseguimos en la lavadora.
Después de recoger a mis mamá y hermana, fuimos a buscar a Jenn, éste se tardó como 15 minutos en salir, y Leslie se desesperó tanto que entró a la casa de los padres de Jenn, y entre regaños y jalones de orejas, logró sacarlo y montarlo en el auto.
Eran las 9:48 de la mañana, y todavía no llegábamos. La boda empezaba a las 10:30. Jenn no paraba de decirle a Leslie que se había equivocado de ruta. Mi mamá decía que no iba a llegar a tiempo para saludar a la novia antes de que se casara. Leslie estaba super frustrado. Camila decía que se moría de hambre. Y yo, por mi parte, tenía los audífonos puestos.
Ya eran las 10:24, y ya casi llegábamos a la iglesia, en donde se celebraría la boda. Solo faltaban dos calles, cuando un caucho se espichó. Todos nos movimos hacia adelante por el impacto. Nos bajamos del auto para ver qué pasaba. Leslie nos dijo a mi mamá, a mi hermana y a mí, que camináramos hasta la Iglesia, entráramos y avisáramos que ellos estaban afuera cambiándole el caucho al auto.
Logramos llegar a la iglesia, cuando entramos vimos que todos se estaban arreglando en sus asientos, mi mamá caminó hacia mi tía para avisarle lo de mi hermano, Camila fue a sentarse, y yo, iba detrás de ella, cuando alguien me agarró por el antebrazo, y me llevó a rastras.
-Tu prima te está esperando desde hace una hora -Cuando logré ver a la persona que me hablaba, me di cuenta de que era su mejor amiga, Madison, que hasta donde sabía era la madrina de su boda.
-Okay -Respondí tratando de recobrar la postura. Madison abrió la puerta del cuarto donde estaba la novia. Me empujó hacia adentro y trancó la puerta.
Escuché a Emily sollozando y la vi sentada en uno de los sofás del cuarto. Tenía un vestido de novia blanco, largo y ancho. Su cabello estaba rizado.
-Hola -Salude tímidamente. Ella quito las manos de su cara...-. Dios mío -Se me escapo un comentario, al ver como tenia las sombras de ojos corrida por toda la cara-. ¿Qué paso? -Me acerqué a ella.
-Es que... Es que... -No lograba entender lo que decía, estaba balbuceando mucho.
-Tranquilízate... Respira -Dije.
-Yo perdí los anillos -Logró decirme.
-¿Qué? Espera, ¿qué? -Estaba impresionada-. ¿Que hacías tu, la novia, con los anillos?
-Yo los agarré ayer, cuando me fui a la despedida de soltera, los deje en el cuarto y hoy cuando fui a buscarlos ya no estaban, he buscado todo el día los anillos, nadie los ha encontrado.
-Dios -Esto era malo, a la familia Jabil (la familia del novio) era muy perfeccionistas y si algo salía mal, ellos se pondrían furiosos-. Bueno, tranquila. No te preocupes, todo saldrá bien. Yo trataré de buscarlos.
-Ya no hay tiempo...
-Bueno, tranquilízate, déjame arreglarte. Si algo pasa, yo te apoyaré en todo momento -Dije tomando un mecho de su pelo para arreglarlo.
-Está bien -Ella se estaba quitando las lágrimas de la cara.
Le limpié la cara con un paño, le maquillé, de forma mas natural y sencilla, ya que nuestra querida madrina no vino a ayudar a la novia. Después de arreglarla, hice que se viera al espejo intentando subirle la autoestima.
Salí del cuarto para ver si ya había empezado el evento, por lo visto, si, fui al cuarto para avisarle que saliera, yo entré al salón, cuando logré ver a Leslie a lo lejos, corrí hacia donde él estaba sentado. Me había guardado un puesto al lado suyo.
-Hola -Le susurré.
Comenzó a sonar la música y entró la novia con su padre al lado. Cuando llegó al altar, Rafael (el novio) le sonrió y a ella se le notaban los nervios a leguas. La música paró, el novio se puso de rodillas sacó de su pantalón algo y después tomó la mano de su prometida.
-Emily Martin -La nombró y... Al parecer, tenía los anillos, QUE EMILY HABIA PERDIDO, en su mano-. Desde que te vi, supe que seríamos el uno para el otro. Yo, realmente, te amo -Mientras lo decía, le ponía el anillo. Los ojos de Emily sé agrandaron. Y el se puso de pie otra vez, sonriendo.
-Eres... -Le temblaba la voz-. Eres...
-¿Increíble? -Sus aires de grandeza se sentían en todo el lugar-. Lo sé.
-Dios, éste no sabe en qué se ha metido -Pensé *Me golpee la cabeza mentalmente*
Leslie me tomó la mano, si alguien sabía como se ponía Camila cuando estaba enojada, era Leslie.
-Tu eres un idiota -Y, comenzaron a salírsele las lágrimas de los ojos-. Estuve todo el día preocupada, y habías sido tú. Tu -Resaltó ese "tu" poniendo una cara como de loca-. Eras tú quien los tenías. Yo no puedo con esto. ¿Es que acaso lo hiciste a propósito? Me asustaste. Perturbaste mi paz. Tu, Rafael jabil, eres el mal de las novias en persona. Me voy -Dijo bajándose del altar-. No me voy a casar con alguien como tú-Lo señaló con el ramo de flores que tenía en su mano y salió corriendo del lugar.
Y, todo esto pasó, mientras Leslie y yo, nos moríamos de la risa. Mi prima era muy inestable emocionalmente. Y, al parecer esto le afectó mucho.
En caminó para dejar a mi mamá y a Camila, ellas no paraban de decir que sabían que Rafael no era para mi prima, mientras que Leslie y yo no parábamos de hablar sobre lo que había pasado.
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Un amor de Invierno
RomanceUn invierno, en navidad y dentro de una ciudad. Un accidente, en un centro comercial. Conoce a Bannen, una chica que pasara alrededor de 31 días de diciembre, para conocer al hombre con el cual amara con toda su alma. ¿Así que dices? ¿...