14. Opuestos unidos

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...... 14 de diciembre ......

Cuando desperté, revisé la hora en mi teléfono, éste que eran la 1:20 de la madrugada, y recordé que estaba en Escocia, así que miré por la ventana y cuando bajé mi mirada hasta el suelo de la pista quedé impactada, estabamos, literalmente, encima de una capa de nieve al menos de 30 cm, miré a los otros aviones y vi que las ruedas de estos, no llegaban a enterrarse en la capa de nieva.

-¿Le sorprende? -Miré hacia el asiento delante de mí, Dante me sonreía y sus ojos azules estaban mas oscuros de lo normal.

Volví a mirar por la ventana.

-Sí -Respondí en un susurro.

-Sin duda, es impresionante. En escocia, la navidad es fría, pero los meses de enero y febrero son los mas fríos.

-Ya veo. Sin duda, este país es increíble -Dije y Dante se rió entre dientes.

En la cafetería del aeropuerto, comí algo para llenar mi estómago, mientras veía a un montón de Escoceses caminar a mi lado, y me daba cuenta que la gran mayoría eran albinos pelirrojos, y eso era raro para mí, me sentía como si estuviera en una convención de pelirrojos y yo no era pelirroja.

-Los castaños son escasos en Escocia, señorita Bannen -Dijo Dante.

-Jeje... Wow, me siento intimidada -Declaré.

-Me imagino. Tranquila, le prometo que nadie la discriminará por castaña, señorita Bannen -Y me guiñó el ojo. Yo solo reí y asentí moviendo la cabeza.

-Eso espero -No podía dejar de sonreír.

Me llegó un mensaje, saqué mi telefono del bolso y desbloqueé la pantalla, para ver el  mensaje.

¨Buenos días, señorita. Soy Rupper y ¿Quería saber cuando podremos encontrarnos?

  Le respondí, diciendo que ahorita estaba en el aeropuerto de Edimburgo (Capital de Escocia), y que él podía decidir, ya que yo no conocía Escocia. Unos minutos después, él respondió, diciendo que estaba cerca; así que le dije, que podía verme allí  mismo en el aeropuerto.

¨Entonces en 10 minutos estoy en la entrada del aeropuerto¨ Respondió.

-¿Cuándo nos pasarán buscando? -Pregunté.

-Ya el chofer está afuera, en la entrada. Cuando usted quiera.

-Okay, ¿Te importaría, si, eh... Nos quedamos unos 10 minutos más?

-No, señorita Bannen - me contestó.

Dante era rubio, a diferencia de las grandes masas de pelirrojos que nos rodeaban, había visto uno que otro rubio/a, pero la mayoría era pelirrojo. La mayoría de las personas eran pálidas, pero Dante estaba bronceado. Realmente, él tenía pinta de ser alemán o inglés, pero no escocés, será por el hecho de no parecerse a un típico escocés, o no sé.

Después de que pasaron los diez minutos, nos fuimos caminando a la entrada, donde había un hombre pelirrojo, con un cartel con mi nombre. Salimos del lugar, y mientras estábamos caminando vi el carro negro donde nos íbamos a ir, le di mi maleta a chofer y saqué mi teléfono del bolso para llamar a Rupper.

Sonó dos veces y él contestó.

-Ya estoy aquí -Fue lo primero que dijo-. Estoy caminando hacia la entrada. Eh... tengo un abrigo blanco.

-Yo estoy cerca de un auto negro, estoy vestida con un abrigo marrón y un gorro rosa.

-Ya creo que te veo -Y, colgó.

Y, a lo lejos lo vi, era un hombre pelinegro, pálido, un poco más pequeño que Dante, pero a pesar de la distancia, pude ver esos ojos azules, tan característicos de Dante, tal vez era coincidencia, pensé.

Cuando logró estar a una distancia considerable, me habló.

-Hola -Respiraba por la boca.

-Hola -Mi respuesta fue casi inaudible.

-Soy Rupper -Se presentó.

-Rupper... -Oí la voz de Dante detrás de mí.

-Eh... ¿Qué? -Me giré hacia Dante-. ¿Ustedes se conocen?

-Algo así... -Respondió Rupper.

-El es mi hermano por parte de padre -Esta vez habló Dante.

-Exacto -Dijo Rupper.

  Y yo me quedé mirándolos a los por unos segundos, eran muy opuestos, lo único en que se parecían era en el color de sus ojos, pero todo lo demás parecía ser totalmente diferente, y cuando digo diferentes, me refiero a que ellos parecían ser uno el opuesto del otro, Dante era bronceado de cabello amarillo puro, y Rupert era pálido de cabello azabache. Eran como el blanco y el negro.

-¿Los dos son Butler?

-Sí -Respondieron los dos al mismo tiempo.

-Eh.. Aquí esta tu bolsa -Me mostró la bolsa donde antes había metido el libro.

-Si, aquí esta la tuya -Le extendí la mano con su bolsa.

-Gracias -Respondió apurado-. Yo realmente lo siento, pero me tengo que ir, nos veremos después.

-Hasta luego.

-Nos vemos en la noche -Habló Dante.

-Señorita, Hermano -Asintió y se fue.

Miré a Dante.

-Esto fue raro -Anuncié.

-Lo sé. Bueno, no hay tiempo que perder, así que entre -Me ordenó.

-Como usted diga, Señor formalidad.

-Como usted quiera, mi fiel acompañante.



Un amor de InviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora