12. PELEA

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12. PELEA

- No me puedo creer que hayas cogido el abrigo de invierno. - dijo Ari apoyando su peso sobre una pierna y con los brazos cruzados mirando las puertas del ascensor que nos llevaría al ático de los padres de Julian, donde se hacía la fiesta otra vez. Puse los ojos en blanco. Otra vez con eso.

Había descubierto que Ariana, cuando no estaba con Matt, era ligeramente más simpática. Había vuelto a prestarme un vestido pero esta vez me negué a llevar la chaqueta de verano que me dio la última vez. También me había librado del maquillaje aunque no de la sesión de peluquería de Ariana ni de los zapatos de tacón.

- Recuerda lo que te he dicho. - empecé ignorando su queja. - No vayáis a ningún lugar donde no haya nadie y no bebas demasiado. - ahora era el turno de Ari para poner los ojos en blanco.

- Que sí, pesada. Matt no es así.

- Ya... no me fío de él. - las puertas se abrieron y entramos a la sala llena de personas.

Una cosa tenía que decir: Julian sabía cómo organizar fiestas. Ari se fue a saludar a Matt y yo decidí mirar si encontraba a Julian. Lo encontré en la cocina repartiendo bebidas como la última vez.

- Hola Sofia. ¿Hace mucho que llegaste? - saludó cogiendo aún más bebidas de un armario. ¿Sus padres no se daban cuenta o no les importaba? Me senté en un taburete y me quité la chaqueta y la dejé en la encimera. Quizás si había sido mala idea llevarla pero al menos cuando saliera no tendría frío. Julian me ofreció una bebida pero yo la rechacé amablemente

- Ari y yo acabamos de llegar.

- ¿Ari ya ha llegado? ¿Dónde está? - dijo poniéndose de puntillas para ver a través de la puerta y de toda la gente que estaba allí.

- Se fue con Matt. - involuntariamente hice una mueca y Julian la vio. Sonrió ante mi gesto.

- Si. - imitó la mueca.

- Es que no la entiendo. - dejé caer mi cabeza sobre la mesa dramáticamente. - No tiene sentido lo que hace. Estaría mucho mejor con alguien como tú. - Ups... se me había escapado. No había sido mi intención decirle eso.

- ¿Por qué alguien como yo? - buena disimulación, Julian. Pero a mí no me engañas.

- Se te nota mucho mucho. - Julian iba a responder cuando alguien más entró en la cocina.

- ¡Dame otra bebida! - exigió Lily. No eran ni las doce y aparentemente Lily ya iba borracha.

- Dios mio, no. No le des nada más hasta que no se haya calmado un poco. - dije levantándome del taburete y cogiendo a Lily antes que pudiera llegar donde estaba Julian. Julian rió cuando Lily gritó "¡Sofia!" y me abrazó. - ¿Por qué todos terminan así?

- Porque así son mis fiestas. Nos vemos por allí. - me gritó cuando salí arrastrando a Lily detrás de mí.

- Sofia tengo que hacer pis. - Espera, ¿qué?

- ¿Qué? Dios. Y supongo que no sabes cómo llegar al baño, ¿estoy en lo correcto? - Lily asintió con una sonrisa en su rostro. Suspiré y la cogí del brazo para guiarla arriba, donde recordaba de la última vez que había los baños. Cuando llegamos al primer piso, Lily se deshizo de mi agarre y tambaleó hasta los dormitorios. - ¿Pero no tenías que usar el baño?

- No ya no. - retrocedió hasta apoyarse por encima de la barandilla de la escalera y miró hacia abajo, como si estuviera buscando a alguien. Su estado de ánimo había pasado de estar cantando y bailando a estar triste. Aún no sabía por qué pero tenía la impresión que me iba a enterar enseguida. - No le importan mis sentimientos. - dijo de repente. Me acerqué y me puse a su lado. Seguí su mirada. Había un montón de gente pero los que destacaban más eran Louis y Violet que se estaban besando en medio de todo el mundo. - No me quito de la cabeza cuando me besó. Todo el tiempo pienso en cuando me besó. No me lo puedo quitar de la cabeza.

Agente LewisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora