21. OPERACIÓN LOULY

13.8K 1K 112
                                    

21. OPERACIÓN LOULY

- No sé cómo lo hiciste. - dijo Lily indignada mientras le aguantaba la puerta de la cafetería Starbucks para que pudiera pasar.

Su mal humor se daba al hecho que nos habían dado las notas de los exámenes parciales y estudiando sólo el finde anterior había sacado más o menos las mismas notas que ella.

- Utilizaste chuletas, ¿verdad? - sacudí mi cabeza - Que sí. Seguro que tus amigos esp... - le pisé el pie con fuerza para que se callara y por suerte cogió mi indirecta y se calló.

Cuando estábamos las dos solas o si estábamos con Ari no pasaba nada si decía algo de mis "amigos espías" cómo los llamaba ella. Pero en un lugar público con mucha gente como ahora una cafetería un viernes por la tarde sí que suponía un problema.

Lily se había tomado todo ese tema de "mi amiga es una espía" bastante bien. Yo esperaba que se distanciara de mí pero ella no hizo tal cosa sino que se interesaba por el tema. En parte también era normal porque de repente enterarse que el gobierno emplea menores de edad te dejaba con preguntas.

La dependienta me entregó mi bebida con el nombre "Sophia". ¿Por qué tenía todo el mundo esa manía de escribir mi nombre con "ph" en lugar de "f"? Era la segunda vez que me pasaba en Starbucks y esta vez les había dicho que mi nombre se escribía con "f".

Lily y yo nos sentamos en la misma mesa donde nos habíamos sentado con Alice semanas antes. Ahora que me acordaba, hacía mucho tiempo que Alice y yo no hablábamos. Tendría que mandarle un mensaje o llamarla ese finde.

Lily empezó a hablar de algo pero yo no la estaba escuchando, seguía pensando en un buen método para poder dejar a Louis y a Lily solos, al menos durante un rato. La excusa la tenía porque me había dejado a propósito el regalo de Ari en casa. Sonreí para mí misma cuando vi que Chase y Louis aparcaban sus motos delante de Starbucks. Cuando faltara poco para la fiesta de Ari, podría convencer a Chase para que me llevara a casa. Bueno, a casa no porque no quería que nadie supiera donde vivo, por motivos de seguridad. Pero quizás podría llamar a James y quedar con él en algún lugar para que me llevara el regalo allí. De ese modo, Louis y Lily podrían estar solos durante un rato y quizás ir juntos a la fiesta que se celebraba en casa de Ari.

- Lils, ya están aquí. - dije señalándolos con la cabeza. Lily los siguió con la mirada hasta que se sentaron a nuestra mesa.

- Hola Sopia. - dijo el gracioso, ejem sarcasmo ejem, de Louis después de ver el nombre de mi vaso. Puse los ojos en blanco y me eché a un lado para que Chase se pudiera sentar a mí lado mientras Louis se sentaba al lado de Lily. Paso 1, completado.

- ¿Por qué no le enseñas lo que han escrito en tu vaso? - le preguntó Chase.

- ¡Chase! - se quejó Louis - Se suponía que no tenías que decir nada.

- Lo siento, amigo, pero tenía que defender mi causa.

- Déjame ver. - dije arrebatiendole el vaso de sus manos.

El nombre Louis era bastante común, ¿con qué podría alguien confundirlo? Rompí a reír cuando vi lo que la dependienta le había escrito con su rotulador negro. Ponía "Lewis" en lugar de "Louis".

- Lo veis, no soy el único que piensa eso. - se rió Chase refiriéndose al tiempo en el que estaba en el hospital y había remarcado que el nombre de Louis y mi apellido se pronunciaban igual. Lily también empezó a reír cuando lo vio.

- No me había dado cuenta antes.

- Os odio a todos. - dijo Louis sonriendo y sacudiendo su cabeza sentándose al lado de Lily.


En general la tarde pasó bien. Los de Starbucks tuvieron que avisarnos dos veces para que bajáramos el tono de voz porque "estábamos molestando a los demás clientes". Se podría decir que hicimos caso omiso.

- En media hora deberíamos ir tirando.

- ¿A dónde? - me hice la tonta. Ese era mi momento.

- ¿La fiesta de cumpleaños de tu amiga quizás? - preguntó Louis sarcásticamente.

- ¡Mierda! - exageré llevando mis manos a mi cabeza. - Me lo he dejado en casa.

- Muy lista para unas cosas pero muy tonta para las otras. - me levanté de mi silla con la intención de darle un golpe (no muy fuerte) en la cabeza pero Chase hizo que volviera a sentarme antes que tuviera la oportunidad.

- No hace falta ponerse violenta, mujer. - dijo Louis con una sonrisa satisfactoria en su rostro.

- Ya te llevo yo. - se ofreció Chase.

- ¿Enserio? - él asintió - Gracias.

Me había quitado un problema de encima, si se ofrecía no tenía que pedirle yo.

- Mejor nos vemos allí. - dije cogiendo mi chaqueta y siguiéndolo fuera.

Antes de cerrar la puerta detrás de mí, vi la mirada asesina que me dedicó Lily, y la mirada aliviada de la dependienta de Starbucks.

Saqué mi teléfono de mi bolsillo y marqué el número de teléfono de mi hermano. Con un poco de suerte estaría en casa.

- Oh, mira, al fin te acuerdas de que tienes una familia a quién nunca ves. - dijo James en la otra línea del teléfono.

- James necesito que me hagas un favor.

- Solo me llamas cuando me necesitas. - dramatizó mi hermano.

- Necesito que vayas a mi habitación y cojas el regalo que hay encima de mi cama.

- Oh, me has hecho un regalo, no hacía falta, hermanita.

- No es para ti, idiota. - me reí. - ¿Puedes cogerlo y llevarlo a Hyde Park?

- Bueno, como soy tonto no sé si sabré el camino...

- Guapo, listo, porfis.

- Vaaaaaleeeeeee.

- Gracias, adiós.

Colgué y acepté el casco que me estaba ofreciendo Chase.

- ¿Quién era? - preguntó.

- Mi hermano. Llevará el regalo a Hyde Park. - Chase asintió y subió a su moto.

Ahora mi plan ya no me gustaba tanto. La verdad era que tenía un cierto pánico a las motos desde que me caí cuando nos enseñaban a conducirlas en la MI5 durante nuestro entrenamiento. Por culpa de esa moto, me había pasado dos días en la cama. Pero ese no era el momento de discutir mi miedo a las motos así que me puse el casco y subí detrás de Chase.


- ¿Y ese casco? - preguntó James dándome el regalo.

- Es suyo. - dije señalando Chase quien estaba a mi lado.

James no había venido solo, cómo no, había venido también Austin. Seguramente lo había llevado él.

- ¿Cenas en casa esta noche? - preguntó mi hermano dándome el regalo de Ari. Yo sacudí mi cabeza.

- Tengo una fiesta de cumpleaños.

- ¿Cómo puede ser que mi hermana pequeña salga más que yo?

- Porque soy más guay que tú. Llegamos tarde, nos vamos. - le di un beso a la mejilla a mi hermano y uno a Austin (también en la mejilla por si alguien se lo pregunta). Y luego arrastré a Chase de nuevo hasta la moto. Todavía me daba un poco de miedo pero ahora ya no tanto como antes.

-----------------------------------------

NOTA DE AUTOR CORTA PORQUE TENGO PRISAA

ESPERO QUE OS GUSTE EL CAPITULO Y LA SEMANA QUE VIENE QUIZÁS NO PODRÉ SUBIR PORQUE ES CARNAVAL Y DESFILO EN MUCHOS LUGARES

BESOOS BEL<3

Agente LewisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora