El Guardaespalda

Capitulo 46

Pov Anastasia

4 Meses después...

Llevamos media hora en el auto, recorriendo un camino de hermosa vegetación, una suave musica nos acompaña y nuestras manos van entrelazadas...

- No me vas a decir donde vamos?- lo miro de reojo, niega y luego sonríe,- Por que?,- hago un puchero.

- Dejaría de ser sorpresa,- besa rápidamente mi mano,- Pero se que te va a gustar,- dice, acaricio mi vientre cuando siento que Teddy me patea, hace unas semanas que nos enteramos que va ser un niño y estamos feliz con la noticia.

Paramos frente a un gran portón, Christian baja el cristal y pone un código, las puertas se abren dándonos vista a un gran jardín, luego estacionamos frente a una imponente casa.

- Llegamos,- sonríe y baja del auto, le da la vuelta para abrir mi puerta, me ayuda a bajar del auto y arreglo mi vestido premama rosado.

- Quien vive aquí?- digo confundida.

- Nosotros,- dice fingiendo inocencia, lo miro sorprendido y el se encoge de hombros.

- Christian...,- protesto,- Como que?...- me interrumpe, no puedo creer que haya comprado esta enorme casa.

- Quieres hecharle un vistazo?,- yo asiento, entramos a la casa y damos un minucioso recorrido por los dos pisos, sala habitaciones, cocina, sala de estar, comedor, piscina y solo existe una sola palabra para definirla " hermosa", realmente me encanta desde la habitación principal hay una vista a la costa, me imagino que ver el atardecer aquí seria grandioso.

- Te gusta?- dice Christian abrazandome por la espalda y acaricia do mi vientre.

- Es hermosa,- susurro recargando mi cabeza en su pechó.

- Eso es un si?- besa mi cuello y manda una deliciosa corriente por todo mi cuerpo, me pongo frente a el, llevo mis manos a su cuello y las hundo en su sedoso pelo.

- Si,- le digo, el sonríe para luego besarme despacio, con ternura, tomándose su tiempo para saborear mis labios,- Sabias que te Amo,- susurro pegadita a sus labios.

- Siii,- besa la punta de mi nariz y la besa,- Yo también te Amo,- me vuelve a besar...

Estamos en la pradera disfrutando de un maravilloso atardecer, estoy sentada entre las piernas de Christian, mientras el acaricia mi vientre.

-Cuando nos mudamos?- le doy un sorbo al jugo de arándanos que Consuelo puso en la cesta de picni.

- Cuando gustes, solo tenemos que ver lo de los mueble,- me dice y besa mi cabeza.

- Mañana me pongo en eso,- le digo.

- Usted es la que manda Señora Grey...

Estoy en la ducha de espaldas, mis manos recargadas en los  azulejos de la pared, siento como Christian entra y sale de mi despacio mientras acaricia nos pechos, pero yo lo deseo todo, lo quiero rapido, necesito  liberarme...

- Mas rapido,- gimo.

- Despacio nena,- dice con voz ronca el también desea moverse pero tiene miedo a lastimarnos, de un solo movimiento lo entro todo en mi.- Por Dios...

- Mas por favor, no me voy a romper,- le digo, lo escucho gruñir y empieza a moverse de verdad lo siento entero, mis sensibles pesones son torturados con sus dedos, mi cuerpo se empieza a tensar y siento como se contrae sobre su miembro.

- Damelo nena,- me pide, mí cuerpo obedece y estallo en un alucinante orgasmo, gritando su nombre " Christian", con dos embestidas mas el grita mi nombre y me llena de el,- Ohhh nena, eso fue genial,- besa mi espalda y todo mi cuerpo tiembla cuando sale de mi...

Salimos de la ducha y me envuelve en una toalla, me ayuda a ponerme una en la cabeza para secar mi pelo, me lleva hacia la cama para secarlo con el secador.

- Amor yo lo puedo hacer,- le digo.

- Y que pasa si yo quiero consentir a mi esposa...

Pov Christian

Gracias a las personas de la tienda de muebles, la familia de Ana y la mía la mudanza fue todo un éxito, estuve muy al pendiente de Ana y Elliot de Kathe ya que eran capaces de ponerse a trabajar en la mudanza.

Ahora estamos todos disfrutando de una deliciosa parillada, cervezas y anécdotas mientras vemos el atardecer.

- Hijo la casa esta hermosa,- dice mi madre y sonríe, yo solo asiento,- Tu no puedes ocultar lo feliz que estas.

- Así es madre,- la abrazo por los hombros,- Nunca pensé ser tan feliz como lo soy ahora,- unas manos conocidas me abrazan por la espalda y siento la misma corriente que hace tres años sentí cuando la toque por primera vez, volteo a mirarla y tiene una hermosa sonrisa en su rostro,- Hola preciosa,- le digo, mi madre se excusa y nos deja solos.

- Hola corazón,- besa mi mejilla,- Me encanta esta vista,- dice poniéndose delante de mi, la abrazo y ella recarga su cuerpo en el mio.

- A mi me encanta que te encante,- beso su pelo,- Todo lo que fui, todo lo que soy y todo lo que seré lo quiero contigo, le doy gracias a Dios y a la vida por haberte puesto en mi camino,- ella se da la vuelta y queda frente a mi.

- Christian...- le doy un casto beso.

- Tu eres lo mejor que me pudo pasar en la vida y te prometo que me dedicaré en cuerpo y alma a ti y a mis hijos,- le digo.

- Hijos?- pregunta con ternura.

- Si quiero niños corriendo por la pradera, riendo, jugando... quiero todo pero que sea a tu lado,- veo sus ojos cristalizarse.- Nunca pensé que un trabajo de guardaespaldas me pudiera cambiar la vida y no te imaginas lo feliz que soy...

-  Hey tortolos vamos a comer,- grita Elliot.

- Ya vamos,- le digo, tomo la cara de Ana entre mis manos,- Te Amo princesa.

- Te Amo, Christian, mi esposo, mi amigo, mi amante, mi Guardaespaldas...

Fin...