Mi Telequinesis © [En Edición]

Capítulo 31

Tres días han pasado, mi brazo va sanando, pero me he tenido que tomar un montón de calmantes para el dolor.

Colton me ha mandado todos estos días mensajes con Winnie, quien me los sigue entregando a regañadientes, ella no quiere que tenga mucho contacto con él, pero cada vez que recibo una nota solo logro alegrarme. 

Por mientras dibujo, Winnie me ha concedido sus hojas y lápices y aprovecho de hacer algunos garabatos, dibujo lo primero que se me viene a la mente, a veces son cosas extrañas, pero lo sigo haciendo como si así pudiera sacarme el remolino que tengo en mi cabeza.

Hoy no he ido a desayunar porque me dijeron que me quedara en cama, pero no pienso permitir que no me dejen ir a almorzar, necesito hablar con Colton y el almuerzo es mi única oportunidad para verlo, así que cuando viene Lilly a avisarme, yo ya me encuentro en pie para ir. 

—Deberías estar acostada, yo te traeré el almuerzo.

—No estoy enferma como para no ir al comedor, hoy almorzare con las demás —no le hago caso a sus negaciones y salgo. 

No me gusta pasar mucho tiempo dentro de la habitación, eso acrecienta la sensación de que estoy encerrada. 

Winnie se pone feliz de verme recuperaba, hasta yo me siento mejor. La comida que he recibido estos días ha sido más contundente y eso me ha mantenido en buen estado, espero recuperar peso y ponerme fuerte. Winnie no se sienta conmigo porque sabe que vendrá Colton y no quiere estar a mi lado cuando el aparezca.

Colton aparece por la puerta y me sorprende ver también a Jacob, no me mira y se dirige a hablar con alguien, Colton se pone en mi visión y se sienta.

— ¿Cómo está todo? —pregunta casi en un susurro —supe lo de la pelea con Cassey, una semana en la caja ¡Vaya!, nadie sabe exactamente qué fue lo que paso entre ustedes dos, debe haber sido grave.

—¿No tienes idea de los detalles? Pensé que con tanto rumor, ya lo sabrías.

En todas las notas que nos hicimos llegar, en ninguna le escribí lo que me había sucedido, si lo hacía podía levantar una falsa alarma y rumores que se distorsionan. 

Mueve la cabeza hacia ambos lados.

—Discutimos y eso termino en una pelea, Cassey no encontró mejor manera de desquitarse que enterrándome un pedazo de mesa en el brazo, me pusieron puntos y me han dado un montón de calmantes —intento no decirlo tan dramáticamente pero no da resultado, suena como si estuviera preparando una venganza, cosa que no es así, increíblemente gracias a Cassey y a la herida pude saber dónde se encuentra el pabellón de los cuidados.

— ¿Qué te enterró qué? —pregunta sorprendido — ¿y cómo fue que sucedió eso? ¿Qué mierda tiene esa chica en la cabeza?

—Fui yo la que la incito a hacerlo. 

— ¿Y por qué? —frunce el ceño — ¿Qué pretendías con todo eso? ¿Acaso eres masoquista?

—Necesitaba averiguar dónde queda el pabellón de los cuidados y no tenía idea donde ni como comenzar a buscar, así que deje que me lastimara lo suficiente como para que los enfermeros me llevaran haya sin cuestionar, y lo hicieron, sin esa herida no hubiese podido encontrarlo.

—¿Así que te dejaste lastimar a propósito? no tenía idea que podías ser tan...

— ¿Tan qué?

—Tan arriesgada —me mira el brazo — ¿ahora te encuentras mejor?

—Sí, aún tengo vendada la herida, pero estoy bien.