ATLOZ FANFIC. La viajera de otro mundo III. La princesa del crepúsculo.

Capitulo 1.

Y fue entonces que todo se puso oscuro...

¿Quién soy?

Mel- oí en mi mente, abrí mis párpados de una manera lenta mientras miraba mis pequeñas manos, todo esto no me concordaba en nada.

¿Dónde estoy?

Hyrule- volvieron tres distintas voces que, juntas, se formaba un melodioso sonido.

Estaba empapada, mis manos se encontraban en algo líquido y transparente.

¿Qué es eso?

Agua de la fuente de Latoan- susurraron de nuevo, aquella refrescante sensación en mis palmas llevó escalofríos placenteros por toda mi espalda, a mi lado, se encontraba un animal...

Zero, tu caballo- dijeron.

Me levanté con torpeza del suelo, para luego revisarme, mis ropas, rojas, mis cabellos, sueltos, llevé mi mano a mi cintura, esperanzada por encontrar algo de suma importancia para mí, pero pasé mis dedos por mi cinturón sin encontrar nada.

-¿Quién sois?- preguntaron a lo lejos

Levanté la mirada, sólo para encontrarme con un muchacho, al parecer de mi edad, quien me veía con unos ojos azules muy bonitos, su imagen llenó de alegría a mi corazón, quien latió como loco, pero mis pensamientos no lograban dar con la verdad, ¿Quién era él para mí? ¿Qué era lo que tenía aquel como para darme esa cantidad de energía solo con verle?

-Mel- contesté indecisa

-¡Qué bonito nombre!- gritó aquel enérgico chico, corriendo hasta mí- ¡¿De dónde eres?!

No supe qué contestar, no supe nada...

Negué con la cabeza, insegura de decirle algo.

-¡Link!- gritó un hombre quien llegó corriendo hasta la entrada del lugar al que las voces de mi cabeza llamaron "Fuente de Latoan"

-¡Señor Moy!- dijo con algo de miedo en su voz

-¡¿Qué te dije de salir corriendo?! ¡No puedes hacerlo!

-Pe-pero...

-¡Sin objeciones! ¡No habrá entrenamiento de espadachín en una semana!

-¡No! ¡No lo vuelvo hacer!- gritó aquel niño moviéndose y dejándome ver a tal hombre que desvió su vista hacia mi dirección- ¿Quién es la pequeña que te acompaña?- cambió el tono de su voz a uno dulce, como el de un padre

-¡Se llama Mel!- contestó aquel chico llamado Link

-¿Mel?- volvió con asombro- como el...- hizo una pausa, pero sin continuar lo que iba a decir...- Vale, muchacha, ¿De dónde eres?

Aquella pregunta me congeló de nuevo, tomé por el crin al caballo que se encontraba a mi lado y me traté de esconder, tenía miedo, a ese hombre no le conocía, no me inspiraba confianza...

-No tengas miedo, no muerdo- contestó sarcástico

-No... no sé

-¿Cómo que no sabes?

-N-no sé... ¿Qué es este lugar? ¿Por qué me trajeron aquí?

-¿Quiénes?- preguntó el chico

-No sé...

-¿Y tus padres?- hizo una pausa, sólo para verme volver a negar con mi rostro- Tendrás Amnesia...- susurró el señor Moy- vamos pequeña, todo está bien ahora- todo en mi cabeza daba vueltas, ¿creer o no en un sujeto que apenas acabo de conocer? ¿Por qué ese niño me miraba con aquellos ojos llenos de curiosidad? ¿De dónde era? ¿Por qué no puedo recordar a mis padres?