ATLOZ FANFIC. La viajera de otro mundo III. La princesa del crepúsculo.

Capitulo 6.

Capitulo 6.

-¿Qué tal estás? – preguntó mi compañero entrando por aquella puerta, lo que me separaba de todos.

-Mejor- contesté sin mirarlo, no tenía las agallas para enfrentármele después de aquella demostración de afecto

-Pues espero que mejores y pronto, Link y yo hemos decidido avanzar sin tu ayuda- comentó Midna cruzándose de brazos, tomando su forma pequeña.

-¿Qué?- pregunté anonadada- No, ya me levanto y me cambio para poder ir con ustedes

-¡Mel!- regañó Link- lamento decirte esto, pero esta vez estoy de lado de Midna, no voy a ponerte en riesgo

-¡Estoy en riesgo en cualquier jodida parte de Hyrule! ¡Ni aquí, ni en Ordon, NI EN MI PUTA MENTE estoy a salvo! – grité levantándome con violencia, ocasionando que mis heridas ardiesen como el mismísimo infierno, el dolor me hizo perder el equilibrio y caí. Link me detuvo justo a tiempo.

-Mel, entiende maldita sea

-Has arriesgado todo...- comencé y aquel abrió la boca para protestar, pero al segundo la cerraría, al notar cómo lo miraba, deshice su agarre con cuidado- déjame arriesgarlo todo esta vez por ti.

Zelda...

Todo lo que noté fue una mano golpear mi mejilla izquierda, aquello hizo que comenzaran las lágrimas a caer.

Link miraba hacia otro lado

-Deja de decir estupideces- volvió serio – te quedas aquí y no discutiremos mas – dijo finalmente y salió del lugar.

Lo miré sin poderme mover, y me senté en la cama.

Suspiré y la presión en mi cabeza aumentaba, como si la desesperación estuviera tomando el control de todo mi ser. Tal vez porque las heridas me revelaron una parte importante de mi pasado, o meramente fue un sueño.

"Mel" – comentó Dark apareciendo delante de mí – "Recuperarás tu memoria" –hizo una pausa – "Lo quiera o no, tú volverás a ser tú, pero a veces mi otro yo es un estúpido" – concluyó

-¿A qué te refieres? – Pregunté en voz alta, mirándolo fijamente – Link no es ningún estúpido

"Ahora mismo lo defiendes" – volteó su mirada a la pared – "pero llegará un día en el que te aburrirás y lo dejarás por lo estúpido que es"

No lo entendí, simplemente traté de procesar aquella información...

-¿Por qué me llamaste Zelda? – Pregunté cambiando de tema – Te escuché... antes que Link... - llevé mi mano a mi mejilla.

"Es una manera de burlarme de ti"- hizo una pausa – "Me he dado cuenta de muchas cosas... y tú no eres la princesa... ni siquiera su reencarnación"

Allí fue donde mi mente cedió y caí dormida

-Vaya, la sombra se dio cuenta – oí seguido de una risita.

Abrí los ojos como platos, observando el techo, mi herida mágicamente había desaparecido y pude ponerme en pie sin ayuda alguna, me encontraba en un lugar algo alejado de mi realidad.

-Estás en el templo de las almas – volvió la misma voz – Mel, suspiro de las diosas

-¿Quién sois vos? – Pregunté mirando aquella mujer de buen cuerpo, vestido blanco, ojos rosados y cabello lila - ¿Por qué me habéis traído aquí?